Pagando con el propio trabajo 2

La chica sigue pagando con su cuerpo el arreglo del coche de su Amo, esta vez le rompen el culo

Al día seguiente me desperté con la sensación del desgasto completo de mi coño. Me ardían los labios y no podía desprenderme de la sensación del vacío dentro, como si después de ser usado tanto en lugar de mi vagina elástica solo quedara un orificio de dimensiones considerables que más bien se parecía a un pozo.

Me desperté en el sofa en el salón de Amo, desnuda pero cubierta con una manta. Francamente hablando, no podría recordar cómo había acabado la fiesta de ayer y cómo había acabado yo en este so...

Sometida en la Disco

Una joven es sometida en la disco, en presencia de su padre.

Este es mi primer relato contado en Tercera Persona.

Su nombre era Karina, ella era una chica de unos 21 años, morocha de más de 1,70 cm. acostumbraba a vestir siempre elegante y sexy, rozando lo muy provocativo, o eso notaba en la calle al pasar del publico masculino. Su cuerpo también le daba la capacidad de vestir siempre de la mejor manera, sus pechos de 100 con una espalda angosta, su fina cintura en 62 aproximadamente y su culo en 90, muy parado (respingón), sumado a sus largas piernas, hacían q...

Pagar con el propio trabajo

Una chica tiene que pagar por el arreglo de coche con su propio cuerpo

Todo esto fue un accidente. Yo siempre manejaba perfectamente el coche y no me preocupaba nunca  por adquirir un seguro. A mí nunca le pasaba nada.

Ahora no sabré describir cómo pasó el accidente. Claro que yo no tenía bastante dinero para pagárselo... Para pagar el arreglo del coche del chico con quien choqué no tendría dinero ni un magnate. Para mi gran sorpresa el chico no se enfurió fuera de lo que cabía en estas circunstancias y al saber que yo no tenía pasta para compensarlo de un solo pago, me...

El perrito de mis amigas 3

Despues de mucho tiempo, continuo la historia de como me converti en esclavo de todas mis amigas (recomiendo leer los dos primeros relatos)

Me desperte al día siguiente bastante confundido. Tenia en mi boca el sabor de mi propia leche y de la poderosa verga de Ariel, el amante de Laura. Estaba completamente desnudo, seguía en el departamento de mis amigas y sin ropa que ponerme. Salí de la habitación y escuché que la ducha estaba abierta. Debo haber hecho algún ruido porque enseguida escuche la voz de Maite llamándome desde el baño.

Abri la puerta y ahí estaba ella, desnuda ante mis ojos por primera vez. El agua le caía en todo su hermoso...

Una diosa llamada Venus. Capítulo 18

"Arcilla y plastilina"

18.- ARCILLA Y PLASTILINA

Coletas salió, pero no estuve solo mucho rato. Al poco llegó Kwanza, con su carencia de pelo en todo el cuerpo, sus tetas marcadas bajo la camisola blanca, su gruesa trenza anal negra azabache (aunque parecía un simple adorno ante lo de la recién marchada rubia) y su cara de pocos amigos habitual. Me recorrió con la vista de arriba a abajo y pareció complacida ante lo apretado que parecía mi corsé debajo de la camisa.

—Hoy tienes mucho que hacer, Pajarito, así que s...

Maite la contable

Inicios en el mundo de la sumisión de Maite.

Todo ocurrió hace unos 5 años, aproximadamente.

Una tarde como otra cualquiera, yo estaba navegando por internet con el Messenger abierto.

De repente me apareció alguien que no estaba agregado en mi lista de contactos:

Ella: Hola, ¿quién eres?

Yo estaba flipando un poco…

Yo: Eso digo yo. ¿Y quién eres tú? Jajaja

Ella: jajajaj bueno me llamo Maite, soy de Barcelona y no sé por qué te tengo agregado en el Messenger…

Vista la situación y dado que por aquel entonces, yo...

Ya soy la zorrita de mi jefe 4

Sigo siendo la zorrita de mi jefe y vivo con el experiencias super excitantes

Tras la fiesta y la noche en sus brazos, vuelvo a casa con una idea rondando y dando vueltas en mi cabeza, como y que le digo a mi madre?

Antes de salir de su casa me dijo,

-me da igual lo que les digas, nena a mi edad me da igual lo que se hable de mi a mis espaldas, quiero que vivas conmigo si eso hace que el mundo me critique no me importa.

Mi madre se preparaba para salir a comer con sus amigas, cuando le dije:

-mama voy a dejar de vivir contigo

-has dejado el trabajo? Te v...

Encuentro casual (ninna, 1ª parte)

De como empecé con la niña que tuve antes que a Mi Maria. En esta entrega no existe ningún momento de sexo explícito pero espero que os llegue la relación D/s que empieza a forjarse.

Queridos lectores; tengo la intención de ir desgranando poco a poco los recuerdos que conservo de Mi relación con la sumisa que tuve a Mi servicio antes de estar con Mi dulce Maria.

Estos relatos serán el compendio de esos recuerdos y son, en la medida de lo posible, veraces.

Os adelanto que he cambiado los nombres de las personas por nicks que no corresponden a como nos/Me llamábamos en ese momento pues no tiene nada que ver con la posterior evolución del BDSM en España.

*Ca...

De diosa a puta (1)

Sabía que estabas enfadado y que me costaría tenerte de vuelta conmigo, entre la platica te escribí "Quiero que me hagas tu puta", jamás imaginé que querrías convertirme en una puta de verdad.

Hoy me levante temprano, tomé el móvil para ver la hora y en ese momento comencé a recordar nuestra conversación de ayer... jamás te había visto tan molesto y tenías razón, haber cogido con otros sin tu permiso no estaba bien, yo era tuya, solo tuya y te había fallado...

Tenía ya 3 o 4 años que tu y yo nos escribíamos, contigo me había animado a hacer cosas que jamás habría hecho, cuando te conocí, yo era una escritora de relatos, estudiaba y tenía sexo, nada del otro mundo, sexo normal y cursi con...

Abusando de una colegiala japonesa II

Segunda parte. Espero que sea de su agrado. Logré hacerme un tiempo para continuarlo. Espero con ansías comentarios sugerencias y críticas. Gracias por su lectura.

Mi hija me había tomado por sorpresa.

“Caro, ejemm…yo…”

“Mejor no digas nada papá. Lo he visto todo”. Se acercó hacia mí sin apresurar el paso. Lentamente y clavando fijamente sus preciosos ojos almendrados, en los míos.

“¿Qué has visto?”, alcancé a gesticular.

“¿Visto tan sólo? Oído también. La sentí gritar a Kimo y bajé las escaleras.”

“Pero…”

Me interrumpió apoyando suavemente un dedo en mis labios. Se pegó provocativamente a mi apoyando sus senos en mi pecho. Me habló...