Un día en la piscina

Mientras los niños van a la piscina, Beto y Dulce tienen la casa para ellos solitos, y Oli e Irina tienen la misma idea.

-…Y ponle el protector solar en cuantito salga del agua, y no dejes que esté mucho rato al sol, sentaos en la sombra, y no se te ocurra dejar de vigilarla, ni dejes que se acerque a la piscina de los mayores, ni que se quite la gorrita, y cuida que beba mucha agua, y si os compráis un helado, el suyo que sea de crema, no de hielo, y cuida que se tome el yogur, y que no esté demasiado rato en el agua, mójale la cabeza, y no la vayas a perder de vista, y….

-¡Mamá, que vamos a una piscina cerrada, no a l...

Mi propia confesión

Soy Dita Delapluma, y quiero soltar una carga espantosa.

Los que me seguís, sabréis que mis relatos, últimamente, se han espaciado. Llevo algún tiempo sin escribir. En parte, ha sido pereza. En parte, han sido fantasmas.

¿Alguno de vosotros ha vivido con miedo alguna vez, alguna época? Yo sí. Y quisiera contároslo, si queréis escucharme. Ya estuve callada mucho tiempo, demasiado. A veces, hablar de algo horrible, hace que el recuerdo sea más horrible aún, porque se vuelve más real… pero otras veces, pasa al contrario, cuando más lo cuentas, más irreal se vu...

Padre, marido y amante, ¿no tienes bastante?

Dan y Sabella llevan una relación a espaldas del marido de ésta. La cosa se complica cuando se presenta no sólo el marido de Sabella, sino también el padre de ella.

-Todos le conocéis de nombre. No sólo es una persona con un cargo de importancia, sino un hombre muy valeroso, de gran inteligencia y una auténtica personalidad para el ejército y un ejemplo para todos… Rieguer, si lo que digo no te interesa, a lo mejor prefieres dar veinticinco vueltas al campo.

-¡No, señor! – se cuadró el joven, y miró al frente de inmediato. El capitán Stillson no pudo dejar de darse cuenta que, últimamente, el más travieso y descarado de sus reclutas, no le miraba nunca a la cara....

Más especial Navidad

La función da comienzo, pero lo más interesante, sucederá detrás del escenario.

Apenas eran las ocho y cuarto cuando el sr. Diego Cabrales, el Director del colegio elemental, llegó a su despacho, como tenía por costumbre. Siempre era el primero en llegar, cuando los únicos que pululaban por allí, con caras de sueño y frío, eran el sr. Vina… el sr. Valmayor, el bedel, y su señora, que como vivían en la casita, dentro del mismo colegio, eran quienes abrían, a las ocho en punto, y algunos cocineros… la mayoría empezaban a llegar a eso de las ocho y media. Pero hoy, se había encontrado a u...

Especial Navidad.

La señorita Charito prepara con sus niños una función especial navideña, pero no tiene mucho ánimo para fiestas al pensar que está atrapada entre dos hombres... y mientras, Beto y Dulce intentan convencer a su hijo de que participe en el espíritu navideño, Oli e Irina ven cómo su casa se reduce...

-Venga, si es muy fácil, ¡levantad los bracitos y sonreíd! “¡Bri-llas… en el cielo… y nos guías… hacia ti!” Y ahora, extendéis todos los brazos y hacéis un círculo muuuuuuuy grande con las manos: “¡Tú eres la Estrella! ¡Ilumiiiiiinanooooos….! ¡Tú eres la Estrella! ¡Guíanos hacia Beléeeen…!”, y ahora otra vez la señaláis todos y sonreís mucho, mucho: “¡Bri-llas… en el cielo… y nos guías… hacia ti!” – La señorita Charito, la profesora de preescolar, sudaba la gota gorda intentando que sus pequeños prestasen a...

Desnuda para tí

Zorra con suerte consigue que el Perro le cuente que Pastor, ha roto su promesa... pero la confesión, la hará Traviesa, cuando le cuente a Pastor su historia particular.

Rob el Perro se jactaba de ser fiel, de saber guardar secretos… esto último no era muy difícil, dado lo poquísimo que hablaba, pero aún así, uno podía estar seguro de poder contarle cualquier cosa, que él no la iría contando por ahí.

-No te apures, Perro… no ha sido fácil sacártelo, has resistido como un tigre… cualquiera estaría orgulloso – le consoló Sofía, peinándose… aunque, con el montón de lana desordenada que tenía como cabello, eso de “peinarlo”, era un término bastante elástico. Sofía, a quie...

La gata bajo la mesa de madera.

Artie sabe que Ana está enfadada por su mentira, pero irá a verla para intentar arreglar las cosas. Ella en principio no querrá escucharle, pero el deseo de ambos es tan fuerte...

Cuando Zató cerró la puerta,  Arturo sentía náuseas de los mismos nervios. Él había sabido que tenía que decirle la verdad a Ana, que no era viudo, sino casado, y lo iba a hacer, Ana tenía que saberlo… pero no de éste modo. Su mil veces maldito ex marido, el Decano, acababa de salir de la casa, diciéndole a Arturo que “le pusiera a los pies de su esposa…”. Ana no se había dado cuenta que había dejado caer el vaso de agua en el que bebía. Arturo volvió la vista para mirarla. Hubiera preferido mil veces ver e...

Travesuras en el coche.

Arturo no se da cuenta que Ana, su amante, le sigue, pero le abordará en el ascensor y pasarán un rato delicioso en el coche de él.

-Como verá, señor Decano, la subida que pedimos no es excesiva. Como personal de Archivos y Bibliotecas, los nuevos presupuestos que se aprobaron a principio de curso, eran quizá demasiado ajustados… se han cambiado los planes de estudio, y tenemos pocos libros de consulta al respecto de los nuevos planes, y algunas ediciones antiguas se encuentran en estado poco menos que deplorable, es imprescindible sustituirlas… incluso estamos pensando en la posibilidad de ir pasando a formato electrónico algunas de la...

Amar es todo un arte.

Arturo se había decidido a usar un servicio de citas, y se va a encontrar con una mujer que considera la prostitución, un arte... lástima que no todo sea tan perfecto como a simple vista parece.

-Con exactitud… ¿Qué es lo que usted está buscando, señor Lizarra?

-Con exactitud… supongo que… un poco de cariño. Un poco de comprensión. Sentirme escuchado… - el hombre, sentado frente a la “gestora en relaciones privadas” de la agencia, algo encorvado en la silla, con las manos entrelazadas y ocultas entre las rodillas, intentó resumir su deseo – Quiero volver a sentir que le importo un poco a alguien.

La gestora sonrió con amabilidad.

-Por favor, no se sienta violento. Lo que está haci...

Entramos en calor avivando la llama

Oli está loco con su pequeña hijita, pero su excesiva atención por ella, hace que Irina se sienta desplazada.

Muchos cambios. Y muy poco tiempo para asumirlos. Supongo que a eso, se reducía todo… pero no dejaba de preocuparme. Irina y yo llevamos casados ya un tiempo, tenemos tres niños que han venido escopetados, primero los gemelos, y apenas diez meses después, Tercero, la niña de la casa, la princesita de papá… Olivia, porque yo me llamo Oliver. Conste que el nombre, no fue idea mía, se empeñó mi mujer. Y desde el nacimiento de ella, yo sentía a Irina… distante conmigo.

Al principio, no le di importancia....