Poker en casa (2)
Después de nuestra primera reunión, esperaba con ansias locas la próxima.
El recuerdo de esa agitada noche de Diciembre estuvo presente en mi mente durante todo el mes de Enero. Esperaba con ansias no disimuladas la próxima partida de poker programada para fines de ese mes. Mi marido había sugerido que, en espera de su salida a vacaciones, adelantara mi viaje a nuestra casa de playa y lo esperara allí, a lo que me negué rotundamente. No quiero dejarte solo, le dije. No se si lo creyó.
Mis sueños eróticos en la noche anterior al último viernes del mes, hicieron que des...