Mis memorias tercer capitulo

>Jamás, jamás en mi vida me habían hecho esto ni mi marido me había sacado un orgasmo tan hijueputa.

MIS MEMORIAS TERCER CAPITULO

Hola muy buenas queridos lectores hoy quiero continuar con el tercer relato de mis memorias. Continuaron las festividades decembrinas y en la casa la época de la navidad se celebra todos los años estaban ya todas mis hermanas las mayores con sus novios. Yo después de estar con don Augusto no volví a tener novios en el pueblo, me parecían tan idiotas todos los jóvenes del lugar. Entonces andaba sola eso me daba más libertad y a pesar de que fueron varios los que me halagaba...

Mis memorias segundo capitulo

No lo podía creer mi tía y mi prima de putas con dos extraños en un cuarto de hotel.

MIS MEMORIAS SEGUNDA PARTE

Hola amigos continuando entonces con mis memorias para el día de hoy, les contare una de mis experiencias que en esa entonces me lleno de mucho morbo y otras cositas.

Se llego diciembre y con su alegría, mes de parranda y de mucha acción, venia mucho turista y por supuesto yo estaba dispuesta a ganarme mis buenos pesos. Al pueblo para esa navidad vino mi tía ya bastante viejita, con Sara una de sus hijas quien vino también acompañada de su esposo y tres de sus hijas, e...

Mis memorias primer capitulo

No entendi por que mi madre me celebro el haber perdido la virginidad

MIS MEMORIAS PRIMER CAPITULO

Muy buenas amigos como están. Hoy le he querido contar un poco de mi vida.

Desde muy  joven y por circunstancias de la vida. Me empezó a gustar y a sentir esa especie de emoción y arrechura que se siente al disfrutar de tu cuerpo. Nosotras vivíamos en un pueblo del departamento del Tolima llamado Flandes en donde nací, junto con mis 5 hermanas, mi madre costurera  de profesión nos saco a todas adelante, valga decir que no todas somos hermanas de un mismo padre. P...

Los Misterios del Vaticano (1)

EL Vaticano, no siempre ha sido casa de santidad, y sus moradores pues tampoco se puede decir que fueran santos, he aquí el relato de esas interioridades más íntimas y sexulaes

LOS MISTERIOS  DEL VATICANO

LAS APETENCIAS DEL SR. OBISPO.

Era una tarde plúmbea de verano, donde las ventanas abiertas de par en par apenas si dejaban pasar más que un sopor que incitaba más a la perversidad que al relajamiento.

En aquella estancia un tanto gris; un palacio romano de Vía Veneto en el cual apenas si la luz penetraba a través de los densos cortinones rojos; En la penumbra se podían entrever pequeños retablos del siglo XVII y estatuillas religiosas de distinta época que...

Aventuras de un Benedictino (III) y ultimo

Las desventuras de un benedictino por los mundos del demonio y la carne

“ QUIEN LA HACE LA PAGA..” (III)

Me reuní días más tarde con Beldane y una de sus leales siervas para celebrar nuestra venganza, que ya campeaba por todas las bocas de la Comarca.

Nos reunimos en la pequeña casita que me habían  otorgado mis anfitriones y allí me dispuse de gozar de nuevo de la anfitriona y una sierva tan leal como lujuriosa.

Estaba en plena faena de dar placer a las dos mujeres que una encima de la otra se me ofrecían una con su bello culito en pompa  el de Beldane qu...

Aventuras de un Benedictino (II)

La aventura de una Benedictino que sale de su monasterio a los mundos del demonio y la carne

EL VIAJE II

Salí del monasterio tras maitines , sin despedida alguna, con el mensaje del Padre Abad , un par de alforjas que cargaba Celedonio y un  zurrón que  llevaba al hombro, camine por caminos y trochas durante unas cuantas horas  sin hacer descanso, pues por aquellos parajes las revueltas eran continúas y quería poner tierra por medio.

Tras recorrer unas buenas leguas, sentí necesidad de realizar mis necesidades y me  fui tras unos arbustos, donde colgué mi zurrón con los mensajes alb...

Las aventuras de un benedictino (1)

Las historias de un Benedictino por esos mundos de dios

LAS AVENTURAS DE UN BENEDICTINO

LA NOTICIA I

Tras las revueltas de  hermanos  propios y de otras órdenes que  pedían la abolición de las rígidas normas conventuales que nos alejaban cada día más  de nuestros propios convecinos, que  a su vez se revelaban contra  la opulencia de las órdenes religiosas.

Nuestro vetusto y pobre monasterio de San Benito , comenzó a sufrir los síntomas de una inminente rebelión no tanto porque nuestros aparceros nos reclamasen mejoras, que ya tenían y goz...

El Último Vuelo del Electra: Cap 11

Dana y June tienen un plan.

11

—A ver si lo he entendido. —dijo Unemaro— Me decís que ahora hay aviones a... ¿Cómo los llamáis? A reacción. Capaces de llevar quinientos pasajeros con sus equipajes, a mil kilómetros por hora, atravesando océanos sin escala y que los americanos habéis llegado a la luna y sin embargo vosotras venís hasta aquí con un avión igualito al que derribé hace cincuenta años...

—¿Cómo? —le interrumpió June—¿Derribaste el avión de Amelia? ¿Dónde cayó? ¿Hubo supervivientes?

—Silencio, perra. —d...

La ciudad de las Maduras (3)

El descubrimiento de sexo entre maduras, (incestos, zoofilia, maduras=

UN LUGAR PARA EL PLACER(III)

Lo cierto es que después de todo este meneo, me quedaban muy pocas ganas para desplazarme hasta mi observatorio, que además no me estaba dando muy buenas actuaciones, puesto que mis vecinos parecían inclinados a follar a oscuras, o simplemente a no follar, pues la racha de calor que estábamos sufriendo, no era como para andar de jodienda con las ventanas cerradas y sin para el desenfreno erótico, pero no parecía que dichas estampas pudieran ser ofrecidas para su...

El Último Vuelo del Electra: Cap 9 y 10

June y Dana comienzan a conocerse un poco mejor.

9

Aquel enano cabrón se la había jugado, pero no volvería a ocurrir. Esperaron a la noche antes de volver a intentar pescar y esta vez no iban a volver al avión. Se metieron con la red y a la luz de la luna repitieron la técnica. Todo era más difícil. Apenas veían donde ponían los pies, con lo que en ocasiones golpeaban dolorosamente algún afloramiento del coral en la arena y los peces huían con más facilidad.

Finalmente consiguieron el pescado suficiente para darse un buen atracón. Con el m...