La reeducación de Areana (3)
Areana recibe su primer castigo a manos de Amalia y un velo comienza a correrse lentamente en su interior más profundo.
Una hora después la niebla comenzaba a disiparse en el cerebro de Areana. Abrió los ojos y la pesadez de sus párpados la agobió tanto como el advertir que estaba en medio de la oscuridad, echada no supo dónde. Quiso ponerse de pie y su cabeza dio contra el techo de la cucha. Soltó una puteada, se sentó y cuando sus ojos fueron acostumbrándose a la penumbra se dio cuenta de que estaba en una especie de pequeñísima casita con techo a dos aguas y había una manta en el piso. Se dio cuenta también de que estaba...