La venganza de Tsunade

Tsunade se cansa de la desvergüenza de Jiraiya y decide darle una lección muy cruel

La venganza de Tsunade

Qué guapa era Tsunade y qué tonto, Jiraiya. ¿Cómo podía pensar que saldría impune de una fechoría como aquella? Los numerosos golpes que ya le había dado su compañera en la cabeza debían de haber dejado huella en él y le habían convertido en un caso perdido. Parece que, cuando nació, ya era deficiente su capacidad para saber que espiar a las chicas mientras se bañan no está bien. Pero, definitivamente, con el paso de los años, el resto de sus capacidades intelectuales habían des...

Relato en catalán: El jove de la platja

La història que em va passar amb un jove alemany un dia que passejava per la platja.

El jove de la platja.

Ja han passat nou mesos des del dia que el vaig conèixer. El seu nom era Ulrich i era un jove alemany de dinou anys que havia vingut a Mallorca per estiuejar amb els seus amics. És el que fan molts alemanys a les illes convençuts de que les drogues, l’alcohol i el sexe son fàcils de trobar. I Ulrich, que no era molt diferent dels seus, havia vingut a l’illa  per fer tot allò que no s’atreviria a fer al seu propi país.

Pel meu costat, jo no vaig venir a l’illa cercant res, s...

El cura y yo (8)

Sin pretenderlo, Sebastán me brinda la oportunidad de vengarme de él en mitad de una capilla llena de monjes.

El cura y yo VIII

No dudé en vengarme de Sebastián y no tardé en encontrar la forma de hacerlo. El muy cabrón se había meado dentro de mis tripas e iba a pagar por ello. Todo el odio que podía sentir se acumulaba sobre él y pensaba dejárselo caer encima de la peor manera posible. Maquiné durante el resto del día y la noche qué hacerle al madito monje sin que se me ocurriera nada. No quería pedirle ayuda a Julián porque quería hacerlo yo solo. Si él había sido capaz de humillarme sin recurrir a nadie,...

Doctora Cortina

La doctora que iba a operarme de fimosis me dio una sorpresa de lo más agradable.

Doctora Cortina.

No sé si lamentarme o estar contento de haberme tenido que operar de fimosis. Cada vez que me muevo o cada vez que noto que mi corazón bombea sangre a mi pene, sudores fríos recorren mi cara y maldigo a toda mi familia. Aunque no sé si ésta es la parte más desagradable. Creo que lo fue mucho más descubrir que mi prepucio no funcionaba del todo bien el día que conseguí ligar por primera vez y el día que conseguí que fuera con la chica más guapa de la facultad. No creo que nunca l...

El cura y yo (7)

Mientras meo en el baño del seminario, aparece el amigo pelirrojo del cura de mi pueblo y el muy cabrón se mea dentro de mí.

El cura y yo VII

Al día siguiente, tuve el placer de conocer al antiguo amigo de Julián, el que se meaba encima de noche cuando era pequeño y se aprovechaba de ello para meterse en la misma cama que mi cura. Fue durante el almuerzo, se sentó enfrente nuestra y la verdad es que hubo algo, no sabría decir el qué, que me pareció extraño. Llegó a la mesa, saludó amablemente y se puso a hablar con Julián, al que sonreía bastante. Sin embargo, tuve la sensación de que a mí me miraba raro, como si no l...

El tesoro escondido de mamá

Limpiando un armario de mi madre, me encuentro su tesoro secreto y a ella no se le ocurre otra cosa que proponerme usarlo.

El tesoro escondido de mamá

Mi madre es lesbiana. Dice que siempre lo ha sido y que nunca tuvo ningún interés en ningún chico, ni siquiera en la adolescencia cuando tenía las hormonas en plena ebullición. Es una persona encantadora; es buena, atenta y justa, pero, a pesar de ello, mis supuestos abuelos no tuvieron ningún problema en despreciarla cuando les dijo que le gustan las chicas. Ese pequeño detalle la hizo caer en desgracia delante de toda su familia ya que se lo contaron a todo el mundo...

Humillada con un cerdo

Cansado de que una empleada no pare de intentar seducirme, decido humillarla obligándola a hacer cosas repugnantes con un cerdo.

Humillada con un cerdo

Hace unos años, una de mis empleadas intentó seducirme. Soy el dueño de una gran empresa de cría de cerdos y debió pensar que esa era una buena manera de tener al jefe contento y de conseguir algún que otro ascenso. Tenía razón al pensar eso porque al final lo logró. Eso sí, tuvo que pagar de una manera que ni por asomo se le habría ocurrido

Desde que llegó, no paró de usar conmigo palabras más amables de lo normal, de lanzarme miraditas y de agacharse en los momentos...

Desvirgamos a nuestra prima

En el cementerio del pueblo, mi primo y yo desvirgamos a nuestra prima lesbiana

Desvirgamos a nuestra prima.

No me puedo creer que al final lo hiciéramos. ¡Fue una locura! Si alguien me hubiese dicho mucho antes que iba a pasar, no me lo hubiera creído y, mucho menos, si me llega a decir que iba a ser con mi prima Sandra, que está loca y es lesbiana. ¿Cómo pudo pasar algo así? Es algo que escapa a mí, no lo logro comprender.

Todo el mundo en el pueblo sabe que Sandra está loca, lo saben porque prácticamente casi todos la han visto hacer alguna tontería como enseñar la...

El cura y yo (6)

Cuando llega la noche, su padre y yo sodomizamos al cura de mi pueblo

El cura y yo VI

Después de que el respetable sacerdote me sodomizara y se bebiera mis fluidos mas íntimos como si del cuerpo de Cristo se tratara, Julián quiso enseñarme el seminario en el se había criado. Su padre no nos acompañó. Prefirió dejarnos solos alegando que tenía que resolver unos cuantos asuntos antes de poder dedicarse por completo a nosotros. Así que, después de que él se fuera a hacer sus cosas, salimos del despacho y nos fuimos a conocer el lugar.

El seminario era bastante...

Follando con papá y mamá 2

Una nueva aventura de sexo incestuoso con mis padres.

Follando con papá y mamá II

-¿Qué haces desnudo?

Esas fueron las palabras con las que mi madre me despertó a la mañana siguiente. La noche anterior, estando completamente borrachos, mis padres habían tenido la genial idea de invitarme a participar en sus juegos sexuales y, tras una larga velada de desenfreno sexual, llegaba la hora de recordar lo que se había hecho. No supe qué contestar a mi madre. ¡Yo no había buscado aquello! ¡Ni siquiera les había pedido participar! Fue todo decisión d...