AVENTURAS Y DESVENTURAS HÚMEDAS. Tercera Etapa 3
Descubriendo la ciudad y sus sentimientos.
Mari totalmente quieta, como si estuviera petrificada, miraba como su hijo recorría el camino al baño. En su mano llevaba la ropa de cambio, aunque no reparó en aquello, solo en que en nada estaría bajo la ducha.
La puerta se cerró, escuchó el clic metálico de la cerradura, pero no del pestillo. La entrada seguía estando abierta y la posibilidad de ver a su hijo desnudo en la ducha también. Se pasó la mano por la frente, notándose acalorada, por un instante pensó si aquello podría ser fiebre. Su conci...