Por error
Creyendo que era mi novia la que esperaba en el portal, me abalancé sobre la vecina de abajo. Y ella no me rechazó...
La vi a lo lejos de espaldas, esperándome en el portal, con su melena oscura y ondulada hasta las costillas. Estaba increíble con su falda corta ajustada a su trasero, potente y levantado, realzando sus muslos carnosos, pero para nada fofos. Y aquella camiseta dejaba al desnudo su espalda por completo, salvo por tirantes horizontales que la atravesaban. Eso quería decir que no llevaba sujetador. Mmm... Se me puso la polla dura sólo con pensar que aquellas peras estaban libres de ataduras...
Me f...