Una historia diferente
Se sumergieron en una relación textual donde todo un mundo se abría por delante de ellos presto a ser descubierto
Erase una vez que se era, dos personas que quién sabe si realmente estaban predestinadas o no a encontrarse. Ella danzaba absorta entre capítulos, mientras el se sumergía y adentraba en la profundidad de los textos, dejándose imbuir por ellos.
El azar, un punto, una coma tal vez, un pequeño empujón inesperado, un traidor tropezón, y sus ojos abandonaron por un instante la lectura para sumergirse en los del otro. Ella se vio reflejada en esos espejos de color tabaco rubio, y se visualizó a sí misma d...