Memorias de Zolst - 8 - Negociaciones cara a cara

Donde nuestro protagonista trata de encontrar un lugar seguro de entrenamiento para su nueva esclava y antiguos personajes no están tan felices de su presencia.

Esta mañana, me encontraba en el despacho central de administración del Descanso de Winford, la Casa de Placer de mayor prestigio de toda la región. Había pasado por allí hacía tres días y me había despedido sin ahorrar elogios tanto al recinto como a las aptitudes de las esclavas allí ubicadas. En estos momentos me encontraba sentado en mitad de la habitación, con una esclava primeriza que me habían confiado hacía apenas dos días arrodillada a mi lado en posición de espera tratando de disimular su nerviosi...

El primer orgasmo sumiso de rosita...

Rosita va a tener su primer orgasmo casi involuntario siendo sumisa...

Hola de nuevo...

Rosa..., mi Rosita..., empieza a mandarme sus experiencias..., en esta ocasión jugueteando con la sumisión..., una entre tres..., de sus pasiones sexuales...

Estoy eufórico...

En este tercer relato me cuenta y de paso a todos ustedes sus primeras experiencias de sumisión..., con un amo muy especial..., respetuoso pero a veces inflexible...

Casi no he tenido que tocar el relato que me ha mandado..., solo incluir párrafos relacionados con nosotros, nuestros correos, nu...

La sumisión de Rocío (X)

Capítulo final. Duro.

El confinamiento terminó aquí en España, y con él, poco a poco, se fue diluyendo mi dominio sobre Rocío. Después de terminar el estado de alarma ya no pude seguirla reteniendo en casa mediante ningún tipo de chantaje, y solo accedió a venir a diario a hacerme una mamada. Esa era su última oferta, y yo la tomaba o la dejaba. Me expuso la situación claramente, se había dado cuenta de que le haría más daño a su hijo siendo mi puta -y pronto la de él- y soportando aquellas vejaciones que parándome los pies, aún...

Marcada

A ella le encendía lo rudo. Y le pidió que fuese brusco, animal, que la marcase.

Quedaron en su hotel. Hace tiempo que se conocían, y ya habían tenido sexo con anterioridad. Pero esta vez era diferente.

A ella le encendía lo rudo. Le gustaba cuando él agarraba firme sus melenas y tiraba hacia atrás, para morderle los labios cuando ella abría la boca. Le gustaba cuando él le daba una nalgada fuerte, o cuando le mordía un pezón. Le gustaba cuando le susurraba zorra al oído, sintiéndose suya.

En esta ocasión, ella le había pedido directamente que fuese brusco, animal, que la ma...

Reasignación

La influencia del virus hace que el negocio tenga que "reacondicionarse"

Supongo que recordaréis a aquella mujer de la que os hablé en “Recogiendo beneficios”. Una que era adicta a las máquinas tragaperras y que se convirtió en una ninfómana viciosa. Luisa.

La incidencia del Covid 19 ha hecho que el negocio de la prostitución haya ido fatal, tanto para los proxenetas como para las putas. Hay un mercado negro muy oculto que todavía funciona, pero como sabréis o habéis podido ver, no se ven putas en las calles, y las pocas que pueden verse son de lo más arrastrado que hay, d...

Perrita

Su auténtico ser, aquello que, alejado de toda doble intención, la hace sentirse feliz, útil. Ser ella sin pensar en nada más. Ya era una perrita, aunque no tuviese amo. Necesita serlo porque necesitaba que alguien la entienda.Y ahora, es mía. Es mi propiedad.

No nos imagino enfrentados, aunque ahora estamos frente a frente, en pie ambos. Ella observa todo con esos ojos grandes y tímidos que tanto me atraen (también me inquietan). Está esforzándose por sonreír pero alguna parte descontrolada de su sistema nervioso ha secuestrado su sonrisa, transformándola en una especie de mueca. Frunciendo el ceño, baja la vista hasta el suelo. Yo también sonrío.

Sonrisas diferentes desde el escondite común, significado como deseo.

-De rodillas -ordeno.

*Se...

Puta y sumisa, sumisa y puta

La ordené que me esperaré cerca de su casa, en una zona sin casas a las afueras del pueblo, un desangelado lugar sembrado de pinos y contenedores de basura.

*La ordené que me esperaré cerca de su casa, en una zona sin casas a las afueras del pueblo, un desangelado lugar sembrado de pinos y contenedores de basura. No era el escenario ideal pero era el mejor que pude imaginar para el propósito de cuanto íbamos a hacer. Esa orden escondía otra: debía ir vestida lo más extremada posible, entendiendo "extremada" como" breve". Soy consciente de que este tópico de que una mujer es más deseable cuanto más desnuda esté, funciona en los relatos y en el imaginario masculi...

La Dra y el Señor

Este escrito, es la introducción de una serie de relatos que se llamaran La Dra y el Señor. Escribo a peticion de mi Señor y dominante y para poder expresar ante todos mis cambios en el pensamiento, desde una vida vainilla extrema hasta el mundo de la sumision placentera y aceptada.

Me llamo Mariana, tengo treinta y ocho años, soy sumisa -me gusta serlo- y descubrí que soy Brat. Tengo mi personalidad y criterio bien formados desde niña, aunque mi señor tuvo que desnudarme en cuerpo y alma para que yo pudiera entenderlo.

Hasta el año pasado mi vida era la vida normal de una mujer de 38, divorciada, con una hija que ya puede cuidarse sola, mucha energía y ganas de sentirme viva. Tengo un gran círculo de amigos y conocidos con los que salgo constantemente a divertirme, tomar algunos...

La perra del tren 2

El reencuentro

Mi vida sigue como si nada y en el tren no veo a la perrita que usé el otro día. Me extrañó porque casi cada día me la encontraba. Pero como conseguí su teléfono usé de él para poder contactar con mi futura perrita.

La llamo y me contesta al momento:

  • Lucía: ¿Si?

  • Yo: ¿Lucía?

  • Lucía: Si, soy yo, ¿quién es?

  • Yo: El cabrón del tren que te usó.

  • Lucía: Oh… Hola Señor… Me preguntaba si no le pareció bien mi actuación en el parquin y dudé en que me llamaría o...

Mi primer novio, parte V

- ¿Vas a dejar que me folle tu novio? - Claro que si, solo vas a ser un agujero. Yo para él soy su novia pero tu solo serás una perrita con unas tetas preciosas a la que hacer de todo. ¿Dejarás que te folle? - Si, lo que queráis.

El lunes fui a trabajar como cualquier día. Después de comer fui un rato al gimnasio y volví a casa, me habían recomendado una serie los compañeros de trabajo y quería verla tranquila. La verdad es que me gustó bastante y me vi 3 episodios casi del tirón. Serían casi las 9 cuando me llamo Cesar.

  • ¿Qué tal guapísima?

  • Hola guapo. Estoy aquí en el sofá viendo la TV.

  • ¿Descansando después del fin de semana?

  • Si, jajaja, casi acabas conmigo.

  • Me alegro que te gustara. Me encan...