Dama - Acto I Escena II

Ella era una dama, ellos solo deseaban follárselas

Adela intentó componer la figura. Se recolocó la falda que en ese momento estaba a la altura de la cintura e intentó sentarse lo más dignamente posible. El tal Manuel la conminó:

— No señora, por nosotros no se preocupe, siga usted dale que te pego con el chaval. Si Eladio y yo solo queremos darnos una ración de vista. Eso no hace daño a nadie. Hace tiempo que no veíamos un chumino como el suyo, allí en la trena se ven pocos como este, ¿sabe usted?

A Raúl y Adela se les veía tensos en sus asient...

De criadas y señoras. En casa del marqués.

Clotilde pensó que servir de criada consistía en otra cosa.

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Clotilde quedó viuda a los cuarenta años. Un conductor borracho se cruzó en el camino de su adorado Anastasio en la nacional 423 y se lo llevó por delante y de su lado.

Hasta entonces habían sobrevivido holgadamente con su paga de funcionario de prisiones pero ahora se quedó sin ingresos y Clotilde tuvo que buscar trabajo. Nunca había trabajado y como solo sabía ser ama de casa pensó que lo más fácil sería ofrecerse como asistenta por horas.

Por suerte, también la dejó sin hijos, peo...

Dama - Acto II Escena II

Final de la historia de quién empezó siendo una dama

Acto II Escena II

La blusa media abierta y la falda ceñida de la dama que entró en el local, llamó de inmediato la atención de los cuatro hombres que la esperaban desde hacía media hora. Algo en ella había cambiado y no solo era el vestuario, un magnetismo erótico parecía desprenderse de su delicioso cuerpo.

Jacinto, Raúl, Manuel y Eladio se relamieron de gusto, bien sabían ellos lo que suponía la llegada de aquella hembra. Jacinto estaba tan seguro de que iba a aparecer que incluso ya había...

Dama - Acto II Escena I

Una dama en acción

Fueron dos horas de extraordinario placer. Al principio fue Adela quién guió a la niña sobre los puntos que debía tocar, las posiciones que debía tomar pero al final de la sesión era la niña la que sugería nuevas posiciones y experiencias. Paquita alcanzó en brazos de su señora los primeros orgasmos de su vida y esa es una experiencia que no se olvida en toda la vida. A las dos horas de caer rendidas en la cama, era su más fiel y devota esclava. Podía hacer con ella lo que le viniera en gana.

Se despi...

Dama - Acto I Escena III

Consecuencias de estar con una dama

Aquella noche Raúl durmió satisfecho y poco antes de cerrar los ojos decidió que lo primero que haría por la mañana sería llamar a su novia para decirle que o se abría de patas de una puta vez o que lo suyo se había acabado porque él lo que necesitaba era una mujer como la del bar que había conocido y no una novia que lo único que le abría era la boca para darle sermones.

Los presidiarios por su parte volvieron a la pensión tan satisfechos en lo sexual que esa noche Manuel no necesitó hacerse una paja...

Dama - Acto I Escena IV

La dama y la criada

Adela durmió placidamente después de muchos años de hacerlo inquieta. Por primera vez le importaba poco donde estuviera su marido. Hacía tiempo que dormían en habitaciones separadas y no iba a ser ese día precisamente cuando reclamara su presencia. Pensó en darse una ducha para quitarse los inquietantes olores que le acompañaban pero quería dormir  precisamente acompañada de esos olores a guarra que tanto le recordaba los placeres de los que había disfrutado. Cuando cerró los ojos una plácida sonrisa le cub...

Dama - Acto I Escena I

Ella era una dama, él un golfo

Seguro que hay una expresión más fina, pero la frase que mejor definía la situación de Raúl  es que estaba hasta los cojones: su trabajo era una mierda, el sueldo una miseria, y su novia... era la peor elección que podía haber hecho, Cinta lo único que le daba eran problemas y más problemas y de sexo poco, un sobe aquí, mucho morreo y un toquecito a las tetas, poco más. Ni le había tocado jamás el conejo ni le había dejado que le enseñara su maravillosa polla y así evidentemente el único sexo que se podía p...

Casada con un cornudo

El cornudo satisfecho

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Mi marido es un puto cornudo pero lo que le diferencia del resto de los cornudos es que a él le encanta ser espectador de mis infidelidades. Se empalma solo de pensar que otro tío me va a follar para obtener un placer que él es incapaz de darme. No entiendo muy bien porque obtiene placer de ver como alcanzo los orgasmos con otros, de hecho no intenta ni meterme mano, sabe que yo no se lo permitiría: cuando estoy con otro tío él debe consolarse a base de pajas, nada más.

El plan es muy senc...

Susan la holandesa (y 3)

Una esposa infiel, un cornudo dispuesto a matar con asta de toro.

Vuelta a la cruda realidad

Susan terminó de contar su historia justo cuando llegábamos a la discoteca. Yo la miraba alucinado, todo me parecía increíble.

Como ya me había vaticinado, Alex solo tenía ojos para mi mujer. Eva, halagada por tanta atención, coqueteaba con el cabrón aquel de forma tal que, conociéndola como la conozco, sabía que las bragas las tenía empapadas y deseando que aquel cerdo pasara a mayores. Él la tocaba inocentemente un muslo, un brazo, la mano, una carantoña en la me...

Susan la holandesa (2)

La fidelidad no es su mejor virtud

La historia de Susan

La holandesa no era precisamente una virtuosa pero supongo que el destino la obligó a ello. Ella no llevaba la cuenta de los cuernos que le había puesto al pobre Alex (¿pobre?, que le den por culo al pobre, se lo tenía merecido por moro). Susan era mujer de un solo marido porque había tenido la mala pata de caer entre las garras de un celoso pero hacía todo lo que estaba en su mano para no ser mujer de un solo amante. 'En la discoteca,' me propone para demostrarme cuanto dice...