Mi vecinita Voyeur (II)

Una pequeña trilogía bastante sexual. Mi vecinita de 20 años descubre el BDSM.

Mi vecinita Voyeur (II)

Tras la primera sesión de Voyerismo con mi vecinita, había notado que su manera de mirarme era completamente distinta. Aquella chiquilla de 20 años me había visto en acción, sodomizando, azotando, y masturbando a mi sumisa. Me había visto agarrar la cabeza de mi protegida y obligarla a chupar mi polla. Su mirada cuando se cruzaba con la mía era completamente distinta. Se ponía nerviosa y se excitaba, podía notarlo en sus ojos.

Aquel día, cuando me crucé en el parque co...

Mientras los veía

Casi todas las tardes iban al banco del parque, bajo mi edificio, a besarse y darse arrumacos.

Solía pasar todas las tardes, a eso de las cinco. Mi habitación daba hacia la parte de atrás del edificio, donde había un sencillo y pequeño parque, con cesped, un par de árboles y un solitario banco. No sé si más personas andaban en las ventanas cuando la parejita, en busca de una supuesta intimidad, se sentaba a besarse y a hacerse arrumacos.

Eran un chico y una chica de instituto, probablemente en sus casas no tendrian oportunidad de poder intimar a solas y por eso se iban hacia la otra punta de la...

Mi vecinita Voyeur (I)

Una pequeña trilogía bastante sexual. Mi vecinita de 20 años descubre el BDSM.

Mi vecinita Voyeur (I)

Siempre me ha gustado mi vecinita, me da mucho morbo. Apenas ronda los 20 añitos y tiene cara de buena niña, de esas que nunca han roto un plato, y de las que se asustaría si supiera a que se dedica su vecino. Cuando nos cruzamos en la calle, no pasamos nunca de un simple saludo y una sonrisa, pero siempre me quedo con la sensación de que ella me mira con curiosidad, como si pensara cosas raras de mí.

Ella vive en la casa de enfrente, con sus papaítos, y la ventana de s...

Mi último día en la Tierra. - Esclava espacial I

De los archivos del diario personal de la esclava traída de otra galaxia.

Recuerdo perfectamente mi último día en la Tierra, empezó mal, y terminó peor… o tal vez no.

17 de mayo de 2015.

Planeta Tierra, Sistema Solar en la Vía Láctea.

La luz del sol se filtró a través de la ventana y dio de lleno en mi cara, me tomó menos de un minuto darme cuenta que era muy tarde. Abrí los ojos y vi que el reloj junto a la cama marcaba las 7:20 am.

— Maldición. — Me levanté de la cama y corrí a la regadera, no me daba tiempo de calentar agua en la estufa, un ba...

Amo, Sumisa y Voyeur. Un trio diferente.

Después de dar un par de vueltas al tema, se me ocurrió una solución, bastante nueva para mí en ese momento, la de ofrecerle la posibilidad de ver una sesión en directo, con mi sumisa. Ella, muy lejos de negarse como pensé que haría, aceptó y me pidió que le avisara cuando fuéramos a hacer la siguie

Amo, Sumisa y Voyeur. Un trio diferente.

Parecía un email normal y corriente, como otros que ya había recibido antes. Era una mujer, de mediana edad, que quería saber cómo iba esto de la sumisión. Había leído alguna página web por internet, y había buscado información al respecto, pero necesitaba encontrar cómo entrar en este mundo que le atraía.

Tras una serie de emails entre los dos, hablando del tema, vi que ella tenía un poco de miedo, y que no acababa de atreverse a tener una sesión a solas...

Morbo en el concierto

A veces un concierto puede ser fuente de una gran excitación...

Morbo en el concierto

Esto nos sucedió el año pasado, y es la historia más morbosa que puedo imaginar. Al igual que muchos hombres, siempre he deseado ver a mi mujer con otro, aunque como nos pasa a la mayoría eso queda en nuestra oscura mentalidad relegado a un sueño húmedo.

Sin embargo, la noche que decidimos mi mujer y yo ir a un concierto de Burning mi sueño casi se hizo realidad. Desde novios yo instaba a Ana, mi mujer ahora, a vestir todo lo sexy que pudiera dentro de lo que permitiera el...

Travesuras en el Cole / La Profesora Berta

La profesora Berta era algo anciana podría decirse que una abuelita muy joven por lo que aun tenia energía tenia el cabello liso, negro, largo con un mechón blanco muy característico, era flaca pero aun conservaba la figura de sus tiempos de gloria.

La profesora Berta era algo anciana podria decirse que una abuelita muy joven por lo que aun tenia energía tenia el cabello liso, negro, largo con un mechon blanco muy característico, era flaca pero aun conservaba la figura de sus tiempos de gloria.

En aquel momento que ella me mirada con sus ojos color miel mientras en su mano tenia mi húmedo hilo queria que la tierra me tragara , ya veia como me explusarian del colegio, como mis padres pensarían que soy una loca y mis compañeros pensaran que soy una c...

Me lo pidió Sara

Estaba en casa, limpiando y planchando algo de ropa, llevaba solo el pantalón del pijama oscuro, largo con un nudo en la cintura, intentaba distraerme. Llaman a la puerta. Me asomo a la mirilla y era Sara mi vecina.

Estaba en casa, limpiando y planchando algo de ropa, llevaba solo el pantalón del pijama oscuro, largo con un nudo en la cintura, intentaba distraerme.

Llaman a la puerta. Me asomo a la mirilla y era Sara mi vecina.

-Hola Sara ¿qué tal?

-Te he traído un regalo.

-Pasa ¿y eso? Mujer no debías de haberte molestado.

(Sara y yo ya llevábamos algún tiempo acostándonos, es una relación de folliamigos).

Le doy un pico, Lleva unos leggins negros y una camiseta, zapatillas de depor...

Ricitos platónicos

Marco reposó su mano sobre la mía y supe que, sin lugar a dudas, había caído rendida a sus pies. ¿Cómo no intentar conseguir una noche de pasión con aquel amor platónico?

Marco reposó su mano sobre la mía y supe que, sin lugar a dudas, había caído rendida a sus pies. Él, por el contrario, parecía no sentir nada por mí.

—Pago ésto y te llevo a casa, ¿de acuerdo? —me dijo buscando al camarero con la mirada y con una cálida sonrisa en los labios, tratando de animarme con aquel halo de bondad angelical tan característico que le rodeaba. Quise perderme nuevamente en el café de sus ojos, los cuales buscaban los míos, y apenas se encontraron unos segundos antes de que yo desv...

Mi nueva vida, exhibiéndome frente al técnico 2

Aquel tipo continuaba observándome y a mi me estaba gustando, así que pensé en llevar mas allá este juego, me pare de nuevo frente al televisor como si estuviera entretenida con lo que veía y después de unos segundos comencé a desabrochar mi falda y ya que la sentí floja, tome un poco de aire y muy sutilmente la deje caer lentamente, quedando ahora si completamente desnuda de la cintura para abajo,

En el anterior relato les comencé a contar de como había comenzado a excitar a un técnico de televisión por cable, que me estaba espiando por mi ventana,

aquel tipo continuaba observándome y a mi me estaba gustando, así que pensé en llevar mas allá este juego, me pare de nuevo frente al televisor como si estuviera entretenida con lo que veía y después de unos segundos comencé a desabrochar mi falda y ya que la sentí floja, tome un poco de aire y muy sutilmente la deje caer lentamente, quedando ahora s...