Ella lo sabía pero no quería admitirlo (II)

Bea recuerda los principios de su pequeña debilidad, sumisión placentera

(Recuerdos)

Cuando esa misma noche Bea llegó a casa, sabía perfectamente que había vuelto a ocurrir, lo mismo de siempre,  había sido descubierta, su pequeño secreto se había vulnerado una vez más.

Se metió en la cama totalmente desnuda como siempre, pero en esta ocasión no se quedó dormida, sino  que comenzó a recibir miles de pensamientos en su cabeza. Pensamientos que siempre habían estado ahí, presentes en la niebla.

“has sido una niña muy mala, toma, toma, toma” – comenzó a darle azot...

Violada por un Duende

“Hasta hace poco pensaba que los duendes eran solo una historia inventada, hasta que una noche descubrí que eran muy reales, y lo peor, es que te pueden violar”

Violada por un Duende.

“Hasta hace poco pensaba que los duendes eran solo una historia inventada, hasta que una noche descubrí que eran muy reales, y lo peor, es que te pueden violar”.

Mi nombre es Laura, tengo 18 años y en estos momentos me dirijo hacia mi nueva casa. Mis padres trabajan en esas compañías que restauran casas viejas para luego venderlas a mejores precios. Una de esas casas viejas les gustó tanto a mis padres que decidieron comprarla. Lo malo no es que la casa sea muy viej...

La joven de la escalera

El hombre abrió la puerta y la vio, de puntillas sobre los minúsculos pies blancos, tratando de cubrirse con las manos el pubis y los pechos, en los ojos una expresión azorada. Hola. - dijo él recostándose en el marco. - ¿puedo ayudarte en algo? Devuélvame la ropa, por favor.

  • ¿sí?
  • Estoy en la puerta.
  • 4º C.

Subió por las escaleras hasta la cuarta planta, todo el edificio en sepulcral silencio. Encontró las cinco puertas cerradas y buscó la que correspondía al hombre, la letra C, desde la penumbra del pasillo lateral. Sabía que si cruzaba el pasillo probablemente él abriría la puerta y ya no tendría forma de escabullirse. Apagó el móvil antes de que él volviese a llamar y dejó que pasaran los minutos, agazapada en las escaleras, reprimiendo el aterrador impulso de llamar...

ESTHER (capitulo 6)

Despues del tremendo comienzo de su relación, nuestros protagonistas inician una relación estable. ¿Que pasara?

Esas treinta agotadoras horas, fueron el comienzo de una relación  estable y totalmente llena de morbo y deseo.

Recuerden que Monchito estaba en Chicago por varias semanas y eso nos permitía una libertad de movimientos total. Esther no quería volver con el y estaba dispuesta a abandonar su casa y venirse definitivamente a la mía. Pero la convencí de lo contrario, la hice ver que tenia que ser paciente, que cuando regresara, volviera con el como si nada hubiera pasado y que confiara en mi. Como  ejecut...

Violada por un iPhone

Para algunas personas su teléfono lo es todo, pero, hasta donde llegarías con el fin de protegerlo?

Violada por un iPhone

Eran como las 21:30 de un viernes, ese día había salido muy tarde del trabajo, todo gracias al hijo de puta que es mi jefe, quería que termináramos unos expedientes antes del fin de semana que muy tranquilamente podría haber hecho el lunes. No tenía coche, por lo que tenía que usar el transporte público. Lo bueno de mi caso es que trabajo a unas cuadras de una estación del metro, luego me quedo en mi estación de destino e igual camino unas cuadras hasta mi casa.

Ese d...

¿has sido buena?

Felices fiestas

Te levantas inquieta, aun es noche cerrada, tus pies descalzos toca el frio suelo, tu cuerpo envuelto en un camison abandona la calida y comoda cama que te protegia.

Te ocultas tras el sofá, la chimenea y el arbol de navidad con su cable de lucecitas, tiemblas nerviosa.

Una luz brilla en la chimenea, se ve bajar una bota, luego otra, un señor gordo vestido de con un abrigo rojo y barba blanca sale de la chimenea.

-hoh hoh hoh ¿Qué regalo le toca a esta chiquilla? – dijo el regordete barbud...

La preparación de una esclava

Ella va a ser iniciada en el mundo de la humillación. Tendrá que pasar su primera prueba con otra esclava mientras su amo le indica cómo hacerle disfrutar y cómo comportarse como una zorra

Llegamos a una casona antigua, con aire señorial, bastante elegante, todo está perfectamente arreglado, un bonito jardín adorna la majestuosa entrada. Saco una pequeña maleta del maletero del coche y nos dirigimos hacia allí.

-          ¿Me puedes decir dónde vamos?

-          Hoy te he preparado algo muy especial, después de buscar por internet y de chatear con gente que conoce el tema he conseguido encontrar este sitio donde se practica el BDSM. Hoy va a ser tu verdadero bautizo y por tanto de...

La dominación de Isabel. 26

Resumen de todo lo que tenía que pasar Isabel como prostituta de su amo.

A partir del día en que JM llevó a Isabel al piso del centro para que atendiera a todos los clientes que respondían al anuncio que había puesto en internet, casi todos los días iba allí. Generalmente JM estaba allí, pero no siempre. Isabel tenía llaves del piso y si su amo no podía ir y ya había concertada una cita con un cliente, iba ella sola, le atendía y se volvía a su casa.

JM controlaba todo, pues las citas las arreglaba mediante una página web de contactos. Recibía peticiones de clientes o simp...

Ven

Su boca es una cueva húmeda cargada de aire caliente. Su lengua es una alfombra resbaladiza que arde con un fuego que late y vibra entre humedades viscosas. Mi glande recorre el paladar hasta la entrada de la garganta… y más.

—Ven aquí.

La mujer camina hacía mí, envuelta en sedas y transparencias, moviéndose con sensualidad, demostrándome que sabe moverse. La detengo con un gesto de la mano.

—No. De rodillas, a cuatro patas. Quiero que vengas hacía mí a gatas.

Ella se arrodilla muy lentamente, dejando que la carne apretada en la lencería se tense, se hinche, que se muestre en cada pliegue y en cada músculo de carne lujuriosa. Las caderas se ensanchan al flexionar las piernas, piernas enfundadas en encajes negros. L...

ESTHER (capitulo 5)

En este capitulo cuento como terminaron las treinta horas.

La cogí de la mano, la lleve al dormitorio y sumisa se dejo conducir. La abrace sujetándola por la nuca y el trasero y comencé a recorrerla la boca con mi lengua mientras ella rodeaba mi cintura con sus brazos. Así, descalza y junto a mi, veía con claridad lo pequeñita que era. Seguí morreándola mientras notaba como comenzaba a rozar  su trasero con mi mano, un áspera de las pesas de gimnasio. Comprobé con las yemas de los  dedos como empezaba a humedecerse con mis besos. Cuando considere que estaba suficie...