Fin de semana en la nieve
Se ruborizo, ese hombre la hacia estremecer, pensó en las maravillas que podrían hacer juntos bajo unas sabanas al calor de una chimenea, como sus cuerpos se buscaban, se deseaban... . Se levantó del taburete, dejando atrás esos pensamientos, que no la dejaban pensar con claridad.
Tenía las manos al rojo vivo, a causa del frío invernal, entró en el bar y observó que solo había dos personas en la barra, se dirigió hacia ella, el camarero la recibió con una sonrisa y le dio los buenos días. " No tan buenos, la verdad"- respondió ella con otra sonrisa y soplándose las manos para darlas calor. " Me sirve un café bien caliente y desearía leer la prensa"-.
- " Con el café la puedo ayudar, pero con la prensa no, el único ejemplar del que disponemos esta siendo usado por aque...