Diario de un Consentidor 96 Vidas paralelas
Esta es una historia de deseos, emociones, placeres, dudas, decisiones y pensamientos, es la historia del camino que nos llevó a Carmen, mi mujer, y a mí a lanzarnos a vivir las fantasías inconfesables que sin saberlo compartíamos en silencio cada vez que hacíamos el amor
Vidas paralelas
—Mírate, si estás en los huesos; y esas ojeras… No lo voy a consentir, estás obsesionada.
—Solo unos días más, ya casi estoy acabando.
—Eso llevas diciendo… ¿cuánto? No Carmen, no. Te escucho y me asustas, hablas de esa náufraga como si fuera otra persona. Te concedo una semana, después te vienes a casa o si no...
—Irene, por favor.
—No soporto verte así, no te imaginas cómo has cambiado. Tienes que parar, no sé si estás consiguiendo lo que buscas pero por ...