En la playa
Aburrida y despierta desde bien temprano se va a hacer footing, sin saber lo que va a disfrutar con ello.
Salió del trabajo, se despidió de sus compañeras y tras intentar quedar con alguien, se quedó más sola que la una, y caliente como estaba se marchó a su casa.
Tenía ganas de darse un meneíto con sus dedos antes de que llegase la hora de marchar y lo primero que hizo desde la planta veinte del edificio donde trabajaba fue sacarse las bragas en el ascensor y disfrutar de la lenta bajada del artefacto mientras se acariciaba su barbilampiño chocho, frotando con sus dedos la parte más sensible de su ser, s...