Laurita... violación o consentido

Laura es una chica deliciosamente sexy que vence sus recelos y acuerda una cita casi a ciegas con un hombre que ... "la llenará completamente"... todos sus agujeritos. Comentarios a carlos_javier_gzlez@yahoo.es

Después de tanto desearlo, mi excitación ese día era enorme. Mi polla estuvo dura como una roca las más de dos horas de viaje hasta llegar al hotel en que habíamos quedado y me dolían los testículos de las ganas que tenían de librarse de su carga líquida.

Un parte de mi cabeza, la racional, dudaba y daba vueltas una y otra vez a la posibilidad de llegar y no encontrar a nadie… pero la parte pasional estaba absolutamente segura que ese sería un día de sexo súper intenso contigo. Sin duda había domi...

Deudas de drogas 4 y final

El tiempo se le acaba y la solución no se puede hacer esperar. Es hora de pagar o atenerse a las consecuencias.

Levo dos días sin parar de llorar. Mi novio continúa de viaje y la soledad me mata. Cada ver que voy al baño veo las estrellas y tengo que estar poniéndome esa pomada antiséptica continuamente, además de llevar una dieta blanda para minimizar el mal rato. Para colmo no he vuelto a saber nada de aquel buen samaritano que conocí en la discoteca y que me sacó del infierno. Me doy asco y no soporto recordar esos repugnantes momentos que me han convertido en una furcia de tres al cuarto. No sé si tendré valor de...

Obligada a protagonizar una peli porno

Por una deuda de juego, tengo que acceder a que mi esposa sea de manera inconsciente la protagonista de una película pornográfica.

Estaba desesperado. Mi mala cabeza, aquella actitud negligente, me había hundido. No sabía como salir del atolladero. Así fue como comenzó a explicarme Rubén su vivencia para que escribiese este relato sobre todo lo que aconteció aquel 2 de junio de 2011.

En mi situación de desempleo, disponía de mucho tiempo libre. Sin duda demasiado. Había pasado ya bastante tiempo desde mi último trabajo. Natalia, mi esposa, doblaba frecuentemente turno en el hospital donde trabajaba como enfermera, lo que nos perm...

Deudas de drogas 3

Las exigencias son cada vez mayores y la situación se torna cada vez más complicada.

Llevaba unos días sin saber de mi hermano, por lo que decidí llamarle. Y aunque no podía explicarle lo del Hospital ya que desconocía mi trato con Héctor, tenía que evitar que mi novio descubriese la mentira.

- ¿Iván?, ¿Cómo estás?

- ¿Qué como estoy?, como voy a estar, ¡jodido!

- Lo comprendo cariño, lo comprendo… ¿Y cómo va el asunto del dinero, has podido conseguir algo?

- *¡Y de donde quieres que lo saque!, es más dinero del puedo conseguir con un año de trabajo, y por s...

Noemí

Veremos como una mujer actual pero con una mentalidad “transparente”, pasa a ser “posesión” de alguien que es capaz de identificarla, como lo que en realidad es, la más zorra y tragapollas de las conocidas por él hasta el momento, veremos varias de sus hazañas, en próximos capítulos.

Esa tarde de miércoles era gris, bajaba por una calle estrecha y tuve que hacer un “ceda el paso”, a la izquierda quedaba el muro lateral de un centro médico y a la derecha solo la pared de un colegio, por la desierta acera distinguí la figura de una mujer y como la alcanzaba la cortina de agua, en instantes quedo empapada, con el limpia al máximo apenas la veía, me detuve a su altura abrí la puerta y le grite “ SUBE ”, se agacho un poco para mirarme y entro en el coche y con cara de verdadera indigna...

Mi viaje por Zimbabwe 7

El final

En mi cautiverio por fin vi a Jane.

-¿Cuándo me sacaras de aquí? ¡Quiero volver con mi familia!

-¿Qué familia? – dijo Jane riendo

Alfonso no entendía lo que quería decir, pero Jane le lanzó algo, un anillo, se le encogió el corazón al ver que era el anillo de boda de Alba, espantado, miró a Jane que sostenía una larga cabellera rubia, la de su esposa.

-¿quieres saber como me fue el viaje? Muy bien, me encontré con tu mujer, una chica guapa, la seguí hasta su casa y esperé a la noche....

Deudas de drogas 2

Las deudas de su hermano continúan pasando factura a nuestra protagonista.

Habían pasado dos días y todavía no había recibido llamada alguna. Por una parte esto me confortaba pero por otra me preocupaba. Si se aburría de mí las consecuencias podían ser nefastas para mi hermano. Me resultada muy duro afrontar esta situación, pero ante esa tesitura la vida de mi hermano siempre estaría por delante. Trataba de no pensar en ello pero me resultaba completamente imposible, hasta mi chico había notado mi nerviosismo. No sabía cuanto tiempo podría seguir ocultándole la situación,  una lla...

Mi viaje por Zimbabwe 5

Dos hombres someten a una pobre chica por culpa del error de su padre

Saboree sus pechos, dulces, suaves, firmes, mojados por mi saliva y las lagrimas de impotencia de la chica, mientras Richard lamia su concha.

La joven cerraba con fuerza sus ojos intentaba que su mente se fuera, pero Gainsborough me ordenó que le pusiera mis auriculares.

Entonces la niña escuchó las palabras de Gainsborough.

-cuando pregunte que eres, tu gritaras una puta, cuando preguntes que deseas, dirás que follar, cuando te pregunte que harás con tu hijo, dirás, si es niño, me dejare...

Deudas de drogas

Las consecuencias de no poder pagar las deudas van más allá del propio interesado.

La mayor alegría de mi vida ha sido tener un hermano, un hermano pequeño al cual querer y del cual poder cuidar. Todas las niñas llevamos una potencial madre dentro y mi hermanito, desde que nació, fue ese juguete, esa muñeca perfecta a la que entregar todo mi amor y dedicación. Disfruté de él todos los días, le llevaba de la mano al colegio, bajaba con él al parque, le ayudaba en los estudios y así un sinfín de actividades que compartíamos juntos. Pero nos fuimos haciendo mayores y esa complicidad se fue p...

El Cobertizo

El conductor a toda prisa y el lider dirigiendo. Los otros dos conmigo detrás. Un pequeño cobertizo era lo único que había

La noche no era especialemente fría a pesar de ser finales de marzo y la brisa del mar soplaba constante hacia la ciudad. Había luna llena y la terraza de la sala de fiestas estaba iluminada ténuemente por su luz. Yo estaba apoyada en la barandilla mirando hacia el pequeño puerto deportivo. Había bebido más de la cuenta y decidí tomar un poco el aire.

La celebración de la despedida de soltera de mi hermana estaba siendo todo un éxito. En pocos días se casaría con Roberto, un chico no mal parecido y co...