Oscuras relaciones (5)
Perdiendo el control Vidrios la tomo por los brazos y la levanto para acomodarla bajo de él, le abrió las piernas y se desabrocho los vaqueros, la erección amoratada latió dolorosamente al salir de su encierro, la humedad de ella y su olor le embriago los sentidos -Siiii, hazlo, métela, hazlo-
(Siento mucho la demora intentare apurar las continuaciones de los otros relatos)
Una garra poderosa de uñas afiladas se enterró en mi brazo hasta casi el hueso, John o lo que sea que fuere ese monstruo rugió una carcajada maléfica. Hasta aquí había llegado la vida de una pequeña mesera rubia que todo el mundo tomaba por tonta.
Hice algo que hacía mucho no practicaba, recé mentalmente un padre nuestro encomendándome a Dios, solo esperaba que el final fuera rápido y sin dolor.
-Cuando termi...