Las bragas de la señora Rosita (2)

Le doy un masaje en el pie, mientras ella se masturba

Anteriormente…

En el relato anterior titulado “Las bragas de la señora Rosita“ os explicaba cómo empezó mi relación fetiche con la señora Rosita, la vecina madura, amiga de mi madre. Como adolescente en pura efervescencia sexual, sentí una atracción muy fuerte por una mujer madura que satisfice disfrutando del contacto y el olor de su ropa interior. Empecé por la que guardaba bien limpita y perfumada en los cajones de la cómoda y terminé rebuscando en el cesto de la ropa usada, lo que me permitió...

La peregrinación y la hospitalera

Una pareja de peregrinos se pierde acaba e n un extraños y orgiástico albergue....

La peregrinación y la hospitalera

Llevaba ya tiempo por el Camino y con unos días de esos de perros, con diluvios universales a cada rato, y así llevábamos horas vagando una fortuita compañera y yo , sin encontrar techo ni acomodo, pues entre que era puro invierno y lo de Covid, todo estaba cerrado, o casi…

Ya cuando no se veía tres a tres palmos. Vino como una luz en lo denso del bosque a donde nos dirigimos con premura, y con menos impertinencia llamamos a la puerta con el extraño colgante a m...

La primera impresión

Nunca sabes en que momento puedes conocer a esa mujer que has imaginado, esa por la que arderías en pasión.

Así fue con ella, rondaba ya en sus cuarentas, pero sus formas eran tal como las había pensado, aunque vestía de blusa con cuello cerrado, sus senos, grandes senos, se marcaban tan bien y era un deleite a mi vista.

Aunque esa primera vez iba de pantalón, si, si era de caderas amplias y piernas torneadas.

Al saludarnos quede cautivado por su sonrisa, pero sus ojos eran de mirada tierna, pero no pude evitar imaginar que esa mirada puede ser de lujuria cuando los  besos van por su cuello, sus labio...

Me gusta verla con vestido arriba de la rodilla

En esas conversaciones en las que fuimos tomando más confianza, llega el momento en que la mujer madura te suelta la pregunta de si eres muy galán, solo le dije no lo creo, pero me gusta escuchar, me dices eso enamora a cualquier mujer.

En otra conversación sin saber como, llegamos a ti cómo te gusta que vista la persona del sexo opuesto, yo te contestaba pues que me enloquece usen vestido tres cuartos arriba de la rodilla, medias o pantimedias negras y si se puede pues igual lencería negra de encaje.

En esa mañana ya te esperaba para ir a la reunión, ya me avisas estas a cinco minutos, ya te digo en que sitio me encuentro, llegas y al subir al coche lo primero que veo es un hermosa par de piernas en pantimedias negras y un vestido t...

Las redondeces de las nalgas

Cuando se consigue una meta, la celebración es efusiva

Pasamos días elaborando un proyecto, cuando lo fuimos a presentar logramos bastante éxito, ya que convocamos a varias personas y fue sumar a la causa.

Ese día de invierno portabas un vestido negro, pantimedias negras y tacones negros, te veías señorial pero sensual, al subir al carro te dije que bonita la señora, solo dibujaste la enorme sonrisa.

Esta vez estábamos con más personas, así que esas expresiones efusivas de agarrar la pierna pues tal vez no iban a darse.

Yo me sentía triste por...

Madura con pantalón de cuero

La primera vez que toque con mi polla un culo enfundado en pantalón de cuero.

Hola.

Tengo 42 años y aun recuerdo esta experiencia que tuve. Siempre me han vuelto loco las mujeres con pantalon de cuero algo mayores que yo.

Estaba yo en mi pueblo una tarde lluviosa con el paraguas y mi camara de fotos paseando a ver si encontraba una mujer madura de unos treinta años vestida con pantalon de cuero. Tras un monton de tiempo y ya pasadas las 20:00 vi una mujer de 170cm y meleta lisa que acababa en la nuca. Llevaba un pantalon de cuero negro brillante precioso. Desconocia que c...

Madura con pantalón de cuero marrón.

Su nombre era Rosa. Vestia pantalon de cuero marron. Tenia unos 33 años.

Tengo 42 años y esto me paso cuando tenia 21 años.

Era una tarde de otoño o invierno. Me dirigia a casa por un lado de la calle cuando la vi pasar por el otro lado en direccion contraria. Iba con un carro de bebe y vestia un pantalon de cuero marron. Su pelo era de color cobre y llevaba una melenita lisa que no llegaba a los hombros. Mas bien cortita.

Me di la vuelta y la segui desde cierta distancia hasta que empezo a entrar en su portal. Acelere el paso y entre al ascensor con ella y otra pers...

Iván. Follándome al jovencito infiel

Mis encuentros con Miryan me hicieron conocer a Iván, el chico de seguridad de su edificio. Un joven de 26 años que me pone como pocos. Desde el primer momento se creó una tensión sexual entre nosotros, que nos llevó a un finde de mucho sexo y pasión.

IVÁN

El tiempo pasa rápido y sin darme cuenta, mi estancia aquí en Sevilla se está terminando. En un principio pensé que se me haría larga y no imagine que pudiera pasar todo lo contrario, se me ha pasado volando.

He podido vivir alguna de mis fantasías a corto plazo. Estar con una mujer, hacer un trio con su pareja después de ser pilladas y sobrevivir a ello. Sobre todo que terminara bien. Fue morboso, excitante y el subidón fue brutal. Me parece que la vida sexual de Miguel, se abrió a pro...

Historias del abuelo calentón (46)

La fiesta fin de temporada me proporcionó acercarme a la Señora Lidia y su propio marido me dio la oportunidad de volverme a empotrar a aquella viciosa.

Mi vida cotidiana continuó, asistía a mis clases, acudía a mis entrenamientos, traté de llevar una vida ordenada y organizada, no exenta de algún contratiempo que alteró mi armonía, éstos a veces eran positivos y otros negativos. En el plan sexual, utilizaba cualquier ocasión para atormentar plácidamente a mi body.

Reflexionando alguna vez, analizaba que los encuentros con la señora Lidia me habían aportado experiencia y disfrute, cuestiones que siempre perseguía, sobre todo cuando estas escaramuzas e...

El despertar de un joven amante.

El encuentro entre un joven adolescente necesitado de experiencia y una mujer madura necesitada de sexo

Faltaban dos semanas para acabar el instituto, como cada mañana lo primero que hice fue espiar los vecinos, los Ruiz. Lo llevaba haciendo desde hacia casi 2 años, fue una mañana al mirar por la ventana vi a la señora Ruiz abrir la ventana, la iba a saludar pero me di cuenta que debido al contraluz su cuerpo se traslucía bajo el camisón, entonces la señora Ruiz tenia 32 años. Casi todas las mañanas sucedía lo mismo, así que idee un sistema de espejos que me permitía ver la ventana de la señora Ruiz, con el t...