Empezaba a intuirlo, pero creo que lo supe cuando me follé a Ariadna. Las mujeres pueden llegar a ser de goma, tomar las más diversas posturas, hacer auténticas acrobacias con tal de satisfacer a un hombre. Casi podía tirármela mientras me la chupaba, de flexible que era. Deberían hacer obligatoria la gimnasia rítmica. Votaré al partido que lo incluya en su programa.

Empezaba a intuirlo, pero quizá lo supe cuando eché aquel polvo con Beatriz. Aquello sí que fue grandioso. Ocho horas de sexo sin...

¿Cuánto dura una hora?

Hasta que la conocí sabía medir el tiempo. No de una manera muy exacta, pero si bastante aproximada. Contaba segundos, uno, dos, tres, cuatro… así hasta que sesenta juntaban un minuto. Era sencillo. Y sesenta minutos eran una hora

Ahora todo es diferente, ¿qué pasa si cuando crees contar segundos están pasando horas? Todo tu mundo, todo lo que conoces desaparece y solo está ella.

Ella.

Y esos ojos. Son dos ojos azules. Existen muchos símiles en la literat...

Eran las 11 de la noche, acababa yo de entrar al trabajo, la pesadumbre invade mi cuerpo, como cada noche en que debo ir a trabajar a ese lugar, de donde tantas veces he deseado salir.

-Una habitación por favor- Dice una voz desde la recepción.

• Por toda la noche?- Pregunto, al momento que veo frente a mi, un hombre no feo, de alrededor de 30 años, alto y su pelo pinta algunas canas, nada feo, lleva ropa deportiva, seguro viene del gimnasio, pues su cuerpo refleja el trabajo en el.

-...

MICRORELATO (14)

UN POLVO MÁS RÁPIDO QUE UN RAYO.

®by Zesna

http://www.todorelatos.com/perfil/265468/

Tan sólo veinte minutos.

Veinte minutos de placer.

Veinte minutos de sexo.

El hombre gordito entró al hotel seguido de una mujer que no le siguió los pasos hasta no confirmar que nadie la miraba, como siendo víctima de un remordimiento que difícilmente lo iría a poder superar, como si lo que estuvieran a punto de realizar no fuera lo más normal del mund...

Siempre he creído que el nombre propio que nos asignan desde que nacemos tiene, en cierta forma, repercusiones, en nuestro carácter, y en nuestros patrones de comportamiento. En tu caso, Aurora, y sin apenas conocerte, no podía ser más acertado, pues en los escasos minutos que nuestro amor duró, iluminaste mi vida para siempre.

Es la nuestra una historia extraña, hermosa como una promesa, breve, tan breve, que deja todo a la imaginación. Perfección. Agridulce, pues sabedor de que no volveré a ve...

Salí de la cama al escuchar el ruido, eran las cinco y media de la mañana. Me acerqué a la puerta con cuidado de no hacer ruido, y no pude evitar sonreír cuando vi a mi vecina al otro lado por la mirilla, ella era quien intentaba abrir sin ningún éxito, claro.

Giré el cerrojo y ella me miró sorprendida, no había duda: Había bebido bastante.

Te has confundido. Tu puerta es esa otra.

No dijo nada, dirigió la vista hacia donde yo señalaba dedicándome una sonrisa bobalicona. A continu...

Un deseo, un sueño...

He tenido un sueño, de los nuestros, de los que nos gustan a nosotros, en los que estamos despiertos.

He soñado que te era sincera y te decía que te quiero. No el querer como el de tu matrimonio, si no un amor necesitado, me hace falta sentirte, tocarte, tenerte, notar tu respiración en mi espalda, tumbado a mi lado en la cama.

Te necesito cerca, vamos a hacerlo, se que no estaría bien, pero me es preciso volver a sentir tus caricias, porque aunque nunca me has ...

Una nieve muy Caliente

(Micro relatos)

Mi paraje es una enfermera en un hospital privado, el otro día que le hable al trabajo para ver a que hora salía, me contesto Gaby, una de sus amigas que me gusta mucho, ella es madre soltera, tiene unas piernas delgadas y bien torneadas, unos senos que piden a gritos ser chupados, unas nalgas bien paraditas, y lo mas importante que me ha coqueteado un par de veces.

----Hola Gaby, habla Héctor, me comunicas con mi pareja----le dije.

---Está...

¡Buenos días, Eduardo! – Me dice el sujeto acostado a mi lado luego de despertarme con un beso.

Buenos… días. – Le respondo sin mucho ánimo y sin pronunciar su nombre, no porque no me guste sino porque ni siquiera lo recuerdo.

Lo conocí anoche, en alguno de los antros que visité. No me acuerdo en cuál ni el cómo me le acerqué, o si fue él quien lo hizo. En realidad, no recuerdo muchas cosas después de esa noche en que me dejaste. No tengo claro en qué día vivo, cuántos hombres he traíd...

En casa de Eva

Recuerdo la época de la universidad. Y recuerdo a mi querida compañera Eva, de la facultad de medicina. Las dos éramos inseparables y ella me gustaba, pero cuando me declaré me rechazó porque no le iba el rollo lésbico.

En todo caso no me apartó como amiga y compañera, tan sólo me dijo que de relación sentimental nada.

La cosa siguió como siempre. Un día quedé con ella en su casa para estudiar, como me adelanté a la hora de la cita Eva no estaba pues había salido. Su ma...