Una noche mágica

¿Hasta qué punto era ella consciente de sus actos?

-Gracias por acompañarme, pedírselo a Román o a Kostia, era perder el tiempo. - sonrió la niña, y el chiquillo, rojo pero no del sol, asintió.

-Son unos inmaduros. Yo ya he comprado otras veces compresas, o tampones para mi madre. No tiene nada de particular.

-Sí, pero no es lo mismo comprarlos en el híper, que sólo tienes que cogerlas, a comprarlos en la farmacia de aquí, que hay que pedirlas... Has sido muy amable. - Tercero tomó la mano de su primo Renato y le besó en la mejilla. Éste son...

Cereales para merendar.

Carlos no sabía la situación que viviría en casa de su novia, cuando ella se preparaba para irse unos meses de la ciudad.

Casi eran las seis de la tarde cuando Carlos se dirigía a casa de su novia, Laura. Una sonrisa se dibujaba en su cara cuando recordaba las cosas que hicieron el día anterior, pues Laura se iba a ir unos meses fuera de la ciudad, y tenían que aprovechar el tiempo al máximo, y eso significa: mucho sexo.

Incluso por fin Carlos pudo disfrutar por primera vez de algo que le volvía loco. A Carlos le excitaban mucho los pies femeninos, y los de Laura eran realmente bonitos, usaba una talla 38, y sus dedos, s...

Violada en las fiestas del pueblo 4: Regreso

Tras las aventuras de mi madre en el bosque, espero que vuelva a la casa de Merche donde me esperan más sorpresas.

Regresé del bosque hacia el pueblo, angustiado y sin saber qué hacer.

Mi madre había sido secuestrada por un jinete que, después de violarla, se la había llevado desnuda montado en su caballo.

Intenté seguirla, pero me fue imposible.

Esto debió ocurrir hacía unas tres horas, por lo que me acerqué a la casa de Merche donde hemos dormido la pasada noche, con la esperanza de encontrar allí a mi madre.

Entré en la casa, pero no la ví. Subí las escaleras, pero tampoco estaba en el piso su...

Violada en las fiestas del pueblo 3: Sirena

Mi madre encuentra dentro del bosque una hermosa laguna, donde sucumbe a la tentación de disfrutar nadando desnuda en sus aguas cristalinas, pero nos esperan nuevas sorpresas.

Después de la experiencia que acababa de vivir mi madre en el bosque al ser follada, inicialmente contra su voluntad, y de la que yo había disfrutado tanto como espectador de primerísima fila, me encaminé hacia el pueblo, siguiendo el mismo camino que había tomado ella.

Ya era hora de comer por lo que lo más lógico era que se dirigiera a la casa donde nos hospedábamos con el fin de comer.

A lo lejos entre los árboles, distinguí el vestido de color rojo chillón que llevaba puesto mi madre. Era co...

Hasta esa noche (3)

¿Podía tener razón? ¿Realmente me gustaba todo esto de verme forzada? No, me dije a mí misma, lo que pasaba es que estaba tan sumamente excitada que había sobrepasado los límites de la cordura.

Pase un rato sacudiéndome y chillando como una loca, pero finalmente me rendí, totalmente exhausta. Lo cierto era que con ese ataque de histeria solamente había conseguido hacerme daño. Mis muñecas estaban enrojecidas y el dolor me impidió volverme a dormir durante mucho tiempo. Al principio había soplado sobre las heridas para mitigar el escozor, pero poco después estaba demasiado agotada incluso para eso. Así que estuve sola en esa cama, completamente inmóvil y en silencio, durante varias horas. Lo último...

Uganda 3

Carlos y Esperanza, perdidos en la isla, buscan ayuda y algo encuentran.

Carlos y Esperanza habían caminado unos 20 minutos por unas verdes praderas moteadas de pequeñas flores azules, cuando aparecieron los primeros árboles Mvule, típicos del sur de Uganda, que se fueron haciendo más espesos hasta convertirse en un tupido bosque por el que avanzaban con cierta dificultad.

Carlos iba hecho un figura con chaleco sin mangas abierto hasta el ombligo y pantalones de múltiples bolsillos, con un pañuelo al cuello y un stetson con cinta de leopardo en la cabeza que recordaba  a S...

Como seducir a una top model en 5 pasos (29)

La venganza

S i alguien quiere comentar, criticar, o cualquier otra cosa, puede hacerlo en mi nuevo correo:

la.janis@hotmail.es

Gracias a todos.

Janis.

LA VENGANZA.

Cristo se estaba zampando un chuletón de vaca de casi media libra, de esos que no se lo salta ni un galgo muerto de hambre. Se atareaba con tenedor y cuchillo de sierra, cortando láminas de medio grosor y embadurnando la rosada carne con salsa de queso y mostaza. En su mérito, habría que decir que no pidió pata...

Atrapada en el parque.

Una serie de sucesos desafortunados hacen que una chica quede atrapada en el parque a manos de un pervertido. Advertencia: este es un relato duro que trata de sexo forzado. No esperen romanticismo en él. Por eso está n la categoría de No Consentido.

Todos los días Anabel salía a las 7:00 p.m. en punto de la preparatoria particular a la que asistía y se iba platicando alegremente con sus amigas Elvia y Teresa, pues las tres vivían cerca; siempre llegaban al kiosco que estaba a la mitad del parque y ahí se despedían y se separaban, ya que Elvia y Teresa se dirigían hacia el norte y Anabel hacia el sur. El parque siempre estaba lleno de niños jugando y gente cuidándolos, así como ancianos que les gustaba sentarse en las bancas y descansar; por eso las chi...

Ya no podía decir que no

Bueno esto me paso después de lo que me hizo mi profesor de hecho fue al siguiente lunes con tres compañeros de mi salon

Ya que en mi relato anterior me pidieron una descripción aquí esta soy del df y soy de piel blanca mido 153 cm mis medidas son 110 de pecho 65 de cintura y 92 de cadera ojos café obscuro y cabello largo negro.

Pues como les contaba a la siguiente semana de lo que sucedió con mi profesor llegue a la escuela un poco temerosa ya que todo el fin de semana abuso de mi y me sometió de todas las formas posible.

En cuanto llegue entre a mi salón y tome asiento para esa hora ya habían llegado algunos...

Violada en las fiestas del pueblo 2 : Caperucita

Después de pasar una noche de la que no recuerda nada, mi madre vuelve al bosque a buscar una medalla que ha perdido, pero nos esperan nuevas sorpresas.

La luz del nuevo día entró por la ventana y me despertó en mi cama.

Estaba empalmado pero con unas ganas enormes de mear.

Escuché sin oír ningún ruido en toda la casa, así que me levanté y, sin calzarme para no hacer ruido, salí de mi dormitorio, cerrando la puerta, y fui al cuarto de baño que estaba en el pasillo.

Recordé la noche anterior, lo que la hicieron a mi madre y lo mucho que me gustó presenciarlo.

Meando, caí en la cuenta que la puerta de mi dormitorio no estaba cerrada co...