Almudena, una brutal violación (2/3)

Segunda parte del relato. El viejo Vicente se folla el coño de su vecina mientras José le mete el rabote en su boca linda.

“Tráela hasta aquí. Ahora te la va a chupar a ti, amigo. Prepárate que yo te la dejo lista” le dijo Vicente a José.

El chico no había dejado de sujetar a la joven por el pelo, así que solo tuvo que tirar fuerte de él para que la muchacha lo siguiera como buenamente podía, medio gateando medio arrastrada por el suelo.

“Que se siente encima de mí, así” le indicó el viejo frutero a su ayudante.

Colocaron a Almudena sentada encima del tendero, le daba la espalda. Ella tenía las pier...

Almudena, una brutal violación (1/3)

El viejo frutero y su ayudante violan despiadadamente a su hermosa vecina Almudena.

Vicente era el frutero del barrio. Desde pequeño había atendido en su puesto de frutas con su padre, y ahora, ya adulto, era él el dueño del negocio. Vicente no era un hombre demasiado agraciado. Tenía más de 50 años, el pelo completamente cano que ya le empezaba a ralear por algunos huecos de su cabeza. Solía lucir barba de pocos días, también canosa. Su barriga era muy prominente, así como su papada. Tenía el cuerpo completamente cubierto de pelos (brazos, hombros, espalda, culo, piernas…) y curiosamente...

Claudio y Aleksandr. La insurrección 04

Aleksandr castiga duro a Claudio, para que lo reconozca de una vez como su Amo. Final de la serie. Gay.

“Espero que hayas aprendido la lección”

le dijo Aleksandr a Claudio, que estaba medio desmayado sobre la mesa “A partir de ahora me tratarás de usted. Yo seré tu Amo y me obedecerás en todo lo que te ordene”

Pero a pesar de la terrible violación del que acababa de ser víctima, el joven patricio no iba a dar su brazo a torcer tan fácilmente “Que…. Te… Jodan….” Susurró casi sin fuerzas y sin aliento “Te mataré… Aleksandr…. Lo… Juro….”

Al oír esas palabras, el hombre...

Claudio y Aleksandr. La insurrección 03

No consentido. Gay. Juegos con orina. Los esclavos se rebelan. El castigo de Aleksander al Amo Claudio.

El día siguiente transcurrió de manera parecida a los anteriores. Desde la marcha de Aurelio, los esclavos tenían que soportar los insultos y continuas vejaciones de su primo menor Claudio. Y era Aleksandr el que más humillaciones recibía, parecía ser el punto de mira del joven patricio. Pero aquel día todo iba a cambiar de manera radical.

Cuando el sol empezaba a ponerse, Claudio se dirigió a los baños para relajarse y asearse. Al pasar al lado del esclavo bárbaro le dijo:

**“No lo olvides. De a...

Claudio y Aleksandr. La insurrección 02

No consentido. Gay. Aurelio se marcha. Empiezan los castigos a los esclavos. Contiene violación a una esclava embarazada y juegos con orina.

Al día siguiente, tal y como le había anunciado, Aurelio partió rumbo a la capital del Imperio. Mientras veía como se alejaba su caballo al galope, Claudio sintió como empezaba a hincharse de orgullo y poder. Su padre estaba a cientos de kilómetros de distancia, Aurelio tardaría bastante en volver, si es que conseguía permanecer con vida en la batalla. Le quedaban más de dos meses de vacaciones veraniegas sin ningún adulto que le supervisara, ni le diera órdenes, ni le dijera qué tenía que hacer. Claudio se...

Claudio y Aleksandr. La insurrección de un esclavo

No consentido. Gay. Introducción. "Claudio, el joven patricio tenía las muñecas atadas cada una a una pata de la mesa. Aleksandr, el germano salvaje, que le doblaba la edad, mantenía abiertas las piernas de su Amo, y apuntaba con su duro y grueso rabo al ano virgen del romano."

*Era entrada la noche. Claudio, el joven patricio de catorce años de edad estaba tumbado boca arriba sobre la mesa. Le sangraba el labio por la bofetada que le había dado su esclavo. Tenía las muñecas atadas cada una a una pata de la mesa, con los brazos bien abiertos y estirados. Aleksandr, el germano salvaje, que le doblaba la edad, mantenía abiertas las piernas de su Amo, y apuntaba con su duro y grueso rabo al ano virgen del romano. Glenda, la sirvienta embarazada se había situado sobre el rostro del me...

Maite. Secuestrada en Egipto. Parte XV. Final.

Llega Rashid, el hijo de Ashraf. Maite cambia de Amo. El nuevo Amo se la quiere llevar con él a occidente. Sexo, lágrimas, dolor y muerte (bueno, muerte no XD) en este último y apoteósico capítulo final tan solicitado. Me disculpo por la eterna tardanza.

Habían pasado casi tres meses desde mi secuestro, la vida en la casa era una rutina para mí. Limpiar, cocinar, hasta Salima me estaba dando lecciones de danza del vientre. Tengo que confesar que desde que dejé de luchar por mi libertad, había empezado a disfrutar muchísimo de mi estancia aquí. No sé como explicarlo. Cuando estaba con Ashraf, solo verle ya me excitaba. Chupársela me ponía tremendamente cachonda. Deseaba con locura, cada segundo que pasaba a su lado, que me follase como el animal salvaje que...

Halloween. Una historia de brujas.

Ritual de iniciación en el bosque. ¿No consentido? El duque se tira a la sirvienta. Los acompañan la amiga bruja y el sirviente de él.

31 de Octubre, año 1578.

Una hermosa mujer, de tez blanca, ojos marrones y larga melena oscura, espera en el bosque, cubierta únicamente por una capa negra. Su nombre es Diana. Es un día muy especial para ella. Hoy va a iniciarse secretamente en el culto a Kernunnos, el antiguo Dios pagano. Todo tiene que hacerse con la máxima discreción, para no ser descubiertos por ojos enemigos que los puedan denunciar a las autoridades eclesiásticas.

Son las doce en punto de la noche. Diana espera impaciente...

Maite. Secuestrada en Egipto. Parte XIV

Follada en grupo. Lo categorizo como dominación porque Maite ya es una sumisa, pero empezó como No Consentido.

Una vez estuve bien limpia, sin rastro de sus meadas en mi cuerpo ni mi pelo, toda mojada, sin maquillaje, y con aroma a jazmín, Ashraf me hizo tumbar en una cama que había a un lado de la mazmorra. Me dijo que agarrara con las manos los barrotes del cabezal.

«Ahora no te muevas, Salima va a decorar tu cuerpo para mayor satisfacción de tu Amo»

«Si Amo, me estaré quieta, solo quiero complacerte»

Ashraf sonrió. Mi corazón se llenó de gozo. Hacerle sentir orgulloso de mí era el mayor premio q...

Maite. Secuestrada en Egipto. Parte XIII

Intrusión anal. Castigo. Susto. Más castigos. Gran follada.

Pasaron un par de semanas sin ninguna novedad. Ashraf ya no estaba enfadado conmigo, y realmente cuanto más sumisa me mostraba con él, más agradecido era él conmigo. Le hacía varias mamadas al día, y me follaba cuando más le apetecía. Cada mañana, cuando entraba en su despacho, me ponía un plug anal, y cada pocos días, el plug era más grueso que el anterior. Eso me dio una idea de lo que tenía planeado hacerme en breve, pero decidí no preocuparme por ello hasta que llegase el momento. Cada noche, al ir a do...