Hércules. Capítulo 29. Amor Griego.
Arabela apartó su mirada de la caja y sus ojos verdes se fijaron en Hércules. El calor y la suavidad de sus manos se expandieron por su cuerpo provocando una placentera sensación. Hércules notó la excitación de la mujer y lo aprovechó para desviar su atención de la caja.
Capítulo 29. Amor griego.
La tempestad se hizo eterna, pero finalmente terminó y el barco pudo abandonar al mediodía el refugio de la ensenada para dirigirse a la costa este del islote. Tardaron menos de veinte minutos. Todos estaban ansiosos y expectantes. Todos podían sentir lo cerca que estaban de su objetivo y no podían contener su nerviosismo. El yate ancló a unos cien metros de la costa y bajaron un par de Zodiacs. En la primera iba Arabela, Hércules y los doctores Prados y Kovacs y en la ot...