La guerrera 10
El príncipe del reino está amenazado de asesinato. Nuestra protagonista le protege muy de cerca.
—Mañana seguimos Tam, ya está bien por hoy.
—Sí, creo que es hora de retirarme, Bekelar.
El capitán se marchó, me quedé observando el tablero un rato más y me levanté para acostarme. La partida estaba muy igualada. Mientras me desvestía di vueltas a los asuntos del día. Me preocupaba sobre todo el problema del oeste, mi padre, el rey, no acababa de decidirse a mandar al ejército. Bueno, mañana lo discutirían en la enésima reunión sobre el tema. A veces ser príncipe era agotador, claro que tenía...