Follándome a una paralítica.
Empecé a vivir con Lara durante la universidad como compañeros de piso. La cosa cambió cuando Lara tuvo un accidente que la postró en una silla de ruedas.
Tuve mucha suerte al llegar a Madrid y encontrar a Lara. Yo era un chico de Almería que iba a estudiar becado en la Universidad politécnica, pero desgraciadamente para mi, la beca no daba para pagar curso y alojamiento.
Nada más llegar me hospedé en una pensión, pero aquello era momentáneo, ni podía permitirme pagar aquello 30 días al mes ni aquel era el mejor ambiente para estudiar.
Puse un anuncio en el tablón de la universidad y esa tarde recibí una llamada.
- ¿Jonás?
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