La profesora segunda parte

Se levantó a duras penas, se secó y se puso una camiseta ligera con un pantaloncito de deporte. Sus pezones se notaban sobre la camiseta y el roce la estaba volviendo a calentar.

Segunda parte.

Elena estaba muy contenta y plenamente satisfecha, la hubiese hecho falta una buena polla llenándola el coño, pero el chaval se lo había comido de vicio. Aprendía muy rápido y bien.

Elena llegó a su casa y se metió en la ducha. El contacto del agua caliente erizo su piel y un pequeño escalofrío recorrió todo su cuerpo. Cogió la cabeza de la ducha y paso el agua por todo su cuerpo. Recogió una buena porción de gel en su mano y se embadurno todo el cuerpo con él, en especia...

La profesora

Ese chico la tenía todo el día con las bragas mojadas. Por fin llegó el jueves

Se había levantado algo nerviosa, siempre enfrentarte a lo desconocido , te provoca ese hormigueo en el estómago.

Elena era una mujer joven de unos cuarenta y pocos años y estaba muy bien, con un cuerpo excepcional y una gran proyección en la vida laboral. Ella es directora del nuevo colegio en el centro de la ciudad. La profesora de segundo de bachillerato había caído de baja y ella tendría que sustituirla prácticamente todo el curso. Estos chicos ya eran mayorcitos y siempre había algún repetidor qu...

Elena en la oficina (corregido)

Cuando el último compañero hubo salido, fue a la puerta y echo el cierre.

Helena se había levantado radiante y mirándose al espejo, se cogió una teta y se chupo el pezón.

  • Que buen estás cabrona!!!

Se puso su conjunto de raso casi trasparente y encima una blusa negra y una falda también negra, como tres dedos por encima de la rodilla.

Unas medias negras y unos zapatos de tacón negros de 15cm. Se miró al espejo y se lanzó un beso. Para sus cuarenta y pocos años estaba muy bien. Aun

hacía

que los hombres se volviesen a su paso.

Pa...

Madura lujuriosa, te lo continúo.

-te voy a follar.

Me ha encantado esta equivocación, te digo mientras mis manos rodean tu cuerpo, tus senos y tus caderas. mis labios se

recogen

en tu cuello y lentamente pasan al

lóbulo

de tu oreja.

-Elena te voy a follar muy lento y muy

rápido

. ¿

cómo

quieres primero?

-muy lento

voy bajando con mi boca por tu cuerpo, me paro en tus tetas y me recreo con tus pezones

hummm

están muy duros y los lamo y los chupo. Me recreo sorbiéndolos cual infante ham...

Elena en la oficina

Subió a su oficina y se sentó delante del ordenar. Tenía mucho trabajo que hacer y poco tiempo para hacerlo.

Helena se había levantado radiante y mirándose al espejo, se cogió una teta y se chupo el pezón.

  • Que buen estás cabrona!!!

Se puso su conjunto de raso casi trasparente y encima una blusa negra y una falda también negra, como tres dedos por encima de la rodilla.

Unas medias negras y unos zapatos de tacón negros de 15cm. Se miró al espejo y se lanzó un beso. Para sus cuarenta y pocos años estaba muy bien. Aun hacia que los hombres se volviesen a su paso.

Paro a desayunar en el mismo...

La discusión

Aquella noche Elena había discutido con su marido y dando un portazo salió corriendo del apartamento. En ese momento sólo llevaba un vestidito de andar por casa y la tanga, pues en casa no llevaba sujetador y con las prisas olvido ponerse algo.

Elena es una mujer de cuarenta y pocos años. Que tiene un muy buen par de tetas y un cuerpo bien torneado y con carne.

Aquella noche Elena había discutido con su marido y dando un portazo salió corriendo del apartamento. En ese momento sólo llevaba un vestidito de andar por casa y la tanga, pues en casa no llevaba sujetador y con las prisas olvido ponerse algo.

Salió airada sin mirar atrás.

-Joder, siempre lo mismo que si has hecho, has dejado de hacer. ¿Y tú, tú, qué cojones h...

El encuentro

Hummmmm siiiiii hummmmmm siiiiiiii Rodaron sobre sus cuerpo

El había alquilado un apartamento cerca de su casa.

Ella estaba nerviosa a sus años se había enrollado por internet con un tío aún mayor que ella, no sabía nada de él más que lo que habían hablado por el twiter. Alguna vez se habían visto por videoconferencia pero ahí terminaba todo su conocimiento.

Ella estaba nerviosa, la acababa de llamar u la había dicho que se encontraba en su localidad y que quería verla. Un nerviosismo, mezcla de temor y excitación se apoderó de ella. Mientras caminaba ha...

Patricia2

-Quiero que me recorras con tus manos, que no dejes ni un cm de mi cuerpo sin acariciar.

Después de descansar un rato fueron despertando lentamente, la sesión de sexo los había dejado exhaustos y tenían que reposar para recuperar fuerzas.

-

Quieres un café???

-

¿¿¿Bueno, si me lo traes???

-

Eso está

hecho.

Patricia se recostó en la cama esperando su café. Precisamente se había olvidado de su cuerpo, del cual no estaba muy contenta. Ella pensaba que sus lorzas no eran del agrado de la gente, aunque nunca nadie le había dicho tal cosa. Rec...

Patricia

-Ahora vas a sentir todo aquello que te he ido contando.

Patricia es una mujer rellenita, con una preciosa cara y unas tetas de infarto.

Ella no está muy contenta con sus carnes, pero la verdad es que las tiene bien puestas.

Hoy le había mandado a Pablo unas fotos de cuerpo entero con un sujetador de BDSM de cuero que solo recogía sus tetas. Tenis una cara de vicio muy importante y decía debajo de las fotos.

¿Te atreves? Así te recibiré.

No había tenido contestación y pensaba que a él no le habían gustado.

Pasados dos días y cuando y...

La costa brava V

Pablo cogió la cabeza de la morena y mirando a Patricia a los ojos empezó a follarla la boca. Las babas de la morena estaban haciendo un charco en el suelo y empezó ha hacer arcadas. La polla de Pablo la estaba llegando a la garganta.

La costa brava V

Amaneció un soleado día y después de cargar las maletas en el coche, entraron a desayunar. Patricia llevaba puesto el huevo vibrador y Pablo tenía el mando. Pidieron unos cafés y una churros y empezaron a tomar su desayuno. El huevo empezó a cobrar vida lentamente. Patricia miraba a todos lados y pareció contentarse al ver que nadie los hacía caso. Pablo aumentó un poco la potencia del aparato y Patricia lo miro con ojos de asesina.

-Deja de jugar joooo.

-No, no voy a dejarlo. ...