Acogiendo a Hasim. La quiebra.

Hasim, el refugiado que acogió la familia de Sara, da un paso más. Esta vez la joven española deberá acudir a un espacio donde se verá rodeada del resto de alumnos, profesores y padres de su Instituto. ¿Será el final de la resistencia de Sara o se romperá el círculo de humillaciones de Hasim?.

ACOGIENDO A HASIM.

LA QUIEBRA.

Sara estaba completamente desnuda.

Tendida sobre la fría tapa del inodoro.

Sus tetas se aplastaban contra la superficie ovalada de la tapa del inodoro del lavabo de caballeros sobre el que Hasim la había atado.

La había hecho extender las manos y usado las abrazaderas de su trabajo de jardinería para inmovilizar sus muñecas por detrás de la taza del inodoro y obligarla a mantener su posición.

La cabeza de Sara quedaba a un lado, pegad...

Acogiendo a Hasim. Noche musical.

Sara, la joven adolescente, regresa a casa con Eva y Hasim. ¿Ganará la rebeldía de la chica o aceptará su destino como su madre bajo la tutela del refugiado iraquí?. ¿Habrá dolor o placer?.

ACOGIENDO A HASIM.

NOCHE MUSICAL.

Después de que entre Hasim y su propia madre organizasen las nuevas humillaciones y abusos en la vivienda semi en obras y semi abandonada, regresaron a la casa familiar.

La casa de la familia de Sara.

No la de Hasim.

La casa que el refugiado había mancillado con su presencia.

La casa donde había comenzado el calvario para la pobre Sara.

La casa en donde Sara había descubierto una faceta perversa de Eva, su madre, que nunca an...

Acogiendo a Hasim. Dolor o placer.

La noche de Sara culmina con una nueva muestra del poder que Hasim tiene ahora con la ayuda de Eva, la madre de la chica.

ACOGIENDO A HASIM.

DOLOR O PLACER.

Allí estaba ella.

Una joven adolescente española de buena familia.

Una familia estructurada.

Una familia cristiana.

Destruida.

Destrozada.

Rota.

Y todo por culpa de ser buenas personas.

Por ser decentes.

Por cumplir con lo que creían.

Por ayudar a Hasim.

Hasim, el falso refugiado.

Hasim, el malvado inmigrante.

Hasim, el cerdo que había vuelto patas arriba toda su vida.

Ha...

Acogiendo a Hasim. La ensaladera.

La noche de Sara en la casa abandonada sigue bajo la dirección de Hasim, al que ayuda la madre de la chica hasta extremos que no se podían sospechar. Y el premio por superar la noche no será una ensaladera tradicional.

ACOGIENDO A HASIM.

LA ENSALADERA.

¿Kiar?.

¿Kiar?.

¿Qué era el kiar?.

¿Qué nueva maldad iba a desencadenar Hasim?.

La pobre Sara temblaba, intentando de forma instintiva encogerse como si de alguna forma pudiera hacer que su cuerpo pasase desapercibido.

No podría.

Y lo sabía.

Eso era lo peor.

Estaba atrapada.

No de una forma estricta. En cualquier momento ella habría podido sacar su cuerpo a través del agujero en la pared en una u otra...

Acogiendo a Hasim. La pared.

El destino cierra sus mandíbulas sobre Sara. ¿Será capaz de escapar o se rendirá frente a Hasim y se someterá como su madre?.

ACOGIENDO A HASIM.

LA PARED.

Estaba sola.

Sola y sucia.

Sola, sucia y humillada.

Tenía escalofríos.

Pero no eran de frío.

Tiritaba por fuera, pero por dentro ardía.

La espesa lefa de Hasim ardía dentro de su palpitante y enrojecido coño.

Notaba como rezumaba.

Sin mirarse, sin tocarse, Sara era capaz de sentir cómo parte del asqueroso fluido del refugiado iba saliendo por su enrojecido e inflamado coño y resbalando entre sus muslos para caer...

Acogiendo a Hasim. Punto ciego.

La situación de Sara se complica. Los días que va a pasar a solas con Hasim y Eva, su madre, serán una gran prueba para la joven en todos los sentidos.

ACOGIENDO A HASIM.

PUNTO CIEGO.

La comida fue un auténtico asco.

No era que no tuviera hambre, era tan sencillo como que su madre había aceptado como buena la idea de Hasim de que no quería lavarse la boca después de la intensa mamada que había tenido que hacerle mientras Eva hablaba por teléfono con su padre delante y junto a ella.

Aún podía recordar cómo las manos de Hasim y Eva, su propia madre, la habían forzado a completar la mamada hasta lograr que la polla del cerdo ára...

Acogiendo a Hasim. Hablando con papá.

Las aventuras de Sara siguen. Después de contemplar como Hasim sodomizaba a su madre, nada será igual.

ACOGIENDO A HASIM.

HABLANDO CON PAPA.

Volvieron tarde.

Pasaron varias horas en el centro sanitario.

Fueron momentos muy incómodos para Sara.

Ya de camino, su madre la pidió que no contase nada, que ella ya sabía qué decir.

Sara estaba en estado de shock.

Encontrarse a su madre así, desnuda, atada y sometida a las necesidades sexuales de Hasim era algo que la sobrepasaba.

Era incluso peor que lo que había tenido que pasar ella desde la llegada del refugi...

Acogiendo a Hasim. La Pecadora.

La estancia de Hasim en casa de Sara entra en una nueva fase. ¿Soportará la chica los cambios o se resquebrajará como un cristal?.

ACOGIENDO A HASIM.

LA PECADORA.

Literalmente reventada.

Así se despertó Sara.

Se sentía cansada, más agotada de lo que nunca había estado. Y, sin embargo, después de dormir apenas tres horas, ahora era incapaz de mantenerse en el reino de los sueños.

O de las pesadillas.

Porque incluso en sus sueños, Hasim había estado presente.

Lo sabía.

Ya casi no recordaba nada, pero sabía con total seguridad que había sido el protagonista del sueño… ¿o pesadilla?......

Acogiendo a Hasim. El coche de papá.

El mundo de Sara cambia cada vez más. Desde la llegada de Hasim, acogido por sus padres, la vida de esta joven española cambia radicalmente.

ACOGIENDO A HASIM.

EL COCHE DE PAPA.

Después de todo lo sucedido la noche del viernes, Sara pensó.

Pensó en ella. Pensó en Hasim. Pensó en su familia.

Porque estaba hecha un lío.

Odiaba a Hasim. Era un mentiroso. Un cerdo absoluto. Un cabrón.

La había utilizado como si fuera un objeto cualquiera. La había humillado en privado… y en público delante de unos desconocidos a los que la había vendido para ser usada como si fuese una muñeca de plástico sin personalidad ni...

Acogiendo a Hasim.Consecuencias de una larga noche

La noche del viernes no ha terminado para Sara. Habrá dudas, habrá nuevas preguntas, habrá ¿consecuencias?. La vida de esta estudiante española de bachillerato no será la misma después de que sus padres acogieran "por unos días" a Hasim.

ACOGIENDO A HASIM.

PREGUNTAS Y DUDAS. DUDAS Y PREGUNTAS. CONSECUENCIAS DE UNA LARGA NOCHE.

Lloré durante un buen rato.

No lo pude evitar.

Pese a que tenía los párpados cubiertos de lefa de unos desconocidos y casi no podía abrirlos, lloré.

De rodillas en el frío suelo del garaje, desnuda y con restos de lefa por toda la cara y el cabello y gotas por casi todo mi cuerpo.

No recuerdo cuánto tiempo pasé llorando allí después de que Hasim se marchase.

Estaba rend...