Los claveles marchitos de la Revolución (cap. 8)

Teresa regresa a Lisboa completamente hundida, víctima de una arbitraria decisión paterna. Lucinda debe viajar a España por un asunto de fuerza mayor, sin sospechar que su vida va a dar un giro de 180 grados en cuestión de semanas. Bruno intentará hacerla entrar en razón, sin conseguir su objetivo.

Al día siguiente, Lucinda se levantó de un humor de perros, todo lo contrario que su huésped, un sonriente Tiago que parecía haber rejuvenecido varios años, como si el hecho de dormir en una cama de hierro del tiempo de Maricastaña le hubiera insuflado unas gotas del elixir de la eterna juventud. En realidad, Tiago no había dormido nada aquella noche, y menos aún en aquella condenada cama, pero ahí estaba él, tan fresco, anudándose la corbata para ir a trabajar y con una sonrisa de oreja a oreja que Lucinda...

Los claveles marchitos de la Revolución (cap. 7)

Tiago y Lucinda, acompañados de Duarte, acuden a la manifestación opositora que reune a una ingente multitud de personas alrededor de la Fuente Luminosa. Días después, un desafortunado incidente en casa de Lucinda pondrá a prueba su temple y la hará tomar conciencia de su situación de vulnerabilidad

“El 29 de septiembre Jimmy y Pier acuden juntos aún al estreno de “Nace una estrella”, el regreso a la primera división de Judy Garland tras una larga temporada alejada de los focos, pero su noviazgo está herido de muerte. Fuera por despecho o por convicción, lo cierto es que, una semana mas tarde, Pier Angeli y el cantante Vic Damone anunciaban su compromiso matrimonial. ¿Cómo pudo afectar este hecho en la ya de por sí frágil psique de Jimmy Dean, el huérfano traumatizado por la pérdida de su adorada madre...

Los claveles marchitos de la Revolución (cap. 6)

Lucinda y el Padre Pereira se hacen cargo de Duarte, un joven refugiado recién llegado de Angola, que arrastra un trauma familiar muy profundo a consecuencia de la guerra colonial. Lucinda convence a Tiago para que se haga cargo del chaval, y ambos inician una amistad, no exenta de algunos riesgos.

El resultado de las elecciones a la Asamblea Constituyente organizadas in extremis por el tercer Gobierno Provisional del PREC, dieron el triunfo de manera categórica a las opciones mas moderadas del espectro político portugués, lo que supuso un jarro de agua fría para las optimistas valoraciones del gabinete presidido por Vasco Gonsalves respecto a un papel hegemónico del PCP y sus aliados naturales en la cámara legislativa a partir de entonces. La participación popular fue altísima, alcanzando un 91% del...

Los claveles marchitos de la Revolución (cap. 5)

Tras el fracaso del golpe de estado, Portugal vive horas de euforia revolucionaria, que colman los deseos de cambio social de Bruno, y causan no pocos recelos en una escindida Lucinda. Por esas fechas, ella decide viajar a España a visitar a sus padres, pero el recibimiento dejará mucho que desear.

“La Revolución nos da, la Revolución nos quita, ella es como una diosa insaciable que se alimentara de carne humana y que siempre pide más y más, y exige todo de todos a cambio de infundadas promesas y de engañosas realidades”. Esta frase, que Tiago había incluido en un artículo sobre la imparable deriva revolucionaria tras los sucesos del 11 de Marzo de 1975, siempre fascinó a Lucinda, que recortó la página del “Expresso” donde venía publicado, y solía releerlode vez en cuando, incluso muchos años después...

Los claveles marchitos de la Revolución (cap. 4)

Bruno y Lucinda viven el verano mas feliz de sus vidas, pero gruesos nubarrones amenazan su futuro en común. La oposición del acaudalado padre de ella a su relación y la creciente tensión política en el país se suman al inestable estado emocional de Teresa, la conflictiva hermana de Lucinda.

“Jimmy y Pier no tuvieron tiempo suficiente para disfrutar de su naciente amor y consolidar su relación. Las constantes discusiones de Anna con su madre, y sus amenazas de abandonar la casa materna y casarse con Dean se revelaron infructuosas. El, inseguro por naturaleza, y seguramente inexperto en cuestión de mujeres, necesitaba mas tiempo para tomar una decisión tan importante, si bien los pasos que fue dando avanzaban en esa dirección: incluso le presentó a Pier a su distante padre, y dicen que estaba co...

