Primera vez

Desvirgación y pasión juvenil.

Estaba nerviosa. Era mi primera vez. Si bien antes me había masturbado, nunca había sentido con mis dedos lo que sentí con su miembro.

Aún siento un poco de vergüenza, aunque cuando me conecto por un poco de sexo cibernético soy bastante sucia, esa noche fue surrealista y muy excitante.

Estábamos en mi casa cenando. Era la segunda vez que nos veíamos, la primera fue en un café literario a cuadras de casa. Esa vez él vestía un jean común y una remera lisa negra, charlamos de libros y de música ad...

Eros

Una noche, mucha complicidad, mucha gente, mucho morbo, mucho calor...

Aquella noche habíamos quedado para ir a una céntrica cervecería a ver la actuación de un conocido actor de monólogos que, en aquella época, se dejaba ver frecuentemente en varios programas de televisión. No era nuestra primera cita, pero casi, habíamos salido dos o tres veces antes de aquella ocasión.

Llegamos tarde, la actuación ya había empezado y el local estaba lleno, no encontramos lugar donde sentarnos, así que solo pudimos quedarnos de pie, en un lateral del pequeño escenario, con la particu...

La terapia de la rosa roja

El sensual encuentro entre una experta en el sexo y su némesis.

Katherine, estaba sentada en su escritorio esperando a su próximo paciente; al igual que cada día. Este era un día común y corriente, nada fuera de la rutinaria vida de madre soltera y sexóloga profesional. Cada cierto tiempo miraba la fotografía de sus hijos extrañándolos y auto convenciéndose de que las extenuantes horas de trabajo que tenía a diario le darían la oportunidad de convertirlos en grandes eminencias. Como toda madre su vida se centraba en ellos. Casi no tenía vida social y sus mejores amigos...

Secretos entre dos almas gemelas

Una historian en la que una mujer casada y madre de una hija se encuentra con el que es el amor de su vida. Ninguno puede decirse lo que siente. Pero ambos dejan que sus cuerpos hablen por ellos.

Entramos besándonos como locos, te subo a mi cintura con mis brazos en tus piernas. Me encanta la sensación de estar juntos por primera vez, de sentir tu cuerpo, tus besos; tus manos en mi cuello. Me encanta sentir el aroma que desprende tu cabello al moverse de un lado al otro. Con una patada cierro la puerta para no desaprovechar ni un segundo el roce de tu cuerpo con el mío.

Recorro toda la habitación hasta colocarte encima del escritorio invadido por cosas sin importancia, que como puedo las lan...

Cuando cae la noche

Todo paso tan rápido, estaba perdida entre tanto placer, entregada totalmente a él, que perdí la noción del tiempo.

Al igual que todos los días me dispuse a darme una ducha, cené y me fui a la cama, unos minutos después llego él, me beso tiernamente el hombro y deslizo su mano por mi cintura, toco mi abdomen, volvió a subir lentamente y con la punta de sus dedos acaricio mis caderas; en ese momento me doy vuelta lentamente y lo miro a los ojos, lo beso tiernamente en los labios y dejo que mi mano recorra todo el dorso de su cara, hasta llegar a su mentón, él me mira directamente a los ojos tratando de no perderse ninguna...

Una noche inolvidable

Un relato basado en una noche de pasión, sexo y romance que te dejara con ganas de mas.

Era un Sábado por la noche, mi novio y yo nos dispusimos a mirar una película, como de costumbre, nos acostamos en la cama abrazados, y comenzamos a verla; entre miradas cargadas de deseo y de vez en cuando algún beso, el ambiente fue tomando cada vez mas temperatura. La gota que rebasó el vaso, fue cuando sin querer mi novio rozo uno de mis pezones, yo por dentro estaba ardiendo de deseo por que me haga suya, y el moría de ganas por poseer mi cuerpo, pero ninguno de los dos quería dejar de ver la película....

El olor de un abrazo

“De la vista nace el amor”, dicen… ¿será? En mi caso, del olfato nace una fantasía, nada me parece más excitante que un abrazo que dure varios minutos

“De la vista nace el amor”, dicen… ¿será? En mi caso, del olfato nace una fantasía, nada me parece más excitante que un abrazo que dure varios minutos, sin hablar ni hacer más que estar abrazados y que al separarnos, aún después de unas horas, ese abrazo haya dejado impregnado su olor en mí…

Creo que mis relatos han revelado cuán kinestésica soy, cuánto disfruto el contacto físico y, no hablo exclusivamente de una connotación sexual. Un abrazo que cubra todo mi cuerpo, un abrazo en el que pueda recost...

“¿De qué se nutre la nostalgia?”

Los que asume reales los reta a pensar si ese recorrido de tus labios por mi boca, por mi cuello, por mis pechos, realmente fueron sobre MI boca y MI cuello, MI cuerpo

Aunque me resulte doloroso aceptarlo muchos días sobrevivo pensando que nuestros besos fueron verdaderamente nuestros. Triste, pero te extraño, peor aún: te añoro…  hay días invadidos por una gran nostalgia, nostalgia por lo que fue y quise creer que fue real, por lo que no fue, por ti, por tus labios, por esa sensación de sentirme entre tus brazos, esas sensación de verte a los ojos mientras me penetrabas, esa sensación de sentir tus manos tomándome de los pechos desde atrás, esa sensación de ver como expl...

Confesiones Indecorosas

Gracias a mi calentura me gane tu amor.

Mi mente se puso a trabajar desde la primera vez que la vi. Típico en mí, no había pasado ni un minuto y mi mente ya había convertido las más tiernas e inocentes intenciones que podría tener, en sucias y bajas intenciones.

La verdad es que podría decir que ella tuvo la culpa, si bien no era su intención provocarme, lo lograba y sin siquiera esforzarse y Yo ya había caído completamente a sus encantos.

Admito que mis ojos se posaron primeramente en esas caderas pronunciadas y atrayentes, casi hipn...

Descubrir el placer contigo. Primera vez.

La historia de cómo hicimos el amor por vez primera. Mi patio y mi lavadora fueron el escenario de aquella deliciosa unión, tu yo y el deseo los protagonistas. La historia de cómo descubrí contigo los deleites carnales, y cómo desde aquél entonces me deje absorber por el placer y tu enorme miembro..

Siempre me consideré un alma pura, inquebrantable. No conocía yo mi lado salvaje, desenfrenado. Pero nada dura para siempre y no tardé mucho en averiguarlo. Todo comenzó cuando te conocí, a ti y a todas las bajas pasiones que en mi despertaste. Era demasiada la atracción entre los dos, podía sentirlo. Se que me deseabas, podía notarlo cuando me hablabas, cuando me mirabas. El contacto físico conmigo era demasiado duro de resistir. Lo sabía y me aprovechaba de ello. Me gustaba saberme deseada por ti. Descono...