Oficina

Cuando todo te da igual.

Faltan dos días para que acabe mi contrato de trabajo temporal. Yo soy el chico de los recados en un edificio de co-working y han contratado a un nuevo jefe de sección (el anterior, un viejo septuagenario adicto a la viagra la palmó en un burdel de Mallorca). La nueva jefa es una cincuentona de culo gordo, tetas grandes y gafapastas a la que le gusta llevar siempre la razón en todo. Se llama Carmen.

A mi me pone bastante. Siempre va vestida con unos trajes muy formales, pero enseñando s...

Dildo Streamer.

Todo por una apuesta.

Dildo Streamer.

Samira estaba convencida de que ninguno de los otros streamers podía ganarle en una pelea de Street Fighter V. Ella los invitaba a participar de su propio canal, que se había vuelto sumamente popular en los últimos meses, y los humillaba.

Las derrotas de sus invitados eran contundentes; sin importar con qué personaje jugara Samira. Ella sabía que tenía un gran talento para este juego y se pasaba largas horas practicando.

Su confianza la llevó a iniciar apuestas con los otros...

Recuerdos imperfectos

Hoy quiero que vengas conmigo...

Hoy quiero que vengas conmigo a esa casita. ¿Recuerdas cuando te la ofrecí para que fuera tu refugio, para que en ella pudieras olvidarte del mundo?

Ven conmigo a esa casita junto al mar, en medio de ese esplendido pinar, donde lo único que se oye es el sonido del mar, las olas lamiendo a lo lejos la orilla, mientras tú descansas, mientras recompones tus pedazos.

Llegaste anoche con las indicaciones que te envié, recogiste la llave que enterré para ti en un macetero junto a una de las ventanitas...

Esa eras tú

Un encuentro en un puerto, dos personas que cruzan sus estelas. ¿contarás lo que pasó?

Esa eras tú

Maniobramos ya de noche cerrada hasta un amarre cerca de los bares y la vida nocturna del puerto, los alumnos ayudaron con los largos de popa y la codera de proa, y en cuanto estuvo firme el velero bajamos a tierra dejándolo todo desordenado. Muchas horas de navegación nos empujaban alegres hacia una cerveza bien fría en uno de los locales junto a los barcos.

Como siempre el grupo variopinto de alumnos de navegación incluía desde recién jubilados que querían pasar en el mar parte...

No somos pieles rojas

Una historia del confinamiento, sin sexo.

Silvia, como todos los españoles, está siendo  víctima de la crisis sanitaria. El hotel donde trabajaba como limpiadora hizo un expediente de regulación temporal  de empleo al comienzo de la alarma por el covid19.

De momento, como el piso donde vive es propiedad de su madre, se está apañando, aunque a duras penas,  con el subsidio. Eso sí a sus tres niñas se le va a poner cara de arroz,  patatas y    de  macarrones con tomate. Si quiere comer todos los días, la posibilidad de un menú más variado queda...

Momentos

...

...Y no me digas que en tu proceso has olvidado nuestras “peleas” de sofá, yo hoy las recuerdo relamiéndome. Una especialmente; aquel día en que volviste del trabajo, como siempre pulcramente vestido con tu traje y tu corbata, con el que habías salido y yo tirara en el sofá, viendo alguna serie chorra de netfix. Me saludaste con los ojos y te sentaste a mis pies, con el teléfono perpetuo en tu oído, discutiendo con alguien algo de trabajo aun.

Yo te hice carantoñas con mis pies, y tú los apartabas con...

Pensandote...

Hoy como siempre he despertado recordándote, añorándote, sintiéndote en cada rincón de mí ser. Necesitando las caricias de tus manos, de tus labios...anhelando sentir la tú saliva empapando mi piel, mientras tu piel se funde con la mía.

Hoy como siempre he despertado recordándote, añorándote, sintiéndote en cada rincón de mí ser. Necesitando las caricias de tus manos, de tus labios...anhelando sentir la tú saliva empapando mi piel, mientras tu piel se funde con la mía.

A veces hasta duele desearte, duele el calor y la necesidad que recorre mi cuerpo, que se acumula entre mis piernas haciéndose insoportable, hasta el punto en el que mi mano, mis dedos, tras deslizarse por mi piel enfebrecida terminan entre mis muslos, dispuesta a aliv...

El milagro.

Obra y milagro de un Santo.

“De mis disparates de juventud, lo que me da más pena no es haberlos cometido, sino no poder volver a cometerlos”.

Benoit, Pierre. (1885-1962).

Novelista francés.

El milagro

El que escribió aquello de “yo me llevé al río creyendo que era mozuela… pero tenía marido”. Bien debía de saber, de estos lances amorosos, porque cerca de aquél pueblo en donde corría un pequeño río o más bien un barranco según los tiempos. Era el sitio preferido para solaparse los amantes del lugar.

Inclu...

Anilu

Pequeña reseña sobre Anilu y una historia corta sobre un encuentro sexual poco o nada procechoso...

Una pequeña reseña de la protagonista de está y muchas otras historias, Anilu es una joven que mide poco más de 1.45, tiene una piel canelita bien sexy de cabello rizado alborotado el cual se aliza la mayor parte del tiempo, una carita muy simpatica capaz de pasar de una sonrisa muy tiernamente hermosa a una sonrisa lasciva que te dice "culeame de una maldita vez" sin mucho esfuerzo, tiene buenas tetas casi perfectamente equivalentes a su estatura, muslos gruesos y pantorrillas que hacen juego casi perfecto...

Doña Úrsula y el italiano.

Historia de dos viudos que se conocen y coinciden en gustos.

“Se inventó la seda para que las mujeres pudieran andar vestidas y desnudas a la vez”.

Abril Kassim, Mahoma (570 – 632) Profeta Islámico.

Doña Úrsula y el italiano.

Doña Ursula, el día que las famosas torres gemelas americanas fueron destruidas por aviones terroristas, enterraba a su marido.

Aquella buena mujer esa fecha no la olvidaría nunca. Doña Úrsula hubiera deseado que los aviones que impactaron contra éstas dejándolas en escombros, hubieran impactado sobre ella. Así hubiese te...