Los claveles marchitos de la Revolución (cap. 3)

Bruno y su amigo Tiago salen a celebrar el triunfo de la Revolución por los concurridos garitos del Barrio Alto lisboeta, pero la noche resulta un fiasco espectacular. Bruno le confiesa su apasionado amor por Lucinda, a quien aún no conoce, y un achispado Tiago cometerá un error de cálculo crucial.

Unos

días después, ya convertidos en pareja formal, Bruno y Lucinda quedaron al salir de sus respectivos trabajos a tomar algo en el famoso Café A Brasileira, situado en la Rúa Garrett, frente a la estatua sedente del gran Pessoa, asiduo visitante de su arquitectura "art-decó" en otros tiempos; pero no estaban solos, como en días pasados, sino que en esta ocasión se sumó a ellos Tiago, el compañero de piso y trabajo de Bruno. Este le presentó ante su novia como su mejor amigo y casi como el hermano que...

Los claveles marchitos de la Revolución (cap. 2)

Bruno y Lucinda mantienen su primera cita romántica, empiezan a conocerse un poco mas y se dejan llevar por la irrefrenable pasión que les embarga. Su incipiente relación deberá enfrentarse a sus evidentes diferencias de clase y condición social, que la naciente Revolución podría ayudar a disolver.

“James Dean y Pier Angeli se conocieron por casualidad, durante los descansos de sus respectivos rodajes, “Al este del edén” y “El cáliz de plata”, en los platós exteriores de los estudios Warner, a mediados de junio de 1954; el flechazo fue inmediato, y unos días mas tarde Anna presentó a Jimmy a su madre y hermanas durante su fiesta de cumpleaños como su nuevo novio. El romance no carecía de riesgos para ambos, sobre todo para Pier, que había elegido como acompañante a un actor desconocido, sin ninguna pe...

Los claveles marchitos de la Revolución (cap. 1)

Lucinda rememora desde la soledad de su madurez de escritora en Madrid su añorada juventud lisboeta y la historia de amor que la unió al fotógrafo de prensa Bruno Alves. Ambos se conocen el mismo 25 de Abril de 1974 en que Portugal estrena libertades, surgiendo entre ellos una atracción irresistible

PROLOGO

Este nuevo relato marca un antes y un después en mi trayectoria narrativa, si se puede denominar así al conjunto de aproxidamente treinta ficciones que componen mi "corpus" literario; por primera vez, una pareja heterosexual se convierte en protagonista central de un relato "robbiniano", y lo hago gustoso para dejar claro que la tolerancia y la pluralidad empiezan por uno mismo, aparte del hecho cierto de que la inmensa mayoría de las historias de amor sobre este planeta tienen lugar ent...

El chico que admiraba a Adam Levine (Parte 1)

Bosco y Layo tienen 19 años y son considerados por todos como hermanos, ya que la madre de Bosco y el padre de Layo están casados entre sí; ambos comparten habitación en un chalet unifamiliar de Torrelodones, pero una fuerte rivalidad, el desprecio mutuo y la insinceridad dificultan su convivencia.

A veces ocurre que la persona que buscas con tanto anhelo se encuentra muy próxima a ti, pero rara vez sucede como en el caso de estos dos jóvenes, que lo tienes justo al otro lado de tu habitación, y que le puedes considerar casi como tu propio hermano; y digo casi, porque Bosco y Layo compartían un único nexo en común: la madre de Bosco y el padre de Layo estaban casados, y eso les convertía a la fuerza en medio hermanos. Pero eso no quiere decir que ellos se sintieran en absoluto hermanados, mas bien al...

El chico que admiraba a Adam Levine (Parte 4-fin)

Pablo visita a Layo para pedirle disculpas por lo que considera un terrible malentendido, después de que Bosco haya reconocido su error y su cruel comportamiento con Layo. Pablo y Layo acuerdan entonces unir esfuerzos para que Bosco, sumido en una fuerte depresión, recupere de nuevo la sonrisa.

Layo aprovechó los días siguientes para descansar en casa de su tío de la intensa tensión emocional vivida en los días anteriores; el dolor en el trasero (“el sitio de tu pecado”, como lo definió Pablo durante su linchamiento) era tan intenso que no podía sentarse y para dormir debía echarse de lado. Debido tal vez al profundo trauma sufrido a raíz de esta agresión, el vano enamoramiento que creía sentir por su medio hermano había desparecido como por ensalmo, y, en su lugar, había surgido un terror viscera...