En casa me espera mi fiel compañera

En casa me espera mi fiel compañera, que está dispuesta a ayudarme a relajarme, cuidarme y hacerme placenteramente feliz.

El reloj está a punto de dar las seis de la tarde y tengo muchas ganas de acabar mi jornada laboral. Una tarde del mes de julio, con mucho calor y, saliendo y entrando, de aquí para allá. Mi cuerpo ha dicho basta ya de visitas a clientes, necesito un merecido descanso. Empiezan a venir a mi mente las escenas relajantes acontecidas el día anterior y que tantas veces se han repetido en las tardes de este asfixiante verano. Mi compañero, el de la mesa de al lado, siempre me está mirando. No para de fijar...

Heridas de guerra

¿Duelen menos que las de amor?

Heridas de guerra.

Nicole me despertó con un beso en la boca y un apretón en la entrepierna. En cuanto sentí el sabor de sus labios sobre los míos y sus dedos cerrándose sobre mi sexo, abrí los ojos y después de un saltó la rodeé con mis brazos y la presioné contra mi cuerpo, con tal emoción que no noté su desnudez y me olvidé que estaba en un campo de concentración, lugar donde las visitas estaban, más que prohibidas, penadas.

Hacía ya quien sabe cuanto tiempo que no la veía, que no la te...

Experiencia con mi hilo

Aquella tarde de un cálido marzo, cuando el profesor dijo su nombre, Valeria se levantó del asiento para pasar al frente. En ese instante se dió cuenta de un desarreglo en su ropa. El delantal se le había doblado atrás y dejaba ver sus perfectos muslos por completo; y apenas un poco de su tanguita metida entre los cachetes de la redonda colita, que era más blanca que una nube.

Aquella tarde de un cálido marzo, cuando el profesor dijo su nombre, Valeria se levantó del asiento para pasar al frente. En ese instante se dió cuenta de un desarreglo en su ropa. El delantal se le había doblado atrás y dejaba ver sus perfectos muslos por completo; y apenas un poco de su tanguita metida entre los cachetes de la redonda colita, que era más blanca que una nube.

Se dió vuelta y vio los inquietos ojos de Brigitte que la estaban espiando, y que al sentirse descubierta bajaba la vista...

Magdalena (1)

Descubriendo los placeres del sexo a los 27 años.

Magdalena (I)

A sus 27 años, la experiencia sexual de Magdalena era más bien poca.

Magdalena era una monada de criatura. No le sobraba ni faltaba de nada. 1 metro 70 de altura, 55 kilos perfectos, una cadera bien proporcionada, unos pechos talla 90 con unos pequeños pezones que miraban hacia arriba, erguidos, desafiantes, haciendo pasar a Newton por un estudiante de ciencias borracho. Su cara era también un prodigio de belleza. Cejas perfectas, nariz pequeña y graciosa, dientes blancos com...

Los descuidos de mi cuñada me excitaron

Nunca me interese en mi cuñada, hasta que de a poco comprendi que me podía calentar facilmente....

Los descuidos de mi cuñada me excitaron

No se trata un caso de incesto, ni de armonía, simplemente una mezcla de destino y algo de complacencia tal vez mutua que descubrí con el tiempo, con mi cuñada menor que por cierto carece de atractivos es poco más que pasable, sin cintura, piernas flacas, escasa cola, eso si tetas grandes; es decir fue - in crescendo - . Es totalmente cierto lo que relato, tal como lo viví en ese momento, salvo posiblemente supuestos (que los describo) y que queda a c...

Una noche de verano, caliente

El calor no me dejaba dormir, el baño me regalo otras sensaciones...

"Una noche de verano caliente"

(Autosatisfacción)

El calor me despertó y el bañó que tomé, me despertó otras pasiones

Me dicen Siam de cariño, pues siempre me han fascinado los gatos siameses. Les contaré un poco como soy, antes de empezar con mi relato: tengo 20 años, cumplidos hace seis meses, mido 1,75 y peso 68 kg. Mi piel esta bronceada por el sol, pues vivo en una zona costera; llevo el cabello largo, es rizado y de color castaño claro, hay mechones mucho más claros, por el efec...

Al otro lado del teléfono

No se puede describir un sentimiento, un deseo, y una noche de sexo contigo... al otro lado del teléfono.

Al otro lado del teléfono

La historia que os voy a relatar es real. Todo comenzó, y sucedió una noche. Pero para comprender mejor este relato debería contar como fue mi inicio en Internet, más concretamente en los chats. Yo tenía dieciséis años cuando me instale Internet. Al principio alucinaba con la idea de escribir algo en mi pc y que un fulano de Albacete pudiera leerlo (en aquella época era muy poco viajado y para mi, Albacete, estaba en las antípodas de Madrid).

Al principio todo...

Y tu botón duro

Una modalidad de cibersexo.

TU BOTÓN DURO

Este es un relato diferente a todo lo que había escrito antes, es una sesión de cibersexo a una sumisa, donde es posible que nada este en orden, porque ambos personajes sienten un gran deseo de estar juntos. Espero que les guste ;)

ÉL: Te llevaría a la cama a follarte como te mereces ha hacerte sudar tanto que te ducharas otra vez conmigo...

Llenarme la boca con tu coño, subir a tu boca para darte tu propio placer que tomes tu propia humedad mientras te acerco mi polla....

El video de Sasha

Fue aquella tarde calurosa de verano, en la que me di cuenta de que las paginas eroticas americanas son una buena base para un intensisimo orgasmo.

Si, reconozco que aquella noche fue algo extraña, mucho, pero me ha hecho cambiar la mayoria de las opiniones acerca del sexo que he podido llegar a tener a lo largo de mi vida.

Empezó bien entrada la tarde,un sabado de agosto, este calor que se te pega a la piel y hace que aunque te hayas duchado mil y una veces al cabo del dia, sigas teniendo esa sensacion de suciedad, a veces llegando al punto de la irritabilidad, impotencia y desgana por salir a la calle con este tiempo.

Era consciente...

La siesta de julio

Hace tiempo que lo escribí...es sólo un sueño...

Ufff… que siesta te has dormido….

Después de la comida y del bodrio de televisión estabas aburrida y no has querido ni dormir en el sofá, te has ido a la cama directamente. Es lo que tienen esas tardes vagas y calurosas de julio…total solo te queda un examen por hacer y un par de horas no te va a quitar ni dar el pase….así que… ¿qué mas da? Lo que ahora te da rabia, mientras recuperas la conciencia, es no recordar lo que has soñado, porque estas algo húmeda, excitada, caliente, es lo primero q...