Juegos por mi cumpleaños

Con mi 18 cumpleaños aprendo que puedo controlar la mente de la gente

Yo era un chico bastante normalito, de esos que pasan por el montón, pero si que estaba orgulloso de tener una polla bastante decente, larga y bastante gruesa, aunque tampoco nada fuera de lo común. Mi familia era otra familia mas de la capital bastante tipica, padre trabajador, madre ama de casa y hermana un par de años menor que yo. La historia empieza como el dia que cumplí los 18 años mi vida cambió bastante de golpe, y fue cuando me di cuenta de que podia controlar la mente de la gente con solo pensarl...

El Profesor de Biología

Una alumna universitaria en las manos de su profesor.

Esta historia ocurre en la ciudad de México, famosa por sus grandes universidades y las oportunidades que están ofrecen a quien sea capaz de tomarlas.

Una de esas personas es nuestra protagonista, su nombre es Anahí, una chica de 19 años, de muy buen aspecto físico, piel blanca y un largo cabello oscuro, un abdomen firme, pechos pequeños, piernas torneadas evidencia de que practico futbol durante muchos años, su máximo atractivo era su enorme trasero, el cual siempre resaltaba enfundado en ajustados j...

Hechiceras: el reto de las zapatillas rojas 3.

Nuevos intentos de doblegar a la hechicera ponen en evidencia su gran habilidad, pero quizás finalmente X descubra una manera de derrotarla.

HECHICERAS: EL RETO DE LAS ZAPATILLAS ROJAS.

Un consejo: es conveniente, aunque no forzoso leer Cazatesoros: Sydney y las zapatillas rojas , Expedientes X: el regreso de las zapatillas rojas, Alias: La invasión de las zapatillas rojas, Crónicas de las zapatillas rojas: la camarera, Ivanka Trump: El imperio de las zapatillas rojas y Crónicas de las zapatillas rojas: World Wide Web, antes de leer esta historia.

Estoy consciente de que he tardado demasiado en escribir esta continuació...

La hipnotizadora tetona (2)

Luego de unos minutos, Mistress Helga se quitó el collar del cuello y empezó a oscilarlo frente a unos centímetros del rostro de Jorge. La inducción con un péndulo era un clásico de la hipnosis. Marlene estaba al borde del orgasmo.

La hipnotizadora tetona (2)

Marlene siempre había tenido una extraña fantasía, que una mujer hipnotice a Jorge, su esposo, para convertirlo en un juguete sexual que cumpliera todas sus fantasías. Jorge siempre había sido reacio a someterse a ese tipo de prácticas, además que no era sencillo contratar a una hipnotizadora, ya que lo que más abundaban eran los varones dedicados a esos menesteres. Marlene no quería someterse a esa experiencia sino ver a su marido en trance. Se lo había comentado a Jorge y...

La hipnotizadora tetona (1)

Control mental. Hipnosis. Tetas. Hipnotizadora tetona.

La hipnotizadora tetona (1)

Genaro abrió los ojos y tardó unos minutos en darse cuenta de dónde estaba. La noche anterior había acudido a un pub donde solía asistir con regularidad, presentaban espectáculos para adultos, en esa oportunidad el show consistía en una hipnotizadora, Mistress Helga. Él había subido al escenario como uno de los voluntarios y no recordaba mucho más.

Recordaba algunas partes. Estar sentado en una silla. La voz sensual de la mujer. Después de eso, no tenía las cosas clar...

Una historia de hipnotismo pero a mi estilo

Siestas aburridas, mujer desganada, mucha imaginacion... lo he puesto en control mental, pero tbn podría estar en infidelidad. no consentido,

Esta narración toca un palo que siempre me ha atraido como recurso novelistico, aunque sospecho que poco realistico: la hipnosis y la Cueva de Ali Baba que abre.

sin más aperturas paso al relato.

Antonio se removió inquieto en su silla.

Cada vez estaba más frustrado con el libro que tenía entre sus manos. Una mierda de la que no sacaba nada en claro.

Cuando empezó a leerlo hace varias semanas, todo le había parecido más sencillo. Pero no, no iba a ser tan fácil.

Anton...

En el apartamento do la playa V

Felicia termina de comprender el control que tiene sobre su hermano y como su familia, no duda en esclavizarle, humillarle y torturarle. Pero el momento mas vergonzoso del sumiso es cuando acude a la gala de la urbanización.

Felicia tardó en comprender la inmensa superioridad de la que gozaba sobre su hermano; pero cuando empezó a asimilarlo no dudó en golpearle por toda la parte delantera del cuerpo.

Él trataba de subir; sufría muchi, muchísimo, pero no podía rebelarse; eso ya era impensable. Finalmente, él logró subir la mitad de su cuerpo, pero a duras penas y Felicia ni siquiera dejaba de agredirle, pues estaba plenamente convencida de que el sumiso era totalmente capaz de defenderse. En ese momento ya no se acordaba...

El Collar I

Belén está contenta con su vida, salvo por un pequeño detalle: tiene que aguantar como compañero de piso al insoportable hermano de su amiga. Ahora está dispuesta a solucionarlo, aunque la cosa no saldrá como esperaba

Belén llegó a casa después de salir de trabajar y, al igual que los últimos días, se la encontró hecha una pocilga. (Puto Miguel, por más que se lo digo no me hace ni puto caso...) Entró en el salón y vio un montón de ropa sucia en un lado del sofá, una caja de pizza a medio acabar en la mesa, varias latas de cerveza... - ¡Miguel! - Gritó, llamándole - ¡Miguel! ¿Qué es este puto desorden? No hubo respuesta. (¡Encima no está en casa!) No era la primera vez que Belén se encontraba con una situación así...

Hechiceras: el reto de las zapatillas rojas 2.

En sus intentos por dominar a Phoebe, X descubre lo peligroso que puede ser lidiar con una hechicera y el reto que será subyugarla.

ENCANTADAS: EL RETO DE LAS ZAPATILLAS ROJAS 2.

Un consejo: es conveniente, aunque no forzoso leer Cazatesoros: Sydney y las zapatillas rojas , Expedientes X: el regreso de las zapatillas rojas, Alias: La invasión de las zapatillas rojas, Crónicas de las zapatillas rojas: la camarera,  Ivanka Trump: El imperio de las zapatillas rojas y Crónicas de las zapatillas rojas: World Wide Web, antes de leer esta historia.

Estoy consciente de que he tardado demasiado en escribir esta continua...

En el apartamento do la playa IV

El sumiso amplía sus horizontes, pues le hacen trabajar en el apartamento de una amiga. Finalmente, llega su malvada, cruel, prepotente y despiadada hermana, quien le hará sufrir mucho mas que cualquiera hasta el momento.

Alguien acababa de llamar; el joven estaba intrigado, aterrado, no sabía quien podría ser, o qué querrían de él. Abrió de inmediato y entró una hermosa joven, con mucha seguridad; desde el peincipio le estuvo dando empujones; Abel se vió obligado a retroceder; no solo estaba humillado por recibirla travestido, sino que también estaba lleno de impotencia, porque no fue capaz de defenderse ni de huir.

  • Muy bien, ¿donde tienes la vajilla?

  • En la cocina, pero en el aparador del salón tengo de mjor...