Mientras la nieve caía I

¿Tu eres virgen,verdad? Si.. - le dije poniéndome como un tomate. ¿Y con tu novia?. ¿No te la pela? Sólo deja que me restregue a través de la ropa. Osea que no te la ha cascado nadie nunca. - dijo con voz de asombro Nunca- le dije tímidamente. Quedó pensativo mientras me observaba de arriba a abajo. Me estaba poniendo nervioso. Tras unos momentos callado me dijo: ¿Y te gustaría?

El autobús subía renqueante por la escarpada carretera de montaña. El plomizo cielo incrementaba la oscuridad de aquella tarde de invierno. Flanqueada de los desnudos árboles, la carretera permitía ver aqui y alla el lejano fondo del valle,donde entre el serpenteante río surgía la torre de la bocamina.

En el interior del vehículo solo quedaban los dos últimos pasajeros de costumbre. Era una línea que transportaba a los trabajadores de la mina desde sus casas en las montañas al tajo para luego devolv...

La proporción II

Luego, tomando sus dos manos, le miró a los ojos y preguntó. ¿Eres virgen? Si. - le respondió tímidamente mientras se sonrojaba. ¿No has estado con ningún hombre? - continuo Héctor Bueno con algunos amigos me he besado y nos hemos tocado. Pero nada más. - le dijo haciendo pucheros.

Continuacón de La proporción I

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Hacía ya más de tres meses que se conocían pero para Héctor se había convertido en la persona más importante de su vida. Desde el primer momento se compenetraron a la perfección. Nunca había estado tan colado por nadie. Es más, en su fuero interno sabía  que era la primera vez que estaba verdaderamente enamorado. De todas  las mujeres que habían pasado por su vida, que eran muchas, con ninguna alcanzó el grado de compenet...

La proporcion I

Restregaba una pierna contra la otra mientras yo seguía frotandole sintiendo como sus bragas se humedecían. Estaba caliente como una perra. Su movimiento cimbreante aumento el ritmo hasta que senti como alcanzaba el paroxismo del orgasmo.

De mi labor de profesor en la Universidad lo que más me gustaba era el contacto con los jóvenes alumnos que se incorporaban en los primeros cursos. Me encantaba charlar en los pasillos al finalizar la clase con los que se acercaban a preguntarme alguna duda.

Especialmente las tímidas muchachitas de mirada cándida que desprendían aquel aroma a colonia fresca. Con estas era especialmente  amable y aprovechaba la ocasión para desplegar mis armas de seducción coqueteando con ellas y llevándome a la cama...

Tarde de estío

Allí nos pasábamos la tarde viendo la única revista de pornografia que el habia traido ese verano de Francia, donde había estado de vacaciones en casa de unos parientes. Nunca habíamos visto a nadie haciendo el amor y tanto coño y tanta polla nos ponía como motos ,cascandonosla continuamente.

No recuerdo desde que edad habíamos sido amigos. Nos conocimos en los primeros años de instituto y enseguida congeniamos. Éramos totalmente distintos. No era un muchacho  excesivamente guapo, muy moreno y velludo desde muy chico, de nariz achatada y unas gruesas gafas de miope que le achicaban los ojos y que al quitarlas dejaban ver  unos ojos achinados como de oriental. Uno de sus dientes delanteros estaba partido formando un pico que le daba un aire pícaro cuando se reía.

Yo por lo contrario se po...

El divorciado

Aquella tarde acababa de finalizar mi largo proceso de divorcio. Fue un verdadero vía crucis de juzgados y abogados, pero al fin todo se había acabado.

Aquella tarde acababa de finalizar mi largo proceso de divorcio. Fue un verdadero vía crucis de juzgados y abogados, pero al fin todo se había acabado. Nunca me imagine que mi matrimonio pudiera romperse y menos de aquella manera. Estaba agotado y deprimido sentado en el sofá de mi solitario domicilio mirando la televisión pero con el pensamiento en otro lugar. Todavía estaba con la gabardina y los zapatos puestos desde que había llegado de la calle. Afuera seguía lloviendo.

El estridente sonido del...