Mi hermana y mi marido

Mi hermana vino en vacaciones a nuestra casa. Mi marido y ella apenas se conocían. Un secreto desvelado y una traición. Y un viaje de ida a Finlandia.

MI HERMANA Y MI MARIDO

Invitamos a mi hermana a pasar las navidades en nuestra casa. Hacía ya que no nos veíamos cerca de dos años, y eso para mi hermana y para mí, es un mundo. Nos hemos criado juntas, hemos compartido todos los secretos de la vida y nos llevamos mejor de lo que unas hermanas se pueden llevar.

Hace casi dos años me casé con Roberto, un tipo algo comedido, poco dado a las bromas y honesto a carta cabal. Desde ese día no he vuelto a ver a mi hermana. Ella vive en Finlandia....

La zorra, la puta del bar y la rubia chanel (Fin)

Instalado en casa de la Rubia Chanel, y con Bola de sebo cada vez más unida a nosotros, mi furia parecía iba desapareciendo. Sólo quedaba una cosa, firmar la paz con las putas palomas.

LA ZORRA, LA PUTA DEL BAR Y LA RUBIA CHANEL NUM. 5 (3ª parte y última)

Con el fin de no hacer un resumen, recomiendo lean los relatos anteriores, parte 1 y parte 2, antes de leer este. Gracias.

El polvo fue bestial. Como todos. Azucena era la leche. Sabía moverse y ofrecerme su coño depilado para que yo entrara en el, de la forma que quisiera. Bola de sebo se había marchado temprano. Nos había dejado en la cama. Su hueco en el colchón, aún se notaba. La rubia chanel núm. 5 dormía plácidame...

La zorra, la puta del bar y la rubia chanel (2)

La rubia Chanel me sacó del local cutre y me metió en un taxi. Dirección, mi casa. Después de relajarnos un poco, volvimos al local de Bola de Sebo (la puta del bar). Otro puto incidente más en mi asquerosa y violenta vida. (Parte 2 de 3)

La rubia Chanel me sacó del local cutre y me metió en un taxi. Dirección, mi casa. Después de relajarnos un poco, volvimos al local de Bola de Sebo (la puta del bar). Otro puto incidente más en mi asquerosa y violenta vida. (Parte 2 de 3)

LA ZORRA, LA PUTA DEL BAR Y LA RUBIA CHANEL NUM. 5 (2ª parte)

Con el fin de no hacer un resumen de la primera parte, recomiendo lean el relato anterior antes de leer este. Gracias.

El taxi nos dejó frente a un portal. Abrí lo ojos. Me sonaba de algo...

La zorra, la puta del bar y la rubia chanel (1)

Mi mujer me puso los cuernos, y en un día de furia me follé a la puta del bar y a la rubia chanel num. 5 (parte 1 de 3)

LA ZORRA, LA PUTA DEL BAR Y LA RUBIA CHANEL NUM. 5 (parte 1 de 3)

Sentado en un banco, al sol, observaba a la puta paloma. Con su pico de mierda prendía una cáscara de pipas. A través de los cristales de mis gafas de sol, la fulminé con las vista. La muy zorra seguía entretenida con su pipa como si nada. Me pregunté de cuantos palomos habría sido. Tenía pinta de puta. Ni siquiera era blanca como deben ser las palomas. Esta era grisácea. Era mierdera. Era una paloma PUTA. No había duda. Hablé con...

El chalet del jefe de mi marido

Un fín de semana en el chalet del jefe de mi marido, me sirvió para dos cosas, para ponerle los cuernos y para...

EL CHALET DEL JEFE DE MI MARIDO

Mi marido tiene un jefe de lo más original. Cuando se aburre, simplemente se gasta una pasta, organiza una fiesta. Tiene un hermoso chalet a las afueras de Madrid. Le ha costado una pasta. Tiene un montón de millones dentro de el. Objetos de los más variados. Traídos de los lugares más recónditos del mundo. Y no le importa organizar esas fiestas para sus empleados y que ellos mismos campen a sus anchas por su casa. Supongo que no tendrá miedo de que le roben...

El jersey de cuello alto

Un fín de semana en Cuenca, en una casa rural, con mi marido borracho, descubrí el sexo con otro hombre. Un intercambio de parejas que ha hecho que sea la mujer más feliz del mundo. Y la más rural.

EL JERSEY DE CUELLO ALTO

Nos fuimos un fin de semana siete parejas a una casa rural en la provincia de Cuenca. Llegamos el viernes por la tarde. Yo fui acompañada de mi marido. Al igual que el resto, todos éramos matrimonios jóvenes. Yo vestía un jersey de cuello alto, de esos de cuello de cisne, y unos pantalones vaqueros. Debajo del jersey, sólo llevaba puesto el sujetador, un sujetador minúsculo y bastante fino.

Después de repartirnos las distintas habitaciones y colocar nuestros ensere...

El ginecologo

Las visitas al ginecólogo no me gustan mucho. Bueno, corrijo, ahora sí me gustan. Os explicaré como se produjo el cambio de opinión. Siempre había tenido una mujer como doctora ginecóloga y confieso, que eso me desagradaba menos, pues para mí, ir al gine es desagradable. Imaginaros el rato que pasamos subidas a ese potro y con las piernas abiertas de par en par todo el tiempo. Nada agradable, lo dicho.

EL GINECÓLOGO

Las visitas al ginecólogo no me gustan mucho. Bueno, corrijo, ahora sí me gustan. Os explicaré como se produjo el cambio de opinión.

Siempre había tenido una mujer como doctora ginecóloga y confieso, que eso me desagradaba menos, pues para mí, ir al gine es desagradable. Imaginaros el rato que pasamos subidas a ese potro y con las piernas abiertas de par en par un buen rato. Nada agradable, lo dicho.

Pedí cita para el ginecólogo en una revisión anual. Me dieron día y ho...

Las vacaciones profundas

Unas vacaciones en la playa con una pareja amiga, nos llevó a descubrir el engaño de nuestro matrimonio.

LAS VACACIONES PROFUNDAS

Nos fuimos el pasado mes de agosto de vacaciones. Y nos fuimos a la playa. Y nos fuimos con otra pareja amiga nuestra.

Eran unas vacaciones de descanso, pero a la vez, eran vacaciones para hacer deporte, pues los cuatro sabíamos bucear. Nuestro dinero nos había costado. María, Rafael, mi mujer, que se llama Manoli y yo, nos embarcamos en la ranchera de Rafa.

Tardamos unas seis horas en llegar a Gerona, lugar de nuestro destino. Un hotel o un camping eran las a...