La aprendiz

Cómo sospechar que una incómoda operación en los testículos iba a originar una excitante tarde en el hospital...

LA APRENDIZ:

Allí estaba yo, en la consulta del médico, total y absolutamente acojonado. Tres o cuatro semanas atrás había empezado a sentir molestias en una zona muy delicada para los hombres, en los testículos. Acudí a mi médico, que inmediatamente me envió a un especialista, donde se me practicaron varias pruebas. Ahora estaba en su despacho, esperando los resultados de las mismas y tan asustado que la camisa no me llegaba al cuerpo.

¿Dónde se habrá metido este cabrón? - pensé - ¿qu...

Noche ardiente en el hotel!

Nos secamos y nos tiramos a la cama, la acoste y empece a besarla por todo el cuerpo, primero le lami los muslos, iba saboreando esas deliciosas piernas, hasta que mi lengua llegó a su empapado sexo...

Como siempre estaba yo ahí sentado, esperándola en el café de siempre, donde nos encontrábamos, estaba anocheciendo y ya me había tomado dos cafés, miraba el reloj, estaba impaciente; de repente la veo llegar, era ella, mi querida y ardiente Penélope, mi amiga, amante y confidente, que por cierto, que estaba vestida muy sexy y provocativa, una minifalda de jeans que dejaban lucir esas hermosas y carnosas piernas, mmmmmmmm que manjar!!!.

Lucia una escotada blusa que dejaba lucir esas fabulosas te...

Fijación oral

Ahora eres mi semen... y yo tu adicta.

Tu sentado en una silla, yo de rodillas entre tus piernas, tu falo frente a mi cara, erecto y provocante, me invita.

Recorro con mi nariz todo ese tronco que tanto amo, lo huelo, lo disfruto, inhalo su aroma a macho, desde el tronco hasta el capullo.

Mis pezones se endurecen, mi boca se hace agua, mi lengua se pone ansiosa, mi entrepierna se inunda toda.

Empiezo mi camino en tus huevos, los envuelvo en mi lengua y los beso, ahora soy candela ardiendo por el placer que me da tu sabor. C...

De camino a Xalapa

No pensé que el viaje fuera tan placentero... ;)

En el autobús a Jalapa

Por algunas razones tuve que ir a la capital del Estado, para ver cosas de la Universidad, ustedes saben, que las firmas en los documentos y otras cosas que, si no vas tú, a la escuela le vale madre. Pero en fin, eso no tiene importancia, bueno, no tanta como contarles lo que me ocurrió en el viaje, que yo pensaba que iba a ser de lo más aburrido, pero mira que la vida te da sorpresas (mmjm).

Abordé el autobús como a las diez de la mañana, me daba güeva irme temprano...

El mamey es una fruta deliciosa

Una tarde de trabajo en la casa de una amiga puede traer sorpresas muy agradables.

El mamey es una fruta deliciosa

por Rolocacho

Puse mis manos sobre los hombros de Ximena y la empujé suavemente hacia abajo, para que quedara sentada en el sillón. Abrió los ojos incrédula.

–¿Qué haces? –preguntó, levantando su hermosa cara para mirarme a los ojos.

–No te preocupes, Ximena. Sólo relájate, porque te lo voy a hacer... –y traté de sonar tranquilo, aunque hervía de excitación y de nervios.

–¡¿Estás loco?! –exclamó. Se puso de pie, pero no se alejó de mí.

...

Síndrome de estocolmo a 31.000 pies

Puede ser que la seducción y el deseo hagan enloquecer hasta al mas cuerdo. Esta es mi versión depurada del relato que envié para el ejercico de autores Número XXII

Síndrome de Estocolmo a 31.000 Pies

Me espera un largo vuelo trasatlántico y debo confesar que la idea de estar encerrada en un avión me causa pánico, esta vez, la dosis será de doce horas como mínimo… espero poder dormir al menos la mitad del trayecto… así que prefiero irme a la cama lo mas tarde que me sea posible.

Ha llegado la hora y debo subir al avión, ahora si empieza todo mi padecimiento, las azafatas dan las explicaciones de seguridad, en esta oportunidad me han asignado una silla...

Una noche a pleno sexo oral

Nos sentamos uno al lado del otro, abrazados, desnudos, sudados, con olor a sexo, exhaustos, nos acariciamos, nos besamos en la boca, estuvimos asi acariciándonos, besandonos, por un largo rato, luego...

Era una fecha muy especial, para mi y más para ella, me encontraba en mi casa viendo televisión, era de noche, le envié un mensaje de texto al celular y me respondió al instante diciéndome que me extrañaba, que le hubiese gustado que estuviera ahí con ella; seguimos intercambiando mensajes de texto por 10 minutos, hasta que me decidí a darle una sorpresa, ir para estar con ella esa noche.

Entonces la llamé por teléfono y le dije que hoy podría ser una noche muy especial, que lo que más esperaba...

Este profe sí que sabe

Esta historia no es real pero me hubiera gustado que lo fuera.

Me llamo María y tengo 18 años, este año estoy estudiando 4º de ESO. Sí ya sé que no es el curso que me corresponde, pero es que soy muy mala estudiante, así que ya he tenido que repetir curso dos veces. No es que no pueda con las asignaturas, me considero perfectamente capaz de ello, pero es que no la hinco. De todos modos, este último año decidí dejar de hacer el gilipollas y tomármelo en serio. De hecho, aprobé casi todas, pero a pesar de mis esfuerzos me volvieron a quedar las sociales para septie...

Emputecida en Nueva York

Mickey me invita a visitarlo a Nueva York y pronto averigüé que serían unas vacaciones muy calientes.

Emputecida en Estados Unidos.

El pasado mes de diciembre, Miguel, un ex galán que tuve, me invitó a que me pasara unos días con él en Estados Unidos; él vive en Nueva York desde hace ya unos 5 años. En ese momento tenía novio y para poder irme, le dije que me iría con unos primos a casa de un tío que vive en Colorado. Lo malo es que me cachó y regresando nos peleamos y terminamos. Ni modo, es el riego de andar de traviesa.

Mickey es uno de los mejores amantes que he tenido –creo que Alejan...

Excavando a la Arqueóloga

Una hermosa arqueóloga inglesa tendrá que apaciguar con algo más que dinero a un militar turco para poder seguir con sus excavaciones.

EXCAVANDO A LA ARQUEOLOGA

Dr. Kleizer

A la esbelta doctora Ross le habían advertido que iba a tener problemas con el gobierno turco. Eso no detuvo a la intrépida rubia de treinta años. La Universidad le dio fondos suficientes, tanto para los gastos de la excavación en sí como para sobornar a algunos funcionarios turcos, como siempre sucedía.

Llevaban una semana bajo el inclemente sol, desenterrando los restos de un ejército persa aniquilado por las huestes de Alejandro el Grande. Su...