Gigoló y pintor
Doña Fátima se corrió haciendo un arco... El jugo que salía de su coño bajaba por su ojete. Al acabar de correrse no me lo tuve que pensar dos veces, saqué la verga del coño y se la metí en el culo...
-¿Cuánto tiempo te podría llevar pintar la casa?
Mirando para unas grietas que había en una pared, le respondí:
-Quince o veinte días.
-¿ A cuánto?
-A quinientas pesetas diarias.
-Me parece bien.
-¿Ya compraron la pintura, los tintes, la escayola y la lija?
-Sí, cincuenta kilos de pintura, cinco de escayola, tintes y diez papeles de lija. ¿Llegarán?
-Para empezar. Ya les diré cuanto más tienen que comprar.
Las azules pupilas de la mujer se clavaron en el...