La reeducación de Areana (15)

Va a comenzar el emputecimiento definitivo de Areana y su madre, que en su casa recibirán varias visitas diarias bajo la supervisión de Milena

Mientras bebían el trago de despedida, Zelmira aconsejó a Amalia cómo incorporar la zoofilia al uso que hacía de sus perras. Le sugirió la compra de un gran danés y le obsequió un frasquito con esencia de flujo de perra en celo.

-Cuando vaya a entregar a sus perras por primera vez al animal, únteles la concha con esta esencia. El animal se volverá loco cuando las huela y a partir de allí quedará cebado con ellas y ya no hará falta que vuelva a untarlas con esta pócima mágica. –dijo la dueña de casa ec...

Dominada... ¿Yo?

Algunas personas dicen que segundas partes nunca fueron mejores, en mi caso, no podrian estar mas equivocados mi segunda vez con mi dominante...

Nunca pensé que experimentar la sumisión abriría para mí un mundo nuevo y lleno de sensaciones y emociones indescriptibles, no quiero mentir con románticas visiones de lo que es en realidad el BDSM ya que no todo es placentero ni todo es disfrutable, pero creo que es algo común en todo en nuestra vida, cada placer tiene una cuota de sacrificio, sean nuestros estudios, nuestro trabajo o en mi caso, mi vida sexual con El.

La primera noche me había dejado con muchas interrogantes, no solo por como El me...

Lo que él quería era a una puta.

Emputecimiento de una esclava

A mí Amo le conocí a través de un chat, como veis un sistema nada original. Llevaba ya algo más de medio año como su esclava. La verdad era que me llenaba completamente nuestra relación.

Era sábado por la tarde y habíamos quedado. Vendría a recogerme a mi casa, como casi siempre, era bastante atento con eso. Me puse una camiseta de tirantes que sabía que le gustaba y una minifalda o cinturón, no sé muy bien, siguiendo sus órdenes.

Me recogió en su coche, era alto, de complexión delgada, pero con...

Mi zorrita experimenta nuevas sensaciones

Mi zorrita sigue contando sus nuevas experiencias... Todo,como siempre,100% real...

La piel me ardía en deseo. Mi cuerpo, aún temblando, estaba dispuesto a seguir recibiendo más placer. Mis pezones doloridos querían sentir de nuevo el roce de su lengua.

Aún tumbada boca abajo en la cama y con los ojos vendados, noté el peso de su cuerpo sobre el mío. Su polla, sin penetrarme, rozaba mi coño y mi culo, cosa que me excitaba y me entraban ganas de quitarme el antifaz, darme la vuelta, atarle y follarle de nuevo viéndole la cara y correrme todas las veces que quisiera, obligándole a esta...

Donde nacen las esclavas III

Sofía despierta desconcertada, ¿Qué había pasado? Su nueva vida estaba a punto de comenzar...

Sofía sentía frío. Empezó a abrir los ojos, poco a poco, entre fuertes dolores de cabeza, ¿Qué había pasado?

No sabía bien donde estaba, parecía... ¿Barrotes? Aún no veía con claridad y, donde se encontraba no había ninguna luz.

Intentó mirar alrededor pero no le sirvió de mucho, intentó moverse, pero había algo que la bloqueada esos... barrotes estaban por todos lados, no tenía mucho sitio para moverse. Algo la molestaba en el cuello, se acarició de las manos y se encontró con una especie de co...

Abogada, casada e insatisfecha .

Consumación.

Juan notó como vibraba el teléfono en su bolsillo, lo sacó y vio que era su mujer quien le llamaba, estaba comiendo en un restaurante cerca de su oficina.

  • Hola ...- dijo con voz temblorosa, la mañana ya había comenzado superándole, lleno de excitación y celos se encontraba nervioso y excitado por el devenir de los acontecimientos, el rápido emputecimiento de su mujer y como el mismo estaba asumiendo sus cuernos le€ asustaba y excitaba a partes iguales.

  • Hola cornudo, soy Laura, como estas pas...

Irene la luchadora 4: espectáculo.

Irene y Xana van a un espectáculo de lucha femenina que se celebra en la ciudad, para que la joven luchadora vaya viendo a lo que se deberá enfrentar en el momento de la verdad

Irene la luchadora 4: espectáculo.

Irene y Xana van a un espectáculo de lucha femenina que se celebra en la ciudad, para que la joven luchadora vaya viendo a lo que se deberá enfrentar en el momento de la verdad…

Irene bajó de su piso a todo correr cuando vio cómo su móvil comenzó a vibrar sobre la mesa del salón de su humilde apartamento, parando después de dar dos tonos; aquella era la señal que Xana le había indicado para que supiera que ya estaba esperándola abajo, con su vehículo.

La...

Una diosa llamada Venus. Capítulo 17

Un nuevo día y nuevas amigas... o conocidas, al menos.

17.- PRIMER AMANECER EN LA ISLA.

Me despertó una sensación extraña en mis labios. Me sacó de un sueño dulce en el que Venus y yo éramos iguales y no me trataba como al esclavo que, de hecho, era. Paseaba de su mano por un campo de nubes violeta, al final del cual nos esperaba una mesa de picnic… pero nunca llegamos. Antes, esa cosa dura seguía empujando en la entrada de mi boca. Abrí los ojos. Era de noche y solo una tenue penumbra se filtraba por la ventana. Encima de mí tenía a Venus. Delante de...

Mi jefe me convierte en su zorrita2

Me subo a la mesa ante él, abro mis piernas apoyando un pie en cada rodilla suya me abro y despacio subo mi vestidito. El jefe se levanta y desde atrás saca mis tetas del vestido. que te parece mi zorrita? le pregunta a su amigo.

Sigo con la historia de cómo mi jefe seguía convirtiéndome en su zorrita, como habíamos quedado el día antes, nos teníamos que encontrar en su despacho, por la mañana llegue y antes de subir a los despachos, salude a mi madre y a sus amigas, todas me pidieron que tal era el jefe en casa, si ellas supieran pensé.

Tras hablar un rato con ellas subí arriba, me había puesto un vestidito de verano, por encima de las rodillas, de lo más normalito, nada sexi, lo único que salía de lo normal, era que no lleva...

Mi jefe quiere convertirme en su zorrita

Me empujo por los hombros hasta conseguir ponerme de rodillas, vi que se desabrochaba el pantalón. Y apareció ante mí una hermosa polla, enorme. Empezó a masturbarse ante mi cara

Llevaba meses sin encontrar un trabajo decente. Desde la inmobiliaria no había vuelto a trabajar todo un mes entero.

Fui a pasar un fin de semana a casa de mi madre y el viernes la fui a buscar al trabajo, allí me presento a sus compañeras. En ese momento bajo su jefe del despacho de arriba, también me presento.

Era un hombre de unos cincuenta y muchos o sesenta y pocos bien llevados.  Estrecho mi mano a modo de saludo y se quedó cerca del grupo hablando con una mujer.

Yo les contaba a mis...