Diario de un Consentidor (42)
Esta es una historia de deseos, emociones, placeres, dudas, decisiones y pensamientos, es la historia del camino que nos llevó a Carmen, mi mujer, y a mí a lanzarnos a vivir las fantasías inconfesables que sin saberlo compartíamos en silencio cada vez que hacíamos el amor; Esta no es una historia de penetraciones y orgasmos, aunque también lo es; Así que si tu, lector que has llegado hasta aquí, buscas un desahogo rápido de tus pulsiones te recomiendo que abandones este texto y busques algo mas inmediato.
- "Llámale"
- "Si, claro"
Carmen sonrió con escepticismo, no se había tomado en serio mi petición. Mantuve su mirada sin inmutarme y, al ver mi expresión la sonrisa cayó de su boca.
- "¿Estás de broma, verdad?"
Pausadamente negué con la cabeza, mis ojos la retaban y su rostro comenzó a mostrar la incredulidad y la sorpresa que mi petición le causaba.
- "¡Venga ya!" dijo intentando rechazar lo que yo le planteaba.
Yo continuaba acariciando su estómago por debajo del pijama, el pulg...