Desayuno sin diamantes, pero muy excitante
El otro día tras leer un relato "carta caliente" del auntor pilita, a mi mente regresó la historia de Lucy.
Desayuno sin diamantes, pero muy excitante.
Hola cariño:
Imaginate un desayuno romántico conmigo, pero no uno de esos desayunos con café y tostadas.
Un sábado por la mañana, después de una noche tórrida de amor, sexo y vicio te encuentro en la cama semitapada con una sábana blanca, desnuda totalmente, duermes plácidamente boca abajo, con tu pierna izquierda algo levantada.
La sábana deja entrever tus nalgas y yo no puedo evitar acercarme a ellas y olisquearlas, besarlas muy suav...