¿Quién serás?
La suavidad con que has situado los dedos sobre mis ojos, el olor de los mismos me ha indicado que aquello no era algo violento.
¿Quién serás?
La suavidad con que has situado los dedos, el olor de los mismos me ha indicado que aquello no era algo violento, si no una remembranza del juego infantil en el que tratabas de adivinar quien te tapaba los ojos.
Nada, he logrado escaparme un poco antes del trabajo, ventajas de la experiencia y la veteranía, hoy estaba harto, ya hago horas extras, nunca pagadas, otras veces. Les he dicho que hoy me iba antes porque me daba la gana.
Tengo la suerte de vivir cerca de la ofi...