Pecados capitales
Unas cuantas aventuras recordando los pecados capitales.
GULA
Un maravilloso sabor a caramelo invadió mi paladar con el contacto de su lengua bañada en tan sabrosa golosina, mi lengua continuó su camino cuello a bajo, sin dejar una pizca del merengue cubría su varonil cuerpo, detuve mi boca en sus pezones y de un solo mordisco engullí cada una de las ciruelas que adornaban sus tetitas para continuar bajando lentamente, lamiendo con énfasis hasta su ombligo repleto de jugosa crema de cacahuete
- íSigue! íSigue! Cómete el postre - gritaba con f...