El marido de mi amante
Al principio creí que iba a ser todo mucho más sencillo, pura atracción física entre desconocidos que se encuentran, casi por casualidad, en un entorno extraño. Pero no...
Al principio creí que iba a ser todo mucho más sencillo, pura atracción física entre desconocidos que se encuentran, casi por casualidad, en un entorno extraño. Pero no. Al acabar el congreso y el fin de semana ella seguía allí, en mi pensamiento y a flor de piel. Quería tenerla, caer en la tentación de lo prohibido, volver a sentir la gloria en su cuerpo. Noelia descuadraba mis ideas como las piezas de una partida de Tetris cuando se acelera. Vivía lo suficientemente lejos como para no convertir la infidel...