Lara, una chica muy obediente (3)

Eva y Juani aseguran su dominación sobre Lara, que ya no tendrá escapatoria...

Lara, una chica muy obediente (3)

A la mañana siguiente la despertaron los gritos de Eva y un violento zamarreo que la sacudía. Las brumas del sueño que se negaba a abandonar su cerebro le impedían comprender. Juani se sumó del otro lado de la cama y entre ambas la sentaron en el borde.

-¡Mi anillo! ¡¿Dónde está mi anillo?! –le preguntó Eva con tono duro.

-¡Vamos, dinos dónde lo escondiste, ladrona! –insistió Juani.

Lara se desesperó, incapaz de comprender qué estaba sucediendo. ...

Inicio de bodas....(5)

Sensaciones en la noche de bodas

Más que sensaciones es un estado. O quizás son ambas cosas. Intento verme desde los ojos de Laura, desde los sentimientos que tiene que estar viviendo.

Y antes que pueda darme cuenta, me encuentro con otra polla en la boca. Esta vez con la mirada al frente, dentro de las posibilidades que me ofrece la posición en la que me encuentro, con la cabeza justo por debajo de la mirada de mi mujer.

Alguien manipula las cadenas con penden de mi cuerpo: la de los testículos hasta los tobillos, los pezones...

La sumision de Raquel hija de Ana 2

Continuación de Inicios de un Amo No me desperté hasta las doce de la mañana más o menos, totalmente despejado y empalmado, así que me levante y fui a ver donde andaban las dos.

Raquel no hablaba solo miraba y asentía.

-Mañana cuando nos levantemos hablaremos sobre lo que ha pasado hoy y lo que vas a ser a partir a ahora………

No me desperté hasta las doce de la mañana más o menos, totalmente despejado y empalmado, así que me levante y fui a ver donde andaban las dos.

Sentí hablar en la cocina, por lo que me dirigí hacia allí, y lo que vi me gusto, Ana estaba sentada en una silla y Raquel de rodillas, y aun vestida como se quedo dormida, y Ana recién duchada...

La primera noche de mi nueva vida

Garganta de Cuero cuenta en el Ejercicio la historia de Paulina, viuda joven y armada con unos grandes pechos que cae en las manos de Alain, un suizo que además de su benefactor y amante aspira a convertirse en su amo. Cuando Paulina acepta su oferta, él le da la noche de su vida.

El taxi paró en justo en la dirección que le indiqué, “llegamos seño” me indicó sin ganas el piloto, más por costumbre que por cortesía. Le dejé el importe del servicio en la mano y bajé, con la misma cara de aburrimiento y fastidio emprendió la marcha. Bueno, por lo menos no se fijó en mi, no tenía humor para recibir atenciones indeseadas. Aunque claro, mi atuendo me ayudaba. Aquella mañana llevaba un traje sastre gris con chaqueta celeste, nada llamativo y hasta anticuado, pero me servía para no llamar la...

Inicio de bodas....(4)

Cómo puedenser las cosas

La camarera aparece con paso decidido. Observa mi rostro, enrojecido por su presencia y el acalaramiento del trato al que he sido sometido.

No puedo decir que no me haya gustado. No puedo negar que sigo en trance por la excitación que invade cada centímetro de mi cuerpo. Pero su presencia, sabiendo la apariencia que presento hace que sienta un cierto ridículo: un tio como yo, amante de las mujeres (bueno de mi única mujer) en esta posición, expuesto en todos los sentidos y lleno de semen por dentro y...

Amaia (5)

AMAIA sigue con su educación hoy recibe sus joyas para lucir como sumisa, debe pagarlas de una morbosa forma y luego se las muestra al Jefe del grupo

AMAIA, SIGUE SU EDUCACION(V)

Después del baño en la sede de la empresa de Alfonso Vicky la condujo al baño y luego a su coche. Esa noche era mejor que la pasara con ella porque al día siguiente había muchas cosas que hacer. Amaia durmió en el suelo a los pies de la cama de Madmoiselle. Como pijama su ropa, como colchón la madera del suelo. La noche la pasó excitada por todas las situaciones que la estaban ocurriendo.

Que era eso que la estaba golpeando el brazo?. Entreabrió uno de sus ojos y...

Lara, una chica muy obediente (2)

Eva y Juani acentúan su dominación sobre Lara, humillándola sin piedad...

Lara, una chica muy obediente (2)

El sonido agudo de la alarma la sacó violentamente de su sueño, ese sueño profundo y a la vez inquieto en que se había sumido a altas horas de la madrugada, exhausta después de todo lo que Eva y Juani habían hecho con ella.

Vuelta de costado en la cama, su primera sensación fue la provocada por ese vientre femenino apretado a sus nalgas. Inmediatamente después sintió un brazo bordeándole las caderas, una mano entre sus piernas, ceñida a su conejito, y una re...

Jorge y Juan (5)

Los dos chicos se acercaron a mí alegres, voceando a gritos pelados en piropos graciosos y otros más obscenos, abrazándome, besándome y dejando sentir sus hercúleas manos por todas las zonas de mi cuerpo. Yo, entregada a sus caricias reía feliz, los emulé besándolos, abrazándolos y tocándolos uno a uno y a los dos a la vez con un placer infinito mientras ellos, estimulados, se ensimismaban aún más en no dejar una zona de mi cuerpo sin tocar.

JORGE Y JUAN

Quinta parte

Capítulo XX

El toc, toc de mis tacones debieron ponerlos alerta porque, antes de que apareciera bajo el marco de la puerta del salón, los dos salieron a mi encuentro. Ni que decir tiene que los dejé paralizados, boquiabiertos. Los dos pares de bonitos ojos grandes quedaron fijos como alfileres y sus bocas exaltando exabruptos propios de la juventud

-¡JODEEER, QUÉ TÍA MÁS BUENA! ¡LA MADRE QUE LA PARIO, MIRA QUE TETAS MÁS BIEN PUESTAS!

Sus e...

La Sirvienta (3)

Continuan las aventuras de M......

Aquella noche fue la más larga que jamás ha pasado M.,  no pudo conciliar el sueño, estaba desnuda, en un lugar desconocido, a oscuras, encerrada y  tenia las manos esposadas….

¡¡Esposas!!!.... Ella misma se las había cerrado, y la cabeza aun le daba vueltas. Había podido elegir, habría podido salir corriendo y olvidar todo aquello. Pero mientras su cabeza intentaba decirle a gritos que huyera sus manos cerraron las esposas y justo en ese instante sintió un escalofrío que recorrió todo su cuerpo.  Se...

Inicio de bodas....otra (3)

Incursión en el servicio

Solo había una puerta de entrada a los servicos. sin pomo, sin tirador para abrirla. Así que siguiendo el ritmo de mi avance, la empujé con la cabeza hasta abrirla y deslizar mi cuerpo por la ranura entre la hoja de madera y el marco. Continuo adentrándome en el limpio aseo (no esperaba tanta limpieza) buscando un reservado libre, sin darme cuenta que casi ninguno de ellos tiene puerta. Están abiertos, sin posibilidad de intimidad. Y los que podrían tenerla están cerrados con llave. El resto, expuestos para...