Mi esposa no quiere intercambios - III
Nunca te quejes de lo que Dios te da, porque siempre puede ser peor... o mejor ¡Quién sabe! Pero nunca será igual.
Y empecé a caminar, ese camino que cada día construimos con cada paso. Empecé a caminar, empecé a recorrer el camino, empezó mi nueva vida sexual...
Nuestra cena con Cristi y Yago fue fantástica. Cenamos, bebimos, nos reímos a tope, y casi vencida mi resistencia a los intercambios de parejas y con toda nuestra confianza familiar de tantos años, nos acariciábamos, nos besábamos, y nos metíamos mano como si no fuese mi verdadera primera noche de intercambios matrimoniales. No fue nada especial deja...