La habitación 110
Entre placer y el dolor, la dominación y la sumisión.
“Y fueron esas piernas...en ese pasillo...las que me hicieron caer en la tentación.”
Todo empezó con un contorneo de piernas intencionado, insinuante y sensual entre los pasillos de un supermercado. Bajo las miradas deseosas de hombres que me hacían al pasar, distinguí una mirada que me estremeció. Una mirada que me era familiar, la había visto antes...
Me crucé con él, era él. Sólo esos ojos de azul celeste y penetrante podían causar en mi tal deseo. De pronto me vinieron a la cabeza esos recue...