De vacaciones por el sur de Francia

Esta historia sucedió con mi mujer Ana hace unos pocos años durante unas cortas vacaciones de verano en una villa muy turística de la riviera francesa.

Fuimos en coche y sin niños con la clara intención de hacer turismo de sol y playa.

El coche es un lugar que permite todo tipo de caricias con una cierta intimidad. Me gusta masturbar a Ana mientras conduzco, que me acaricie y observar como ella se masturba a mi lado. Le costó mucho acceder a que yo la observara en estos menesteres, le daba una vergüenza atroz. Tuve que pedírselo un sinfín de veces.

En nuestras salidas de verano ella acostumbra a llevar un pareo y un tanga, a veces solo un...

La feria (2)

Mientras mi pareja se reía y disfrutaba de la atracción, el gitanillo empezó a agarrarse a mi cintura pero por debajo del vestido, me tenía cogida por la cuerda del tanga.

LA FERIA-II

Llegamos al recinto ferial, era bastante grande y con mucha gente, en el camino habíamos hablado poco y no congeniamos mucho, así que la cosa de momento no iba muy bien, eso si, el no me quitaba ojo de encima y yo de reojo ya había visto como alguna vez se había ‘empalmado’.

Salimos del coche y empezamos a caminar por en medio del recinto, el chico cada vez me parecía mas tímido y le costaba entablar conversación.

De pronto se le iluminaron los ojos, vio su atracción pref...

Un rayo de luz

Al final, decidí que ya era hora de levantarme y practiqué uno de mis actos preferidos: abrir las cortinas de mi dormitorio antes de vestirme, sin mirar si hay alguien que me pueda ver. Es mi forma favorita de dar los buenos días al mundo.

Un rayo de luz se colaba entre las cortinas de la habitación. Ya eran las diez y veinte de la mañana pero era sábado y tenía todo el día para mi sola, así que me quedé un rato retozando en la cama. Parecía que iba a ser un bonito día, por lo que me puse a pensar en qué podía ocupar el tiempo; podía ir a la piscina, aunque el bullicio no me apetecía, o mejor a un río o a algún pantano. Al final, decidí que ya era hora de levantarme y practiqué uno de mis actos preferidos: abrir las cortinas de mi dormi...

Todo estaba planeado

Mis amigos del MSN querían conocer a mi mujer y yo... no les dejé con las ganas.

Todo estaba planeado.

Una pareja de amigos del MSN me estuvieron insistiendo en que querían conocer a mi mujer a través de la webcam, pero yo sabía que a ella nunca le habían atraído los chat, así que decidimos que vieran como era sin que ella se diese cuenta.

A esta pareja, a los que llamaremos Lucía y Pedro, les conocí a través de otro de mis relatos, fuimos charlando, nos contamos muchas confidencias, y a la vuelta de unos meses pensamos llevar a la práctica el plan que habíamos organi...

Inicio voyeur

Descubrimiento de mi gran afición voyeur.

INTRO

Os voy a contar el episodio más oscuro de mi vida, de eso hace ya 25 años.

Eran años de descubrimiento de todo lo relativo al sexo, las hormonas fluían alteradísimas por todo el cuerpo, no creo que pasara una sola hora sin pensar en algún instante en el sexo.

Lo más importante de por aquel entonces era satisfacer mi curiosidad, tenía que saber más sobre lo que me estaba pasando, el por qué el cuerpo me exigía tanto. Vivía en un pueblo muy pequeño del interior, realmente en ese...

Sasha se desata 03

Ante nuestro asombro, Sasha asume nuestro juego y coge desaforadamente con mi amigo en mi precencia... y hasta me regala una felación (voyerismo, trío y sexo oral).

Sasha se desata

Perdón por el error, pero ayer envié un relato con este título que no era, así que hoy les mando el relato correcto.

III

  • Carlos… necesito bañarme… – le dijo Sasha al oído aun totalmente desnuda, roja de vergüenza y tratando de taparse con las manos. No se atrevía a vestirse pues podía llenar de semen su vestido.
  • Si, si… vaya… Ricky, vonos a mi casa porfa
  • Vaya vos… – le dije y emprendí el viaje de regreso. Por suerte el lugar de nuestra fiesta no estaba muy lejos...

Sasha se desata 02

El juego sigue adelante, solo que ahora Sasha conciente mi precencia y hasta me hace un regalito.

Sasha se desata

II

Me quedé solo en el cuarto mientras mi amigo y su novia se duchaban, oyéndolos claramente retozar bajo la regadera, aunque sé que no cogieron pues no oí gritar a Sasha. No sabía que esperaba el Ko de mi, yo solo era un muchacho tonto que, de la nada, se encontró metido en una serie de juegos lúdicos al lado de su mejor amigo… un pervertido sinvergüenza. Incluso dudaba que a ella le fuera a gustar que apareciera haciéndole mal tercio, querría pasar toda la velada sola con...

Sasha se desata 01

Los juegos de voyerismo con mi amigo Ko continúan, esta vez con su novia Sasha.

Sasha se desata

I

Carlos Ko era mi mejor amigo de siempre, mi alero para todo… o más bien, yo era su alero para todo. Era un sinvergüenza desvergonzado, un patán que a pesar de serlo resultaba muy simpático. Amiguero y extrovertido hasta el queque, parrandero empedernido y perro incorregible, no podía ver una escoba con patas que ya estaba babeando. Pero iba más allá, era un verdadero pervertido que gustaba de ser visto mientras cogía… y en eso especialmente, fui su alero.

En aquello...

Luci y la apuesta perdida

Un par de momentos morbosos con luci...

Luci y la apuesta perdida

Luci me vuelve loco, su cara de niña buena, sonrisa angelical, ojos redondos como salidos de un comic manga, boquita de piñón con labios perfectos y un cuerpo que deja sin hipo.

Todo lo dicho está bien pero hay algo que me en ocasiones me deja sin palabras y es lo tremendamente femenina que es en todo momento.

Situaros en este día, habíamos salido de compras y si hay algo que saca de mi el lado mas cerdo es cuando la veo probarse vestiditos. Esa carita d...

El cazafamosos

Historia de un paparazzi que se dedica a grabar a los famosos en la intimidad.

EL CAZAFAMOSOS

CAPÍTULO 1. EL CONTRATO

AÑO 2107. Sábado 21 de mayo 9:32 horas.

Sonó en el videófono una pegadiza canción de Susana Salazar; era el aviso de que alguien quería hablar conmigo. Me senté en mi sillón y pulsé el botón de recepción de la llamada por el sistema de manos libres. En la pantalla panorámica de LCD apareció un señor calvo, con gafas de montura gruesa, nariz ganchuda y tez morena y empezó la videoconferencia.

—¿Es usted Ernesto Fuentes?

—El mismo qu...