Dominando a mis sobrinos y a otras personas.
Ese día aprendí plenamente ese desbordante PLACER que se experimenta DOMINANDO, CASTIGANDO Y MAS mucho más. Definitivamente es algo a lo que me podía acostumbrar.
Todo se sincronizó, sería la luna llena, las mareas, fue como si los planetas se alinearon de tal manera, o tal vez sólo fueron las hormonas por la edad que sé yo.
Ese día estaba desayunando con dos amigas y su plática solo era quejas y lamentos de su vida matrimonial, de su apagada vida sexual y una de ellas pedía consejo sobre si debía perdonar a su incorregible infiel esposo una vez más. La empatía que sentía al escucharlas me hacía recordar etapas ya muy lejanas de mi vida. Las escuchaba en s...