Tres días de junio. Día segundo la confirmación

... Son las 13:30 otra vez tengo que buscar excusas con la puta zorra de mi mujer... llegaré otra vez tarde. ...

Día segundo…….

suena mi móvil.

  • Hola buenos días ¿quién es?

  • Hola, buenos días, soy Agustín quería hablar con Ramón.

  • don Agustín, soy yo me alegra que me haya llamado.

  • No te he oído decir qué eres...

  • Perdone don Agustín por mi error... soy el puto cornudo de mierda amariconado, su putilla particular y la de quién usted quiera.

  • Así me gusta más, que guardes las formas maricona.

  • Dígame don Agustín ¿en que puedo ayudarle?

  • Verás esta noche he...

Tres días de Junio

A don Agustín lo conocí por casualidad en un chat de dominación-sumisión, tuve el honor de que me dedicara un poco de su tiempo ... y cambio mi vida.

Nunca pensé que unas conversaciones por chat cambiarían tanto una vida...

Me presentare... me llamo Ramón y vivo en Madrid, en uno de tantos barrios de la periferia de la gran ciudad, con Carmen mi esposa de 35 años y Lidia mi hija de 16 años.

Actualmente tengo 40 años y lo que les voy a relatar es del año pasado aunque para que entendáis algo más de mi os diré que desde pequeño siempre he sido apocado y las personas autoritarias me intimidan.

A don Agustín lo conocí por casualidad en...

Sacificio mexicano

¿que se puede hacer con un semental, todo macho?. Continuación de Sky City Casino.

SACRIFICIO MEXICANO.

El calor nos hacía sudar y eso tenía su encanto, pues nuestras pieles relucían bajo la luz del sol de tarde que inundaba la habitación . Elena estaba hermosa, su piel morena con esa mezcla de apache que tenía en su sangre, lucía apetecible para mi lengua. Le lamí despacio la espalda, me gusta su sabor salado, la recorrí entera hasta llegar al valle entre sus nalgas, seguí el desfiladero de un hermoso marrón hasta llegar a su oscura cueva.

Se giró, casi tirándome de la c...

Proposición indecente

El jefe de mi marido le propone un ascenso a condición de disfrutar de mi.

Proposición indecente

Estaba harta y muy preocupada por mi marido. Él, que desde que nos conocimos era una persona con mucha confianza y con mucha ilusión estaba desencantado. Tras los años en la universidad en la que nos conocimos yo me dediqué a trabajos sencillos, como traductora y cosas así mientras que él, primero de su promoción encontró trabajo en una gran multinacional. Tenía un futuro muy prometedor y nos casamos al año. Yo por entonces era virgen, fruto de colegios religiosos y de...

Elecciones

Afrodita y Dulce, pese a ser Diosa y sumiso, también van a votar.

Elecciones

El despertador en forma de música había sonado en los auriculares que Dulce se había puesto para no despertar a su Ama. Ella le había dejado bien claro que quería que antes de acortarse terminara de pasar a ordenador las decenas de folios de su trabajo escritos en bolígrafo y había acabado de obedecerla alrededor de las 5 de la madrugada; ahora en su reloj marcaban las 8:00 h.

Se levantó del suelo, se aseó, se vistió rápido, desayunó, y se dirigió hacia el colegio electoral. Afr...

Mi venta (01:El día)

Mi actual Amo me ha ordenado escribir mis vivencias durante el primer mes desde que me adquirió en varios capítulos. Si mis relatos no son bien valorados seré castigada. Si son bien valorados deberé escribir más sobre mi nueva y fantástica vida y la de otras felices esclavas que he conocido en la mansión de mi Dueño.

Mi Señor me llamó por el móvil exclusivo para su servicio el día de mi 50º cumpleaños. Quería disponer de mí. Pero no pude cumplir sus deseos. Mi casa estaba llena de familiares y amigos celebrando mi medio siglo. No hubiera podido encontrar ninguna explicación para abandonarlos en medio del festejo y acudir a su servicio. Me sentí sumamente apesadumbrada por no poder ofrecerle mi humilde cuerpo y mi sumisa alma. No me importaba el castigo que sin duda me aplicaría, si no el no poder cumplir su deseo....

El placer de una sumisa

Cuento mi experiencia con mi amo.

Quedo mi amo en pasarme a buscar a las 20.30 hs. Puntual como siempre lo espere en la puerta. Subí al auto, lo besé y arrancó hacia el hotel. Intercambiamos pocas palabras, solo las necesarias. Al llegar al motel, y subir a la habitación, me arrodillé a sus pies, bajé sus pantalones y comencé a mamarle la pija. Me la metí en la boca y poco a poco fue poniéndose bien dura como a él le gusta tenerla para someterme con ella. La tomé entre mis manos y la besé en todo su largo y ancho, le gusta que le pase...

La seducción de Ana (1)

Ana va a descubrir en sí misma ,aspectos que nunca antes vió.(Primera parte)

  • Es tu decisión-indicó el hombre con suavidad-Podemos continuar a partir de aquí o dejar todo como estaba. Te espero en la sala .Si no vas a hacerlo puedes irte sin despedirte- añadió mientras abría la puerta- pero si lo haces puedes estar segura de que no habrá vuelta atrás.

Ana permaneció quieta, observando la puerta que se cerró tras la espalda masculina.

Miles de pensamientos pasaron por su mente, pero uno solo prevaleció ,lo amaba y lo que era peor, lo necesitaba, ni siquiera sabía po...

La vecina

Enmedio de una sesión se aparece tu vecina y pagara su curiosidad.

He llegado a tu casa y decido que vayamos al jardín a jugar, tomo la pelota de goma, tu hueso de plástico una paleta, tus bolas chinas anales y unas pinzas de mariposa que pondré en tus nalgas, cuando llegamos al patio te ordeno te eches al suelo y abras las patas apoyo mis botas sobre tus muslos y escupo sobre tu raja, presiono un poco más sobre tus muslos y gimes al sentir como voy forzando tus patas, vuelvo a escupir tu raja y te ordeno que te masturbes, tu empiezas a tocarte la raja y frotas tu cl...

Seguimos con Alba

Alba solo existe para darme placer, y siempre lo consigue.

Hacía días que tenía pendiente una cena con mi perra Alba, aprovechando que me había informado, que su marido tenía unas jornadas médicas fuera de la ciudad, decidí que ese miércoles quería cenar con ella, una escueta llamada bastó para concertar la cita.

-Esta noche voy a cenar en tu casa. Preparate.

Pasé la jornada entreteniéndome en las rutinas del quehacer diario, cuando casi sin darme cuenta llegaron las ocho de la tarde. Cogí el coche y me dirigí hacia su casa, mientras pensaba en lo...