La petite mort

“La petite Mort”: Término con el que coloquialmente se refieren en Francia al orgasmo. Relata la relación entre Angel, un joven gigolo, y Clara su clienta más especial

LA PETITE MORT

"La petite Mort": Término con el que coloquialmente se refieren en Francia al orgasmo

ANGEL

Dicen que cuando uno siente que va a morir, toda tu vida desfila ante tus ojos como en una película.

En realidad no sé quien soy, no tengo recuerdos infantiles de familia, mis padres murieron cuando yo tenía apenas un par de meses en un incendio de la chabola en que vivíamos, en el que por poco yo también perezco. No sé exactamente que sucedió, ni probablemente quiera e...

Las guarras de las Galaxias, episodio II

Star Warris, episode II. Acción, sexo, cachondeo, sexo, emoción, sexo, humor, sexo, intriga y... ¿Hemos dicho que también hay sexo? ¡Pues sí! Un derroche de sexo pornogaláctico, erótico y episcopaliano con la garantía y sello de denominación de origen de los más grandes (no gordos, ¿eh?) de esta página: el Masu y la GatitaK.

ESCENA IX.

(Vitus y Domi –con esas pintas de putón verbenero no procede llamarla sor- realizan el trayecto entre la estación espacial y el centro lúdico de Deimos en aero-taxi. Ella está impresionada con el espectáculo de luces que se extiende hasta el horizonte. El, cabreado. ¿Desde cuándo ya no se puede fumar en los aero-taxis?)

-¡Dios bendito! Yo pensaba que en Deimos sólo habría unos cuántos casinos, pero esto es impresionante. Está abarrotado. Sodoma y Gomorra juntas.

-Lo que tú...

Un día de playa (3: Preparando la orgía)

De nuevo con todos vosotros esperando de todo corazón que mi relato os sea agradablemente caliente. Besitos.

Un dia de playa III – Preparando la orgía –

Siete de la tarde. Finales de junio. Una hermosa playa de la Costa Dorada. El sol que comienza a retirarse, poco a poco. El cielo de un azul límpido, ni una nube. Una temperatura agradable, cálida, ideal para el amor y el sexo. Un grupito de personas con la piel tostada por unas cuantas horas de bronceado intensivo. Nosotros y nuestros cuerpos desnudos y colmados de placer... No, colmados no.

Quien haya vivido una experiencia similar sabrá que el...

Las guarras de las Galaxias, episodio I

Star Warris, episode I. Primera entrega de esta irreverente, apasionante y... finalmente muy guarra trilogía, creada bis a bis por dos figuras literarias, o sea, dos degeneraos: el Masulokunoxo y la GatitaKarabo.

PRÓLOGO

(La profunda voz en off, a los acordes de una épica banda sonora –con profusión de “tachán-tachán”-, relata los sucesos previos a la acción, aprovechando la interminable sucesión de títulos de crédito).

En un futuro no muy lejano, en una galaxia muy, muy cercana –tanto que no hace falta salir de la que conocemos-, la orden Espacial Teresiana lidera la expansión católico-budista por el espacio exterior, ajena a las convulsiones que sacuden a la vieja Tierra.

La tortilla polí...

Moldeando a Silvia. Versión apócrifa (33)

Moldeando a Silvia. Versión apócrifa (33)...

Prosigo con mi versión particular de la obra de Federico. Gracias por vuestra paciencia y espero pronto ir cambiando algún personaje.

Un saludo.

Alvaro y Sandra.

Satur cayó al suelo sin conocimiento mientras Luis se recuperaba y miraba a Benito con recelo por si también había ostias para el.

— Oye, ¿tu no eres el chofer de Silvia? ¿También eres su guardaespaldas?

— Algo así. Puedes levantarte, tranquilo, no te voy a pegar. En cuanto a ti — dijo dirigiendose a Silvia — vete a...

Sólo calla y ven

Una frase válida para muchos contextos...

"Sólo calla y ven"

(Una frase válida para muchos contextos...)

Sólo calla y ven

Fueron sus únicas palabras antes de colgarle por el móvil. Pero él no necesitaba más, sabía dónde estaba, sabía qué quería, y él quería lo mismo, lo necesitaba, ambos, se necesitaban.

Le encantaba haber recibido a esa hora su llamada, pues estaba preparándose para salir del trabajo, un trabajo en el que no se había centrado, no podía desde que sabía que ella llegaría pronto.

Corrió más d...

El convento

Historia de fantasia en un convento alejado de la mano de dios.

El convento.

Me encontraba perdido en el bosque. No sabía ni como había llegado allí. Solo me acordaba de que salté desde un coche en marcha intentando escapar de alguien, pero no me acordaba de quién.

Desfallecía mi cuerpo. Sentía un gusto amargo en mi boca. Necesita agua urgentemente. A lo lejos se divisaba una casa o algo por el estilo, pues mi vista se nublaba. Iba por una especie de sendero de tierra, pero no estaba seguro. Ni recuerdo cómo iba vestido. Estaba agonizante, y ya dejé...

Un día de playa (2: la sesión de fotos)

Cuando Carlos, mi maridito, se pone a sacar fotos es muy probable que las fotos salgan movidas... Mejor dicho, corridas!

Un dia de playa II - La sesión de fotos –

Francamente, no me esperaba que las cosas se decidieran tan pronto. Habíamos salido de casa que esos dos, Trini y Juan, ni siquiera se miraban y ahora, apenas dos horas después de nuestra llegada a la playa, los teníamos pegados como lapas y acaramelados como una parejita de adolescentes :

Oye, Carlos, deberías tomar algunas foticos de nuestros tortolitos, ¿no crees ?

Estaban tumbados los dos en la misma toalla. Trini, acostada de lado con...

La fiesta III - Un dia de playa-

¿Os venís a la playa con nosotros? Os puedo asegurar que vamos a pasar un buen rato juntos. Prometido.

LA FIESTA III – Un día de playa.

Cogimos los bártulos y bajamos las escaleras con el ánimo bien encendido, dispuestos a hacer de este día playero un recuerdo imborrable y perdurable :

Ponte delante con ella – le dije a mi maridito, dejando que Juan y Trini pasaran delante- Quiero que nos la calientes... ¡Que la pongas a cien !

Pero si ya está que arde... ¿Sabes qué me ha dicho nada más llegar ?

¿Qué ?

... que porqué no os ibais vosotros dos a la playa y nos quedábamo...

De ilusiones, fantasías y demás realidades (final)

Si no te has leído las otras tres partes o no te han gustado es una completa pérdida de tiempo que leas esta. Sé que eso me hará perder lectores, pero evitará que pierdas 20 minutos

X

Los días como aquellos no pasan, corren. Se te escapan porque si fueras Dios, si pudieses escoger por el mundo escogerías que te pasase justamente lo que te está pasando. No es algo demasiado frecuente, pero cuando sucede, la velocidad del tiempo cambia bruscamente sin necesidad de usar la luz como de excusa como hiciese Einstein en su momento.

Durante esos tres días nos seguimos viendo tanto como podíamos. Aprovechamos cada ocasión que tuvimos para comer juntos, o cenar, o simplemente t...