Sospechas y certezas (5)

Basta de sospechas. Esto no da para más!

(5) – Basta de sospechas. Esto no da para más!

Esa semana Mora volvió al trabajo, como siempre la dejaba en su escuela y me iba para el Ministerio. Las tardes eran iguales, llegar a casa y que ella no estuviera.

A media mañana del miércoles, me llama Ruben preguntándome si podíamos almorzar juntos, tenía que hablar algo importante conmigo, por supuesto le dije que si, y me dijo de encontrarnos cerca del Ministerio para que no estuviera tanto tiempo fuera del trabajo. Le dije que si le parecí...

PAMELA - Capítulo Final y Epílogo.

El final de la historia de PAMELA.

Gerardo:

Miércoles 08 de diciembre de 2020. Mañana.

“- ¡ASI TE QUERIA ENCONTRAR!” Escuchar ese grito mientras una palma de una mano femenina sacudía mi rostro fue la prueba rotunda que una de mis suposiciones era la correcta. Pamela resultaba ser mi esposa. Pero ojo, incluso con esta prueba, aún pensaba que Pamela me había traicionado y que de alguna manera hubo complicidad entre ella y Cinthia.

“- ERES UN HIJO DE PUTA!” gritó Cinthia llena de ira y dolor. “- ¿ASIQUE TE IBAS A ENCON...

Con la misma moneda

El dolor, la incomunicación, la indiferencia

Con la misma moneda

Capítulo 1

A mediados de febrero

—¡Qué hijo de puta!

Mayte coge una de las manos de Patricia entre las suyas. No se puede creer lo que su amiga le acaba de contar. Siempre había sospechado algo pero eso, ¡es tan fuerte!

Patricia oculta sus enrojecidos ojos tras unas grandes gafas de sol. Han quedado en una cafetería donde no es probable que se puedan encontrar con nadie, así podrán hablar con tranquilidad y su deplorable aspecto no suscitará ningún com...

La visita de mi cuñado #3

Las cosas en la casa se vuelven más intensas.

Capítulo 5 – Decisión

Me quedé pasmada sobre la silla, con la boca abierta por la sorpresa y el cuerpo temblando de miedo.

Oscar me miraba con un gesto tan serio que me era imposible saber lo que estaba pensando, pero a juzgar por lo que acababa de decirme, no podía ser nada bueno.

—¿Qué… qué haces aquí? —pregunté tartamudeando, no podía hacer otra cosa.

—Me salté la universidad —dijo, encogiéndose de hombros con tranquilidad —. Tenía que verte.

Tragué saliva…

—Yo… esto n...

Una teoría compleja para un amor eterno, 12

Un tratado imperfecto sobre el amor.

NOTA: CAPÍTULO ANTERIOR NARRADO POR TURISTA.

CAPÍTULO XXIII

UN AÑO DESPUÉS

EL FACTOR TIEMPO COMO “CONDITIO SINE QUA NON” PARA ADQUIRIR CONOCIMIENTO

Sábado, 3 de diciembre de 2016

10:30

LOS SIGNOS DEL ZODÍACO: OFIUCO

Amaia.-

Las cosas se ven con otra perspectiva cuando permites que el tiempo rebaje las tensiones.

Tras casi un año desde que Albert dictara su “sentencia” de ostracismo contra mí, acordamos tener una reunión para revi...

Mi esposa no quiere intercambios - II

Nunca te quejes de lo que Dios te da, porque siempre puede ser peor... o mejor ¡Quién sabe! Pero nunca será igual.

Y esa tarde de sexo, cambió mi carácter, mi forma de ser y mi vida. Y todo mi matrimonio.

Esto os lo decía en la parte final de mi relato anterior, el que escribí para vosotros a instancias de mi esposo, para que todos conociéseis mi radical transformación como mujer y como animal sexual.

Al día siguiente, me levanté dolorida, apenas podía mover las piernas de los dolores que tenía en el ano y en la vagina, sobre todo en esta por las fricciones del látex, aunque el culo mejor dejarlo aparte...

La llegada de mi cuñada (parte 3)

Tercer día de convivencia. Tarde en la playa con mi cuñada y mi novia.

Al día siguiente mi novia tuvo el día libre por lo que tuve que posponer mis planes de follarme a mi cuñada.  Raquel quiso ir a la playa y aunque a mí, no me apetecía mucho, era vital que no sospechara nada.  Lucía había quedado con sus amigas por lo que en un principio sería una tarde en pareja. No obstante, cuando se enteró de que íbamos a ir a la playa, nos dijo que se habían cancelado sus planes y nos preguntó si podía ir con nosotros. Raquel lamentó que sus planes se chafasen y, naturalmente, le dijo q...

Mal dadas 4

La historia llega a su fin

Mal dadas 4

Mientras abrazaba a Erika, entro otro mensaje en mi móvil. El mensaje venía de parte de laura y decía.

• Polígono x nave cuarenta y ocho, segunda planta, diez hombres, ten mucho cuidado Pablo.

Mire a Erika y le enseñe el mensaje, pude notar desconfianza en sus ojos. Era la única pista que teníamos de las chicas, decidí fiarme de una persona que nos había traicionado.

Erika y yo cogimos el coche, creo que no he corrido tanto en mi vida. Me preocupaba si estaría prepara...

Cambios mi versión 7ma parte

Sandra estaba avergonzada de como perdió el control de su cuerpo en la finca, al estar con tantos hombre a la vez, por eso pensaba evitar tener contacto con los viejos. Solo que a la final, ella misma sin querer volvería a caer en juego sexual de ellos, y hasta pensaba en ser la amante de los dos, siempre que ellos le guardaran el secreto. Ya que su marido seguía con el pensando que ella jamás le seria infiel, menos con dos viejos. Mientras él será acosado por la nueva criada.

Cambios mi versión 7ma parte

Sandra estaba avergonzada de como perdió el control de su cuerpo en la finca, al estar con tantos hombre a la vez, por eso pensaba evitar tener contacto con los viejos. Solo que a la final, ella misma sin querer volvería a caer en juego sexual de ellos, y hasta pensaba en ser la amante de los dos, siempre que ellos le guardaran el secreto. Ya que su marido seguía con el pensando que ella jamás le seria infiel, menos con dos viejos. Mientras él será acosado por la nueva cri...

Sospechas y certezas (4)

Más sospechas, ¿qué más me oculta?

(4) – Más sospechas, ¿que más me oculta?

El lunes siguiente, llegué a casa y por supuesto Mora no estaba. Era todo tan raro, se me habían instalado tantas sospechas, que todo el tiempo pensaba si realmente Mora me estaba engañando, y necesitando alguna respuesta, algún dato, algún indicio, volví a revisar su cajón de ropa interior. Aquella bolsita blanca con ese conjunto que creí, era para sorprenderme, ya no estaba en su cajón y no vi ninguna prenda desconocida. Decidí hurgar entre el resto de su...